Welcome to Annabeth land

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• Annabeth Chase •

Desde el ascensor entramos a un gran corredor. Las paredes eran de un sencillo blanco con fotografías tanto como naturales como artificiales. El suelo era a baldosas negras y blancas a cuadros. Tus zapatos hacían eco alrededor de la habitación cuando caminabas.

Había nueve puertas, cuatro en la izquierda, cuatro en la derecha y una al final del pasillo. Toda puerta tenía un nombre en ella. La primera a la derecha decía "Piper Mclean" en letras doradas, luego "Leo Valdez" en letras color naranja que parecían estar ardiendo, "Clarisse La Rue" en gruesas letras rojas, y luego "Sala de estar"

La primera a la izquierda decía "Nico di Angelo" en letras negras, "Jason Grace" en letras azul cielo, "Perseus Jackson" en verde mar y "Annabeth Chase" en color plata. En la puerta del final se leía "Comedor"

—Oh, por los dioses —jadeé.

—¡Vayamos a ver nuestras habitaciones! —Leo corrió a su habitación ansiosamente.

Todos siguieron su ejemplo y corrieron a sus puertas. —Las abrimos a la cuenta de tres —les dije a todos —¡Uno, dos, tres! —tan pronto como giré el pomo de la puerta supe que iba a amarla. Las paredes estaban pintadas de un plateado brillante y el piso era una suave alfombra blanca.

Una pared era una grande ventana de vidrio con vista a la ciudad desde tan alto, otra pared estaba completamente forrada con libros, di un grito ahogado al percatar toda la cantidad de lectura que podría hacer y me di cuenta de que todos los libros que estaban allí eran mis favoritos o los que quería leer.

Mi cama estaba contra una pared lisa, con solo un gran tablero de anuncios. Había un escritorio con papel cuadriculado fijo y un armario de madera lleno de ropa nueva. Oh dioses, ¡tenía mi propio cuarto de baño en mi habitación! Era perfecto.

Inmediatamente desempaqué, colocando todo en su lugar, me senté en el escritorio y miré la ropa nueva. Para mi sorpresa, eran de mi estilo. Gracias mamá, pensé, sabiendo que ella debería haber ayudado a diseñar toda esta habitación. Cuidadosamente, clavé una foto de todos mis amigos del Campamento Mestizo en el tablero de anuncios y me desplomé sobre mi cama nueva. ¡Cómoda!

—¿Annabeth? —era Percy afuera de mi habitación.

—¡Entra! —dije, él entró, una gran sonrisa en su cara.

—Te ves alegre... woah —él miró alrededor de la habitación —¿Estoy en Annabethlandia? ¡Vamos, necesitas ver mi habitación! —me arrastró fuera hacia su habitación, la puerta de al lado. Olí el aire del océano y al mar en cuanto entré. Justo como en mi habitación, una pared era una gran ventana de cristal.

Aunque Percy tenía una vista al agua. Las otras paredes estaban pintadas de azul. Pero no del normal azul, eran del exacto azul de las galletas azules de la mamá de Percy. Tenía una gran pecera (Por supuesto) equipada con comida para peces. Percy también tenía su propio cuarto de baño. Los dioses habían hecho un verdadero buen trabajo en este apartamento.

—No puedo esperar para ir a la escuela, —me contó —Quiero decir, ¡Esto me tiene de un gran estado de ánimo! —yo estaba totalmente de acuerdo, tal vez esto podría ser divertido después de todo.

—Tengo que llamar a mi mamá —me contó Percy.

—Está bien, iré a ver las otras habitaciones.

Justo en cuanto salí de la habitación de Percy, Jason salió de la de Piper —¿Geniales, no es así? —Preguntó.

—¡Si, asombrosas!

 —Iba a mirar las salas comunes; La sala de estar y el comedor.

—Igual —me sentí un poco rara entre mi y Jason, no estoy segura de por qué.

Caminamos a la sala de estar y abrimos la puerta. Otra vez, una pared era una ventana. Había tres grandes sofás cafés alrededor de una grande pantalla de plasma y dos escritorios con dos laptops encima.

Podía ver un gran sistema de altavoces y un reproductor de discos también. Otra estantería llena en una esquina y también descubrí un Nintendo wii, Xbox y Playstation, todo por la televisión.

—Wow, esto es...

—¿Moderno? Si —dije asombrada.

Percabeth en GoodeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora