Presente...
-Antes de que entres, hay algo que debo decirte. - Al llegar al piso donde se encuentra la habitación de Seonghwa, Wooyoung detiene a Saya en la puerta, y con suavidad la toma por los hombros.
- ¿Sí?- Llevando su vista de la puerta de la habitación de Seonghwa a los ojos de Wooyoung, ansiosa de correr y verlo de nuevo.
-Puede que él no sea quien esperas, al menos no por el momento. No te sorprendas si no te reconoce, puede que esté despierto pero su mente no ha regresado por completo. - Hablando lento pero claro, hace su mejor esfuerzo para que sus palabras no caigan como una bomba atómica.
-Está en shock, Saya. No ha dicho una palabra aún, puede que ni siquiera te vea a los ojos. Ha estado mirando a la nada desde esta mañana.- Yeosang, quien ha estado tomando algunos turnos en la clínica del mismo hospital, habla sin rodeos, pretendiendo aclarar todos los detalles que ella debería saber.
-Solo quiero verlo, déjame pasar. - Apartando a ambos, se dirige a la habitación.
Al entrar, sus ojos se encuentran con un joven muchacho sentado derecho en la cama de hospital, con su mirada perdida en un infinito vacío frente a él. Sus manos descansando junto a sus muslos y sus piernas perfectamente alineadas bajo las cobijas. Ella ni siquiera nota al resto de sus amigos dentro de la habitación, pues está demasiado absorta por aquel que había despertado de un coma de 8 meses. Sin darse cuenta, sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas. Mientras camina hacia él, se limpia las lágrimas de su rostro pues quiere ver todo claramente, quiere verlo a él claramente.
Esos ojos que tanto había extrañado, pero no brillan como antes lo hacían. Ese resplandor que siempre llevaba en su piel, en sus sonrisa, en sus ojos, no está ahí. Como si se hubiera apagado, no hay ninguna expresión en su rostro, sus ojos están abiertos pero no está verdaderamente despierto.
Se sienta junto a él, cara a cara, pero él no la mira. Decepcionada, emocionada, regocijada, enojada, frustrada, aliviada, sentía cómo todas las emociones positivas y negativas se revolvían dentro de ella.
-Aquí estoy. - Habla suavemente con una sonrisa- Aquí estoy. -
Tomando la mano de Seonghwa, la coloca sobre su mejilla. Sintiendo su calor, cierra los ojos mientras más lágrimas caen por su rostro.
-Te extrañé. - Aunque él permanece inmóvil, ella sabe que la persona que ama está ahí en algún lado, sino ¿Cómo pudo haber despertado?
Tomando el pulgar de él, ella, una vez más, como solían hacerlo, lo corre de su frente a su nariz, hasta aterrizar en su barbilla.
-Espera - De repente, Yunho nota que algo extraño sucede- Él...
-Está llorando... - Jongho termina la oración.
No se pueden explicar qué acaba de ocurrir. No se había movido ni un centímetro, sin embargo sus ojos habían cedido. Aún perdido en algún espacio vacío entre la realidad y un sueño, pequeñas húmedas gotas comenzaron a caer sobre la sábana de su cama. Mientras todos permanecen asombrados, una mano se atraviesa entre Saya y Seonghwa, alguien limpia sus lágrimas con un pañuelo.
-Sabía que lo harías reaccionar. - Dice Wooyoung, tirando el pañuelo en el pequeño bote de basura junto a la cama.
Y es ahí cuando ella se da cuenta de lo que está pasando.
-Él despertó...- Tratando de juntar todas las piezas, ella habla, con la esperanza de que todo embonara en su lugar.
-Así es. - Sabiendo lo que pasa por la cabeza de Saya, Wooyoung reafirma.
-Pero tú también estás aquí...
-Lo estoy. - Sonríe ante sus inocentes ojos.
-Yo...
-Está bien. - Dulcemente la envuelve en sus brazos- Lo sé. Lo entenderé. - Con su rostro en su pecho, ella siente su corazón latir, pero sostiene la mano de alguien más, siente su calor, pero sus ojos miran a alguien más.
-Ambos son mi mundo entero...- Casi en un suspiro, ella dice. Él escuchó, los dos escucharon, pero ella nunca lo sabría.
Todos se quedaron en silencio, no se escuchaba ni un respiro. Todos sabían lo que sucedía, y justo como ella, nadie tenía la respuesta.
