"ESPERANZA"

Cap 26

Bulma se paseaba de un lado a otro, frotándose las manos de los nervios, Lazuli le había dejado el departamento para que pudiera hablar a solas con Vegeta.
Está plática que tendrían definiría todo su futuro.

Ding- dong- sonó el timbre, Bulma se apresuró a abrir y ahí estaba él, quitándose las gafas luciendo un lindo, pulcro y elegante traje azul marino que lo había lucir jodidamente sexi. Bulma inmediatamente quitó ese pervertido pensamiento de poseerlo ahí mismo y concentrase en el tema que le preocupaba.

- Pasa.-

Vegeta intentó saludarla pero ella fue fría en su recibimiento. Le ofreció sentarse en la salita y algo de tomar.

- ¿Y para que soy bueno nena? - preguntó impaciente, no le daba buena señal la actitud de ella tan fría con él.

- Vegeta es...es sobre nosotros. Quiero que me digas que Soy para ti.-

- Eres todo nena , me encanta estar contigo y me haces sentir bien. Te quiero demasiado-

- Tanto para romper todo compromiso con tu prometida? -

Vegeta abrió los ojos no se esperaba esa pregunta, dejó el vaso en la mesita del centro y se puso de pie dándole la espalda a Bulma, hubo un silencio un tanto incómodo para ella que se le hizo eterno hasta que él habló.

- Nena, tu sabes que Kale está esperando un hijo. Yo...no puedo hacerle eso... La boda es este fin de semana...ya todo está preparado.

- Ya veo-Dijo Bulma conteniendose pues el enojo estaba haciendo de las suyas dentro de ella, aquella declaración de él le dolió en lo más profundo de su alma - entonces yo solo era tu maldito juguete. ¿Cuanto tiempo pensabas tenerme de amante distinguido Vegeta Ouji?-

- Nena ,no...- intentó abrazarla pero Bulma lo empujó sacando ahora sí el enojo contenido.

- ¡Suéltame! Que imbécil fuí. Solo estaba siendo tu juguete, nunca ibas a tener la intención de formalizar algo conmigo.
¡Pues te deseo que seas feliz con tu futura esposa!-

- Bulma por favor, no tomes las cosas de ese modo. Te quiero , por favor entiendeme, no puedo dejar sin un padre a mi hijo.

" Sin un padre a mi hijo" vaya juego de palabras que escogió pensó Bulma. Curiosamente el hijo de ella era quien crecería sin su padre. Porque dadas las circunstancias no pensaba decirle nada , estaba demasiada herida y molesta para confesarselo.

- ¡Largate. No quiero verte de nuevo. Esto se acabó. Mañana meteré mi renuncia en tu empresa.!

-¡Bulma por favor ! No seas caprichosa podemos manejarlo como adultos que somos. Yo puedo ofrecerte una vida cómoda. Vernos ...

- ¡Metete tus ganas de que sea tu amante por dónde te quepa Vegeta! . ¡No es No! Y ahora ¡ Lárgate quiero estar sola!

-Bulma. Por favor cálmate. Mira podemos hacer que funcione. Yo no quiero estar lejos de ti-

-Entonces termina con ella. Deja todo - volvió a decirle. Se sentía fatal por ser una hija de puta pero realmente la ira le hacia hacer y decir cosas que no quería. Ella amaba a Vegeta y quería de alguna forma que él la eligiera.

- No puedo...nena yo ..-

No terminó de decir la frase porque una bofetada se plantó en su mejilla. Bulma lo había golpeado. Ella se arrepintió pero ya era tarde. Su enojo la hizo estallar.

-Bulma...- Vegeta se talló su mejilla adolorida.

- Largate. - dijo ella con la mirada fría y le dió la espalda para no llorar frente a él.

Vegeta ya no le insistió. Decidió dejarla sola para que pensara bien las cosas. Se sentía tan seguro de su mismo de que terminaría por convencerla de que estuviera con él.
Se retiró y en cuanto salió por esa puerta Bulma se quebró y se puso a llorar amargamente.

..........

Los camilleros se hacían espacio de forma veloz entre las enfermeras o médicos de la sala de emergencia.

-¡Rápido al quirófano está perdiendo mucha sangre!

El doctor encargado de la sala se emergencia rápido se puso su bata ayudado por sus enfermeras. Entraron al quirófano y comenzaron a asistir al fiscal quien estaba en muy mal estado.
Le extrajeron la bala y empezaron a suturar las heridas abiertas y detener el sangrado que estaba teniendo.
De pronto la máquina que media el ritmo cardíaco comenzó a pitar.

- El paciente está entrando en paro doctor -

- ¡Rápido el desfibrilador! - el doctor inmediatamente puso manos a la obra para reanimarlo- Los minutos eran cruciales para salvarle la vida o perderlo.

Entonces la máquina hizo el sonido que nadie quiere escuchar,el del corazón dejando de latir ....

Continuará....