Capítulo 3

3.9K 397 211
                                    

Rin y yo habíamos regresado a casa, eran ya las siete pasado el mediodía y mamá nos esperaba ansiosa en el recibidor, vestida y arreglada como si fuera a salir. El Itoshi menor se paró cuando la vio y la saludó cordialmente. Al menos a mamá la respeta.

― ¡Chicos! Qué alegría veros llegar juntitos. ¿Habéis llegado bien? ¿Qué tal el día?― Preguntó la contraria con una sonrisa en el rostro.

― Bien, ¿vas a salir, mamá?― Preguntó Rin mirando de arriba a abajo el atuendo de mi mami. Realmente me impresionó que la llamase "mamá" con toda la naturalidad del mundo, como si lo hubiera estado haciendo durante toda su vida.

Ella asintió en respuesta, complacida por la atención del chico.

― Así es, tu padre y yo vamos a salir a cenar juntos― Contestó con un brillo en los ojos―. Vosotros quedaros en casa y portaos bien, como buenos hermanos.

Sí, claro. Eso díselo a él.

Rin sólo asintió y subió las escaleras en dirección a su habitación tras desearle a nuestra mamá que se lo pasara bien. Cuando él ya no estuvo a la vista, mi progenitora me miró confidencialmente.

― ¿Está todo bien con tus hermanos?― Susurró la mayor.

― Pss, bueno, lo normal― Me mordí el labio y bajé la mirada, no quería preocuparla y que se sintiera culpable por haberme hecho vivir con aquellos chicos―. Está todo bien, no te preocupes.

La contraria solo suspiró.

― ¿Segura?

― Segurísima― Afirmé.

Luego, mamá abandonó la casa despidiéndose al aire, para que los tres hermanos nos despidiesemos de vuelta. Al parecer, papá iba a ir del trabajo directo a la cita, por lo que él no estaba en casa. Mamá dijo que iban a llegar muy tarde, así que me pidió que no la esperase despierta, orden que decidí acatar.

Subí las escaleras hacia mi habitación pensado que era muy extraño que un jugador profesional como lo era Sae estuviera siempre en casa... Bueno, ahora que lo pensaba, en la mañana no estaba. Agh, es extraño vivir con alguien famoso, por alguna extraña razón tengo la sensación de que él debería estar entrenando todo el día, pero como es natural, no es así.

Cuando quedaban pocos escalones para alcanzar la segunda planta, escuché el tono de voz elevado de ambos Itoshi. Extrañada, me saqué los zapatos para andar sin hacer ruido y me acerqué a la habitación de Rin, de la que procedían los gritos, con intenciones de escuchar a hurtadillas.

― ¡Eso no era lo que acordamos!― Gritó Rin― Ya estás otra vez faltando a tu palabra. ¿¡Sabes qué!? ¡Qué te jodan! ¡A ti y a tu estúpido fútbol!

Luego, las cosas se calmaron un poco, pero aquello no duró mucho ya que los gritos no tardaron en volver a aparecer. Me pareció entonces que estaban discutiendo sobre una chica, ya que escuché el pronombre femenino, pero no alcancé a oír mucho más que gritos inteligibles y un golpe a la pared. Me asusté por ello, pero entonces la cosa pareció calmarse nuevamente. Y bajaron tanto el tono de voz que no pude oírlos muy bien debido a la intromisión de las paredes y la puerta cerrada de la habitación.

Suspiré, resignada al percatarme que ya no podía cotillear mucho, y me dirigí a mi habitación. Estaba por entrar en ella cuando la puerta del cuarto del Itoshi menor se abrió abruptamente y, tras ella, apareció mi hermano mayor, el de cabellos granates, y este me miró con una frialdad extrema, para después pasar de largo sin decirme nada y encerrarse en su cuarto. La puerta de la habitación de Rin había quedado abierta, por lo que me asomé cautelosamente por ella hasta que pude vislumbrar al chico sentado en la orilla de la cama, agarrándose la cabeza con ira y llorando de frustración. Vi como apretó los dientes y murmuraba cosas inteligibles para sí mismo. Sinceramente, quería sentarme a su lado e intentar relajarlo, pero sabía que aquella idea era tanto inútil como suicida, y decidí quedarme al margen del asunto. Ya descubriría el por qué de la discusión a su debido tiempo, ya que, al fin y al cabo, ¿quién era yo para meterme en asuntos de hermanos? Porque, como bien había aclarado el de cabellos negros aquella misma mañana, yo no era su hermana. Ni mucho menos.

Forbidden wish [+18 Sae Itoshi x fem! reader x Rin Itoshi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora