Wolf

Capitulo 34: "Tócame Sutilmente"

Horas después de que Sehun y Chanyeol partieran  aun conservaba aquella estúpida sonrisa pegada en mi rostro, su inesperada llegada marcaba el inició de mis nuevos sueños junto a él, el saber que Sehun ahora se encontraba junto a mi me reconfortaba a grados inimaginables, me permitía poder crear y construir un futuro junto a él y me persuadía a mejorar en cada aspecto posible para poder atesorarlo y resguardarlo para siempre, en palabras mas técnicas, me sentía irrevocablemente feliz, ahora el oxigeno y la sangre transitaban livianamente dentro de mi.

Mi madre instantáneamente notó mi evidente cambio de humor, no me importaba estar siendo bastante obvia de mis sentimientos frente a ella, en realidad había llegado a un punto en el que la opinión de mi madre me resultaba indiferente, de cierta forma aun le guardaba rencor por el hecho de haber mantenido oculta la verdad sobre el asesinato de mi padre, tal vez estaba siendo egoísta, pero no encontraba la forma de poder comprenderla o poder justificarla por haberlo echo, el tomar un poco de tiempo y pensar en mi pasada relación con ella, me arrinconaba a concluir que en estos últimos meses  no solo había perdido a una intima amiga, había perdido a una madre.

Aquel ser que alguna vez tuvo una imagen materna y protectora  ya no existía más, se había tornado en una figura cegada por el odio y el miedo, me mantenía cautiva y aprisionada en mi propio ser, cualquier cosa que hiciera o pensara, mi madre lo convertía en algo negativo, nos encontrábamos en un punto neutro en el cual no se puede avanzar ni retroceder.

Sin embargo Sehun acaparaba todo pensamiento negativo y me alejaba de mi mala situación con mi madre, el poder pensar en él y saber que volvería me llenaba de una inmensa felicidad, ahora tenia una buena razón para despertar con una enorme sonrisa pegada en mi rostro, durante aquellas noches no paraba de soñar con él, en algunos de mis atrevidos sueños, Sehun se encontraba en la cama justo encima de mí haciéndome el amor como solo él podía y sabia hacer, complaciéndome y haciéndome sentir mujer en todas las formas posibles, el estar separada de él por más de dos meses hiso que mi cuerpo y alma lo necesitaran urgentemente.

Tuvieron que pasar dos semanas para poder verlo de nuevo, en esa ocasión su acto de presencia fue una agradable y muy esperada sorpresa. Eran alrededor de las 14:30 hrs cuando me encontraba en la sala de estar checando el nuevo plan de estudios para el  próximo inicio de clases, cuando escuche ruidos provenientes más allá de las escaleras, me encontraba totalmente sola en casa, así que en contra de mi voluntad subí a inspeccionar que era lo que había provocado tales ruidos.

Subí las escaleras lentamente con el corazón en la mano, aquellos ruidos ahora se distinguían como pasos, una persona se paseaba de un lado a otro en mi habitación, sabia que el acercarme ahí sin ningún objeto con que defenderme  era una idea completamente estúpida, sin embargo trate de ignorar a mi sentido común y me dirigí a mi habitación, en cuanto estuve cerca, pude observar a aquel hermoso hombre vestido con prendas rosas husmeando en aquellas intimas paredes.

Cualquier miedo existente fue reemplazado por felicidad pura en cuanto vi a Sehun mirar detenidamente una fotografía mía de cuando era niña, sus manos tocaban delicadamente aquel cristal, como si se fuera a romper en el intento, tenia tantas ganas de correr hacia él y que me rodeara con sus brazos cálidos y protectores, tenia tantas ganas de poder devorar sus labios como nunca antes lo había hecho, tenia tantas ganas de él y solo él.