Vante, el príncipe dragón, quiere conocer el mundo ¿Su impedimento? El Rey Índigo, su padre.
Un conejo negro fue contratado para cuidar del príncipe, uno que se convierte en vampiro y bebe la sangre de su protegido por las noches ¿No era aquella la...
**Nota; les dejo unos dibujos que le debía a la historia y no sé si subí antes; del Rey Luna, Agustino Dandelion y Vante(con el alma oscura y sólo una pizca de azul en su ojo) ¡Les debo el de Louis!🫣 Me cuesta mucho dibujar a JK😞**
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«Bebé~ bebé~... No; tienes mucha fuerza y estás muy duro para ser un bebé», concluyó el vampiro acorralado por los brazos del príncipe alrededor de su cuello, sin conseguir pensar en absolutamente nada que no fuera la erección que el bello durmiente presionaba contra su muslo. Tendido boca arriba en la cama, Louis consideraba su pronta muerte, arrepentido de haber confiado a Vante su forma humana: no sólo por su propio y comprometedor desliz al besarlo, sino porque los sueños del adolescente a su lado parecían poder meterse en su cabeza y la cordura amenazaba con lanzarse a un pozo incandescente.
«Ay, mamá liebre ¿a cuántos dioses tengo que rezar para que se me baje esta cosa? ¡O que se le baje a él!»
«¿Por qué tenías que preguntar por la muerte, maldición? Si me preguntabas sobre sexualidad ahora estaría dándote divertidas lecciones ¡No sufriendo aquí traumado!».
11 de septiembre de 1985.
¿Qué don tenían los dragones para dormir tan profundo? El vampiro quería algo de eso para sí; la noche le pareció un pestañeo, despertó asustado por el retumbar de los pasos del Rey Dragón en el castillo. No alcanzó a razonarlo siquiera, se convirtió en liebre de un salto y se escondió tras la espalda de Vante.
