Nuestro primer verano
¡Empieza el verano! La verdad que tenía muchas ganas de ésta temporada. He de decir que aunque mi cumple es en otoño, mi temporada favorita del año es verano. Venían muchas cosas guays y algunas que no fueron tan buenas.
Empezamos yéndonos todos, como bien habíamos acordado, a la casa de Claudia en Alicante. Al viaje fuimos Claudia, Carol, Ariadna, Carla y yo. María e Isa al final no pudieron venir por diferentes temas así que éstos éramos los que fuimos. No éramos un grupo aburrido ni mucho menos y he de decir que yo nunca había viajado con un grupo de amigas así que todo me hacía ilusión. Además, me tocó dormir con Carol, ella se había convertido en mi mejor amiga. Durante el curso nos habíamos unido mucho, quedábamos fuera para ir a cenar, a pasar rato juntos a cualquier lado, nos saltábamos clases para seguir hablando de lo que fuera y siempre nos estábamos riendo. Carol era una persona muy importante en mi vida, confiaba en ella para todo y aunque yo sentía que ella en mí no veía lo mismo sí sabía que podía contar con ella para todo.
Fue un trayecto en bus muy entretenido pues todo el rato nos picábamos los unos a los otros, hablamos de profes y gente de la uni y cotilleamos de diferentes cosas que nos habíamos enterado. La verdad que yo no sabía cómo ésta gente se sabía tantas cosas, yo a la uni iba a estar en clase y con mis amigas pero ellas eran un poco radiopatio.
También aprovechaba para hablar con Adri, que estaba un poco apagado, porque no quería que me fuera, ya que pensaba que así íbamos a hablar menos. Al final entendió que tenía que hacer mi vida como quisiera y que igual que me iría con él cuando se pudiera me iba con mis amigas. La casa de Claudia era muy chula, un piso muy grande con varias habitaciones una terraza interior y un balcón que daba a la playa. Claudia vivía en primera línea de playa, la urbanización también tenía una piscina dónde estuvimos muchas veces si no nos apetecía ir a la playa. Carol y yo dormimos en una cama de matrimonio juntos y entre sustos que nos dábamos y risas, una noche me confesó que se sentía fatal. Medio llorando me dijo que se consideraba una persona tóxica que muchas veces trataba fatal a la gente sin motivo alguno y que no quería perder a las amistades que había hecho en la uni. Me dijo que le dábamos vida y que estaba encantada de pasar tiempo conmigo pero que le preocupaba hacerme daño.
- Pero...eso no va a pasar, eres mi mejor amiga Carol, yo siempre voy a estar ahí - dije.
- Bueno...no lo sé, yo sé que engancho a las personas y cuando me canso dejo de estar con ellas y sé que está mal - dijo medio llorando.
- Pero entonces, ya sabes dónde está el problema, cambialo - dije.
- Sí, eso quiero, me lo estoy pasando genial con vosotros y no quiero perderos, sobre todo a ti - me respondió.
- Ya te he dicho que eso no va a pasar, es normal que tengamos redencillas ¿qué amistad sería si no? - dije riendo - Venga, alegra esa cara y vamos a intentar dormir - añadí.
- Sólo espero que no os canséis de mí y que de verdad te quedes conmigo - dijo.
Después de esa noche vi a Carol con otros ojos. Ella simplemente deseaba mantener una amistad que había encontrado y quería que durara. Por lo que nos contaba, aunque Guille estaba con ella en todo, sentía que ponía mucho peso sobre él que no debería y eso la hacía sentirse mal. Aquí estábamos nosotros, para ayudarla y apoyarla en todo porque, eso es lo que hacen los amigos ¿no?
Fue el cumple de Carla y el de Carol y salimos de fiesta, me lo pasé genial, conocí mucha gente random y bailé hasta la noche. No te sé decir porqué pero en mitad de la semana empezó a haber mucha tensión por parte de Carla y Carol no fue capaz de calmar las aguas. Carla cada vez empezó a estar más distante por más que el resto nos esforzábamos en integrarle. Carla muchas veces pidió estar sola o se bajaba a la piscina a su bola. Una vez Ari intentó hablar con ella y pareció que el resto de la semana estuvo mejor, ese sería el primer y último viaje de Carla con el grupo.
Al volver a Madrid, vi a Adrián, la verdad que tenía muchas ganas, nos contamos qué tal fue el viaje y dormimos juntos por primera vez en mi casa. Fueron unos días geniales. No todo fue bueno, por supuesto, Adri se sentía mal porque mentía a sus padres para poder venirse conmigo pero es que si no sabía que no le dejarían. Intenté consolarle explicándole que todos mentimos a nuestros padres alguna vez, que yo también lo hacía y que en un futuro no tendría que hacerlo porque me conocerían. Eso le calmó.
El resto del verano lo pasé entre el pueblo y Madrid. Todos los veranos los pasaba en el pueblo con mis amigas de allí. Estaban todas, Alejandra, Itziar, Yoli, Ángela, María, Ariadna (las primas de Alejandra), etc. Éramos un grupo muy guay la verdad y además, ese verano fue el primero en el que yo estaba fuera del armario por lo que todo era más cómodo.
Cuando volvía a Madrid era para trabajar los findes y ver a Adri. No era una cosa que me suponía un problema pues me pasaba toda la jornada pensando en cuando le iba a ver. Fue un verano genial dónde pude descubrirme más a mí y a mi entorno. Me tocaba prepararme para lo que vendría a partir de Septiembre porque, queridx lectxr, las cosas empezarían a torcerse de una manera que jamás podría pensar.
A partir de ese mes, nada sería igual y me tocaría dar un cambio en mi vida que hasta entonces era impensable. Iba a conocer a gente increíble, sobre todo a una persona que me ayudaría a salir de todo aquello, pero, sobre todo, iban a cambiar muchas cosas. A partir de aquí empezarán a venir cartas de todo aquello que no pude decir en su momento.
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Todo lo que no te pude decir
Teen FictionEsta es una historia basada en todo lo que viví con el chico que me cambiaría toda la vida por completo. Adrián. Aquí esta todo lo que no pude decir al chico que me abrió un mundo que jamás había conocido. Es un libro hecho carta lleno de momentos...