At My Worst (Esp - ATEEZ FANFIC)

26 - SAYA POV

Presente...

A veces encuentras el amor cuando menos lo esperas, o te enamoras de quien nunca hubieras imaginado.

A veces te das cuenta justo a tiempo, a veces puede tomarte años, décadas.

A veces piensas que te has enamorado, pero realmente no es así.

A veces encuentras a quien crees que es para ti, porque tienen una conexión que no pueden explicar y todo parece ser perfecto a su lado, como si todo el mundo actuara a favor de ambos, pero después encuentras a alguien más y, el mundo no gira alrededor de ambos sino que juntos lo hacen girar, su conexión puede ser explicable pero es irrompible, tal vez no todo sea perfecto pero nada nunca podría llenar más tu alma como aquello.

Esa es la diferencia entre el amor de tu vida y tu alma gemela.

Aunque pudiera ser confuso, una vez que sientes ambos, es como si una venda fuera removida de tus ojos, comprendes lo mucho que necesitas a ambos pero también comprendes a quién necesitarás por siempre a tu lado. Al principio yo no lo entendía, pensé que los perdería a los dos, pensé que era una terrible persona por no ser capaz de soltar a ninguno de ellos, pero cuando lo vi a los ojos lo sentí. Lo sentí a él.

Hay una cierta sensación en mí cuando él está cerca. El solo verlo desde lo lejos no es suficiente, algo siempre me empuja a estar tan cerca de él como sea humanamente posible. No puedo simplemente ser un planeta en su sistema solar, tengo que estar en su misma órbita, hacerme a mí misma girar a su mismo tempo y frecuencia, dejarlo tomar control sobre mi luna y mis estrellas, y convertirnos juntos en una sola galaxia.

No había sido capaz de encontrar las palabras correctas para expresar mis sentimientos, mi corazón iba más rápido que mi cabeza. Pero fue hasta ese día que lo vi durmiendo cuando todo cobró sentido.

El sonido de su respiración, sus pestañas casi tocando sus pómulos, su cabello cayendo sobre su frente, cómo temblaba mientras soñaba, la forma de sus labios. Cada línea de sus facciones que yo misma quería trazar con mis propias manos, cada cabello suyo que quería contar, cada lunar que quería besar. Solo podía pensar una cosa y nada más...

-Te amo...

Dije. Dormía junto a mí, ambos acostados en su cama después que lo traje a casa. Había cocinado la cena y lo iba a llamar, cuando lo vi durmiendo profundamente, me pareció tan apacible. Fui atraída por la calma y silencio hasta llegar a recostarme junto a él. Y esa sensación...

La sensación de no querer estar en otro lugar con ninguna otra persona. Pensaba que antes ya había vivido momentos perfectos, pero ninguno podía comprarse con este. Había encontrado mi respuesta.

-Te amo, Wooyoung...

Lo dije otra vez y, entre sueños, él sonrió.