Donante┆KM

👶┆𝐍𝐨 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐦𝐞 𝐚𝐜𝐮𝐬𝐞𝐧...

—mierda—el claxon del auto sonó. Poniendo su celular en altavoz llamo— hola, soy Park Jimin tengo una cita con ustedes pero no creo que alcance a llegar, quisiera reprogramar.

—Esta bien para usted, el próximo lunes—

—Sí, está perfecto— la ilusión que se había iniciado hace un mes en Jimin empezaba a darse, si bien había perdido la cita él ya estaba decidido.

El próximo lunes empezaría su nuevo proyecto de vida y sueño.

Al llegar a su departamento que era más grande de lo que había sido su casa de niño no podía sentirse más que cansado y con sueño, al comprarlo él había sido el más feliz. Jimin siempre supo lo que quería y el hecho de que de niño sus padres no le pudieron dar riquezas ayudó a que él tenga todo lo que tiene, gracias a su inteligencia ahora es considerado uno de los creativos audiovisuales más importantes en el mundo de la música respetado por muchos y envidiado por algunos.

Él sabía que su vida era perfecta, cuerpo perfecto y curvilíneo, una estabilidad económica muy buena, padres que lo apoyan... bueno casi, y un novio perfecto.

momento...

Jimin había perdido a su novio hace 5 meses, así que desde hace algún tiempo no todo para él era perfecto.

Ya acostado perdido en sus pensamientos que ya no trataban más de Eunwoo, si no del inexistente bebé que deseaba, el sonido de su celular lo sacó de su nube.

Con algo de molestia contestó— ¿Qué deseas? querido Taehyung—

—wao, querido Jimin no sabía que podías ser tan educado—

—se llama ironía, ¿para qué llamas?—

— para decirte que estoy a unas cuadras de tu departamento y que hoy nos vamos de fiesta—

—¿qué? primero deberías preguntarme si puedes venir a verme y...—

— sí, sí como sea. Ponte lindo— interrumpió a Jimin y colgó.

Kim Taehyung era su mejor amigo desde que inició su carrera como creativo audiovisual y lo apreciaba en serio pero no ahora bueno no en los momentos en que Jimin quería quedarse en casa soñando despierto con lo que pudo haber sido su vida, después llorar y atragantarse con comida grasosa que sabía que al día siguiente bajaría con horas y horas de gimnasio y así seguiría siendo el perfecto Jimin al que le daba igual haber terminado una relación de años justo cuando quería hacer eso llegaba Tae a distraerlo con miles de cosas que ni él mismo se daba cuenta que quería llorar en algún momento.

—vooooy— grito al aire cuando el timbre comenzó a sonar

***

—ves, esto esta mejor de lo que esperaba— decía Taehyung entrando a la zona VIP del club nocturno

—esta bien, tengo que aceptar que esta bueno pero igual hubiera preferido quedarme en casa— renegó Jimin detrás de Tae abriéndose paso en la mesa que había sido preparada especialmente para ellos —un Martini doble— Tae sonrío porque el que Jimin pidiera un trago doble significaba que iba a ser una gran noche.

—como digas, me podría traer algo para comer—el mesero le extendió el menú de comida y eligió obviamente el plato más caro y grasoso — de aquí comeremos los dos— sin más despidieron al mesero.

Acabando de comer todo era realmente excelente y Jimin no podía estar más agradecido de no haberse quedado en su casa llorando por alguien sin importancia. La pista se había encendido y ahora era una mezcla de gente rozándose una con la otra, los dos amigos que decidieron no hacerse de rogar y se arrastraron a bailar sin darse cuenta de que habían llamado la atención de unos ojos negros llenos de energía sensual.

Jimin sintiéndose observado mientras bailaba comenzó a buscar por todos lados, sus miradas se conectaron y sabía que esta noche solo iba para mejor.

—Vamos por algo de beber—  se dirigieron hacia la barra pidiendo unos tragos más

—Hola— aquel extraño con los ojos negros apareció de pronto alado de ellos pero su "Hola" fue más dirigido a Jimin.

