How Villains Are Made

Capítulo 15

Aiyana se encuentra a la vereda en medio del bosque sin nadie a su al rededor ni siquiera se logra escuchar el sonido del viento que sopla entre los arboles y a una distancia no muy lejana en medio de unos viejos pinos y grandes rocas se encuentra una vieja choza que es iluminada en su interior por la luz de algunas velas. Sin comprender que esta ocurriendo o el por que se encuentra de nuevo en ese lugar, la invocadora va al interior de la aquella choza que es muy cálida tal y como lo recordaba, para comenzar a recorrerla y al llegar a cierta habitación la invocadora duda si entrar en ella pues una avalancha de recuerdos inundad su mente cuando la sensación de una mano posada sobre sus hombros la hacen salir de aquellos recuerdos.

La invocadora nota al instante que se encuentra ahora dentro de aquella habitación iluminada levemente por la luz de la brillante luna que se encuentra afuera y aquella sensación de unas manos sobre ella desaparece cuando Aleksander se pone de pie a su lado haciendo que el corazón de Aiyana se acelere y una leve sonrisa sobre su rostro, pues esta vez Aleksander se encuentra con la apariencia de hace cientos de años con su cabello largo y aquel viejo abrigo negro que solía usar. El invocador la admira con un gran brillo en sus ojos y una sonrisa en su rostro.

-Sasha -musita.

-Mi dulce Yana -le toma con delicadeza ambas manos-, ¿Por que tardaste tanto?

-¿Tardar? -replica con la confusion en su voz, pues no Aiyana no comprende lo que esta ocurriendo.

-No importa ya, ahora estamos aquí.

-Aleksander...

-¿Creíste que me perdería la oportunidad de poder pasar el resto de mi vida contigo?

-¿Qué?

La habitación comienza a envolverse por una especie de niebla cegadora por unos instantes y cuando esta desciende Aiyana se encuentra en medio de una pequeña aldea y a su lado aparece Alina, ambas se observan por unos instantes antes de que en cuestión de segundos se encuentren rodeadas por gente corriendo y gritando. Ambas siguen con la vista a todas aquellas personas y a sus espaldas la sombra comienza a expandirse, avanzando lentamente hasta quedar ambas invocadoras consumidas por la oscuridad.

En medio de aquella oscuridad ambas invocadoras comienza a sentir un fuerte frio que les llega hasta los huesos, sobre su cuerpo comienzan a sentir la pesadez de su ropa y de repente ambas se encuentran sumergidas en el agua del mar autentico y a la distancia entre la poca luz que se refleja en el agua una larga sombra se aproxima hacia ellas dispuesta a atacarlas, pero momentáneamente esta desaparece. Tanto Alina como Aiyana se observan la una a la otra con confusion antes de que Aiyana sintiera que algo la toma de los pies y la jala con fuerza hacia lo mas profundo del agua. La oscuridad comienza a envolver a la invocadora de sombras de nuevo por unos instantes y en el momento en que aquella criatura que la tomo del pie la suelta, en medio de aquella oscuridad y el agua logra observar como si a traves de ellas se reflejara la imagen de un hombre vestido completamente de negro y el gran gorro de su capa que lleva puesta le cubre el rostro por completo y a sus espaldas el reflejo de colores naranja aparecen como si reflejara una especie de fuego, a su al rededor una especie de una gigante serpiente marina plateada se mueve formando un infinito y finalmente a su derecha del hombre aparece el ciervo observándola atentamente.

<<Son tu destino, así como tu eres el destino de el y el, el tuyo>> aquellas palabras suenan a su al rededor como un leve susurro. De nuevo todo se envuelve en la oscuridad y una vez mas aquella criatura la toma con fuerza del pie hundiéndola mas en el agua.

Los ojos de Aiyana se abren de golpe cayendo en cuenta, que todo fue un simple sueño. Aunque las sensaciones de el eran tan reales quela invocadora tenia esa sensación de estar ahogándose lo que le hace difícil respirar. Con pesades y procurando no hacer demasiado ruido para evitar despertar a los demás pasajeros del Edem, la invocadora se dirige hacia la proa para tomar un poco mas de aire fresco, logrando así que su corazón vuelva a un ritmo tranquilo y que esa sensación de ahogo desaparezca.