La noche siguió así, silenciosa, esperando por otra respuesta de parte de Seonghwa. Wooyoung tratando de no sobrepensar, Jongho llamando a Mingi en el pasillo para mantenerlo informado, Saya viendo por la ventana como si las luces nocturnas de la ciudad pudieran decirle qué hacer, Yeosang revisando el monitor de Seonghwa, Hongjoong hablando con Seonghwa como si nada pasara, y Seonghwa observando todo desde el oscuro rincón de su subconsciente, sintiéndose atrapado en su propio cuerpo y mente, sin saber cómo controlarse a sí mismo de nuevo, pendiendo entre dormido y despierto, entonces ella se acerca otra vez y él recuerda por qué lucha.
Entrando en su campo de visión, ella camina y le sonríe dulcemente pero sus ojos no parecen conectar con su sonrisa.
-Tengo que irme, Seong. Regresaré pronto ¿está bien?- En su mente, ella escucha su voz respondiéndole, pero su labios no se han movido.- ¿Te quedarás hasta mañana, Joong?- Estaba en la silla junto a la cama de Seonghwa.
-Sí, mi nombre está en la lista. Tú ve y descansa, te avisaré si algo pasa.
-Gracias - Se gira al pequeño sofá donde Yunho y San están acurrucados- ¿Y esos dos?
-Yo los llevo a casa- Jongho regresa de su llamada con Mingi. - Wooyoung está por las escaleras, por cierto. Creo que deberías hablar con él, no se ve muy bien.
-Haré mi mejor intento, gracias.- No estando tan bien ella misma, no se cree capaz de consolar a nadie.- Dile adiós a Yeosang de mi parte.- Se encamina hacia la puerta.
-Sí, no te preocupes.- Hongjoong responde.
Echándole un último vistazo antes de salir de la habitación, una extraña sensación le recorre de pies a cabeza haciendo que le duela el cuerpo. Se abraza a sí misma y se dirige hacia las escaleras para encontrar a Wooyoung.
-Hola. - Sentado en las sillas de la zona de espera junto a las escaleras, la ve estando de pie frente a él.
-Ya podemos irnos. - Él lo percibe en su voz, no se siente bien, pero él tampoco está bien, lo suficiente como para comenzar a decir lo que piensa.
-Sai, te amo. En verdad te amo, pero si tu...- Poniéndose de pie y tomando sus manos, sin realmente saber lo que quiere decir, ella interrumpe sus palabras.
-Woo, ahora no por favor. Solo quiero irme a casa. - Ella sabía hacia dónde se dirigía esa conversación, algo que absolutamente no quería escuchar en ese momento.
Pero su sutil falta de empatía fue suficiente para romperlo. Sintió una espina en el corazón y no pudo aguantarlo más. Teniéndola justo enfrente suyo, su cabello, su piel, sus ojos, sus labios, sus manos, todo lo que lo hacía amarla le dolió por un segundo.
-No quiero perderte. - Ella lo había visto llorar antes, pero no así, como si estuviera rindiendo su vida ante ella, arrodillándose con el corazón en las manos rogándole que lo tomará. - Pensé que podía hacer esto pero no puedo. No soy tan fuerte, no puedo... -
Temblando, aterrado, se dejó expuesto como nunca antes, vulnerable y a punto de desmoronarse. Saya no podía reconocerlo. Fue solo en ese momento en que ella comprendió la profundidad del amor de Wooyoung, y era algo que ella nunca había sentido antes. Incluso si hubiera un sentimiento más allá del amor, no se acercaría ni en lo más mínimo a lo que ella vio en él.
Imposible para ella encontrar las palabras adecuadas, simplemente lo deja caer en sus brazos.
Él se aferra a ella como si fuera a caer desde el piso más alto de un edificio, y ella lo abraza, finalmente enteramente consciente de lo que ella significa para él y de lo que él significa para ella.
Notita:
Honestamente fue hasta este punto de la historia cuando supe cómo iba a terminar TT
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At My Worst (Esp - ATEEZ FANFIC)
FanfictionDespués de pensar que había perdido al amor de su vida, Saya se enfrenta a la más difícil decisión que haya tenido que tomar: ¿Lo dejaría ir? ¿O le abriría su corazón a un nuevo amor? ^El presente de esta historia es 2022^ ^Protagonista OC^ Follow...