—Hola— la ceja de Jimin se levantó con audacia y sensualidad ignorando por completo el hecho de que a su lado seguía Taehyung

—Te dejo amigo— susurro Taehyung a su oído y se fue  a seguir en la pista tal vez a buscar al lindo mesero que los había atendido.

—¿Te invito otro?— preguntó el extraño mientras los dos se acercaban más a la barra

—¿Qué tiene de malo mi bebida?—interrogó Jimin de manera sensual

— seguro que no tiene nada de malo, solo....—

—¿Solo?— cuestiono

—solo que un trago fuerte como el que tienes no va contigo— Jimin ante lo dicho río

—¿Cómo sabes lo que va o no conmigo? apenas me conoces— río y apoyó su mandíbula en su mano dándole una vista hermosa al extraño

—no necesito conocerte, tú, es más todo tú refleja ternura y deberías tomar algo que vaya contigo — Jimin río un poco más fuerte pero siempre con elegancia, las risas y preguntas no faltaron pero lo que hacía más interesante ese momento es que en varios puntos, bueno, no solo en varios si no en todos los puntos que tocaron los dos estaban en desacuerdo.

Bien dicen que los polos opuestos se atraen, había pasado ya una hora en la cuál la conversación seguía siendo interesante, la música resonaba y ellos se acercaban más quedando a centímetros, sus cinturas rozaban y respiraciones se mezclaban pero no se habían presentado oficialmente.

—Park Jimin— se presentó unos segundos antes de que sus labios se rozaran con los del extraño— dime tu nombre y edad—exigió, sabía que lo que sea que pudiera pasar tenía que ser legal, no se veía como un niño menor de edad pero sí menos que él, no había nada de malo en eso debía ser unos 3 o 4 años menor que Jimin

—Jeon Jungkook, 23 años— apenas esas palabras salieron de la boca del ya no tan extraño se alejó, sí, esperaba que fuera menor pero no tanto. Eran 10 años de diferencia, sin decir nada tomó lo último de su trago y  se dio vuelta para alejarse del tal Jungkook.

—hey ¿Qué pasó?— Jungkook lo tomó del brazo, Jimin siempre había sido sincero pero ahora lo que quería era irse.

—oye lo siento pero no quiero que me acusen de pedofilia o efebofilia y mucho peor tener que lidiar con alguien que no sabe que cualquier cosa que iba a pasar esta noche era algo casual, así que adiós— quiso correr de ahí pero Jungkook no había acabado

—espera, oye ni que fueras tan mayor. Sí, soy joven pero yo nunca te propuse algo más que solo charlar, así que aquí el que quería algo más eras tu— "sí, hazte el tonto Jungkook", pensó el más joven no queriendo quedar en ridículo

—sí, sí lo que digas por si no te acuerdas hace unos minutos casi nos besamos— Jungkook iba a alegar algo más pero Jimin lo calló — sabes, no me interesa. Adiós— se fue dejando atrás al que Jimin decidió seguir diciendo extraño a pesar de ya saber su nombre, buscó con la mirada a Taehyung y cuando lo encontró corrió hacia él.

—Hey ¿Qué haces aquí?— pregunto Taehyung en medio de la pista de baile— estaba esperando tu mensaje diciendo nos vemos mañana y tu ubicación en tiempo real—los dos fueron hacia la mesa

—no se dio, además no quiero ser acusado de asaltacunas—Taehyung se río fuerte

—¿Estás bien?— pregunto

—obvio que estoy bien, porque no lo estaría—

—pero cómo lo vas a estar bien si tu novio con el que duraste 5 años nunca te dio el anillo y apenas te corta resulta que se va a casar en 3 meses con un tipo que conoció hace dos— la cara de Jimin se transformó a una inconforme y de ira, Tae era un buen amigo pero se pasaba de sincero y él ni se daba cuenta

— Tae— gruño Jimin

—lo siento, sabes que me suelto y en mi defensa estoy tomado—Jimin no dijo nada más solo se limitó a beber y pedir más.