Capítulo 14

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Dejen aquí sus "ya llegué" o lloro D:

* * *

"Lo difícil no es olvidar el pasado, es olvidar el futuro que te imaginaste."

"El peor sentimiento no es estar solo, es ser olvidado por alguien que tú nunca vas a olvidar."

"Lo malo de soñar contigo, es que despierto sin ti."

[...]

― TN― La tomé de las manos ignorando su petición―. Me gustas. Se mi novia, por favor.

― ¿E-e-eh?― Ella me miró sorprendida― N-no sé... Déjame pensarlo.

― Está bien, aunque tú sabes que me vas a decir que sí.

Y, cuando pensaba que era feliz, que nada podría estropearlo, sucedió. Todo fue a peor.

Nadie nos advirtió que extrañar es el costo de los buenos momentos.

Al día siguiente ocurrió el accidente automovilístico que me arrebató a TN. Un coche se chocó contra el vehículo en el que iban mi niña y su padre. El conductor iba borracho y no estaba en condiciones para conducir. Recordaba, recuerdo y recordaré siempre su puta cara: se la tenía jurada. Nadie le hace daño a mi chica y se va de rositas.

El padre de TN murió en el accidente y ella quedó gravemente herida: la ingresaron en el hospital. Estuvo en coma varios meses, y yo siempre iba a visitarla, a veces con Rin, otras veces sin él. Verla así, en la cama, conectada a miles de máquinas, con una venda en la frente, miles de escayolas, vendas y yesos por todo su cuerpecito y los ojos eternamente cerrados, me rompía. Un día, probé a inclinarme sobre ella y besarla en un intento desesperado de hacerla volver, pero nada pasó. Lo sé, había visto demasiadas películas.

Al llegar a casa no veía de rabia. Me dolía el pecho, como si una mano invisible me estuviera apretando el corazón. Subí las escaleras casi corriendo y me encerré en mi habitación, sin ser consciente casi del mar de lágrimas que corría por mis mejillas. Grité de frustración tanto que casi me dejé la garganta, lancé todo lo que encontré a mi alcance, rompiendo el cristal del espejo de pie que había en mi habitación, lanzando la mesita de noche y la lámpara, todo... Mi habitación ya no tenía forma, al igual que mi corazón. Cuando llegó papá a calmarme, quién había sido llamado por Rin, yo ya no podía romper nada más. Mis nudillos sangraban y mis labios me dolían de tanto mordermelos de rabia. Me hundí en el abrazo que papá me proporcionó y me desahogué entre su brazos, temblando de rabia y de impotencia.

Rin cambió un poco también. Se volvió más frío y distante, pero aún así, sus ojos siempre lloraban al verla y siempre me preguntaba cuándo iba a volver. Y lo único que yo le podía decir era "pronto", porque yo tampoco sabía.

Más tarde, nuestra relación dejó de ser la misma; nos distanciamos por una disputa. Al principio, nos peleamos por TN, él alegaba que yo debía de olvidarla, pero yo me negaba en rotundo a hacer eso. No podía alejarme de su recuerdo.

Y un día, ella volvió. Volvió, pero sin volver. Porque al verme no me reconocía. No sabía quién era yo, no sabía quién era Rin, no sabía quién era su madre, ni sabía quién era ella. El doctor nos dijo que aquello fue una perdida de memoria al saber que había perdido a su padre: era una forma de autodefensa aunque con ello hubiera perdido sus recuerdos. Perdió mis recuerdos, nuestros recuerdos.

Cuando entré a su habitación de hospital una vez que me dijeron que TN había despertado, me rompí al ver que sus ojos me miraron pero no me reconocieron. Me sonrió y me dijo las peores palabras que me podría haber dicho nunca:

Forbidden wish [+18 Sae Itoshi x fem! reader x Rin Itoshi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora