CAPÍTULO IV

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Ya no me sentía como antes.

–Harnold no pudo venir.

Acordándome de la respuesta que me dio Emma suspiro.

No estaba triste.

O bueno vamos a decir que no.

No quería arruinarle el día a Emma, y a fin de cuentas era de esperarse, hace días me había dicho que estaba complicado y no sabía si podía venir.

–¿Te pasa algo?–pregunta Emma sentándose a mi lado.

–No, solo que estoy un poco cansada–digo dándole una sonrisa.

Ella me alcanza un vaso con bebida y yo tomo un sorbo largo y rápido.

–Bebe suave–me dice y se marchó.

No se porqué a la cabeza me vinieron pensamientos con Harnold, realmente no se ni porqué estoy pensando en él.

Pero lo hago.

Mierda Harnold que me hiciste que me tienes pensándote a diario.

–En que tanto piensas–se me acerca Layra con otro vaso de bebida.

¿Tanto he pensado que ya sé me acabó la bebida?

Tan siquiera me había dado cuenta de que me había tomado todo el vaso.

–Toma–me dice Lay ofreciéndome el vaso de bebida de ella–Sabes que no soy de beber mucho.

Tomo el vaso con mucho gusto y de un sorbo me bebí todo el cóctel.

–Cuidado y te emborraches–dice dándome un abrazo.

No se que hice en vidas pasadas para recompensarmelo con personas tan especiales como ella.

Layra es lo más cercano que tengo a una hermana.

Tiré el vaso a un lado y fui en busca de más bebida, necesitaba más y olvidarme de todo.

¿Qué era todo?

Ni yo misma lo sé, mentiría si dijera que existe un motivo.

Harnold.

Recalca mi conciencia.

No sería motivo.

Fui a por más bebida, tanto así, que terminé tomando una botella de vino, y con el poco que le quedaba me lo tomé como refresco.

Al levantarme del asiento todo me daba vueltas, como si hubiese bajado de una montaña rusa.

–Segura que estás bien–dice Raquel aguantándome porque me estaba cayendo para los lados.

Muevo mi cabeza en aprobación y sigo mi camino.

Me senté en una banca aparte de todos y entré al contacto de Alex y decidí llamarlo.

Ken:Hey.

Alex:Hola.

Ken:¿Por qué Harnold no me quiere?

Alex:¿Qué dices?

Ken:Yo a él lo quiero mucho.

Alex:¿Ken estás ebria?

Ken:No, estoy así porque Harnold no me quiere.

La llamada se cortó, supongo que por la señal que se fue.

Al momento llegó y escucho mi teléfono sonar. Como puedo lo tomo y vi el nombre en la pantalla.

Harnold.

Mi corazón empezó a latir con frecuencia, mis dedos temblaban y mi respiración estaba agitada.

Como pude cogí el teléfono.

Harnold:Hey borracha.

Dice con tono burlón.

Ken:Yo no estoy borracha.

Le digo con la respiración cortada y llorando.

Harnold:Ey porqué lloras, así parece que tienes mal de amores.

Ken:Claro si tú no me quieres.

Después de eso todo se volvió negro, todo estaba oscuro, apenas veía, me tambaleaba para los lados y podía escuchar gritos lejanos y la música.

[...]

Borracha.

Parece que tienes mal de amores

Tú no me quieres.

Ricitos de oro.

Me levanté de la cama con mucho dolor de cabeza, al levantarme aún tenía mareo y apenas y podía con mi alma.

¿Qué si me acuerdo de algo?

No, tan siquiera sé cómo llegué a mi casa. A la mente me venían algunos flashback pero nada del otro mundo.

Lo único que me viene a la mente es el recuerdo de Harnold hace una semana.

–Que frustración–digo y resoplo.

–Hablando sola–dice mi mamá llevándome un vaso de jugo a la cama–¿Que te tiene tan frustrada y feliz a la par?

La miro de mala gana y levanta las manos en son de paz.

–Okey te dejo sola.

Mi madre sabe el momento en el que quedarse o dejarme sola.

Sentí mi celular llegarle una notificación y no tenía deseos sinceramente de hablar con nadie.

Pero como dicen.

La curiosidad, y la curiosidad mató al gato.

Y esta vez la mató pero de un flechazo en el corazón y no de dolor.

Emma:Mañana vienen Harnold y los chicos.

Pegué un grito y empecé a saltar de la emoción.

Jamás creí que alguien en tan poco tiempo me iba a poner así, pero él lo hacía.

Y más bien eso fue lo que más me marcó, el hecho de querer a una persona en tan poco tiempo.

Una persona que llegó a mi vida con la mejor de las intenciones.

¿Será quien ocasione las cataratas de lágrimas en mis ojos?

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¿Será?

Ustedes que creen

¿Será Harnold quien ocasione la felicidad de Ken? o ¿Será quien ocasione sus llantos?

Déjenme dicho en los comentarios que creen

¿Cómo han estado?

Yo espero que bien

Por aquí todo bien

¿Qué les pareció el capítulo de hoy?

Espero que les haya gustado

Si fue así regálame tú estrellita y déjame tú comentario

Espero que hayan pasado un lindo fin de semana

Os quiero a todos caramelitos

Muchos besos muack
     
                                          k.v

Me Enamoré De La Persona Equivocada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora