No puedo evitar pensar que tal vez no debí haberla traído aquí, tal vez si ella lo ve entonces cambie de parecer. Debo dejar de pensar en eso, pero tengo tanto miedo de perderla otra vez.
Mientras espero en el auto recibo una llamada, es Yeosang. Al leer su nombre en la pantalla de mi teléfono instantáneamente me transporto a cuando nos conocimos por primera vez. Recuerdo ese día como si fuera ayer a pesar de que fue hace 15 años, cuando éramos niños. Es extraño ver en retrospectiva hacia nuestra niñez ahora que ya somos adultos; él ahora está en la escuela de medicina y yo me convertí en chef. Después de asistir y ganar un concurso de cocina, con el tiempo abrí mi propio restaurante, hace ya un año. No puedo creer que nos conozcamos desde hace tantos años, el tiempo vuela.
Si la memoria no me falla, puedo asegurar que lloré la noche anterior a nuestro primer día de escuela primaria. Estaba triste porque yo estaría solo en un salón de clases diferente, no como Jongho que tendría a Saya para hacerle compañía. Deseaba tanto estar con ellos, ya que siempre habíamos estado juntos en el preescolar, pero fui asignado a otro grupo. Recuerdo cómo ella me ayudó en ese entonces. Estábamos a punto de entrar a nuestros salones cuando Saya me dijo que había un niño solo y apartado del grupo, me aconsejó que fuera con él y me presentara. Recuerdo cuán nervioso estaba pues nunca había hecho amigos antes porque ya los tenía a Jongho y a ella, aún así hice lo que ella me dijo y me acerqué al niño.
-Hola- Le dije, creo haber intentado sonreír pero me temo que haya parecido más bien una mueca.
Él no contestó, pero me miró a los ojos, sus ojos brillaban; entonces, me percaté de una muy peculiar marca de nacimiento roja en su ojo izquierdo. Obviamente, en ese entonces no sabía que era una marca de nacimiento y pensé que estaba lastimado.
-¡¿Estás sangrando?!- Preocupado, señalé su ojo izquierdo pero él parecía confundido. Finalmente contestó.
-No- Dijo con una voz muy calmada, como si mi reacción fuera algo normal para él, tal vez ya lo haya escuchado muchas veces antes. Tomó mi dedo y lo retiró de su cara- Es una marca de nacimiento no una herida- Me acerqué más para verla mejor pero él se apartó y yo me tropecé un poco hacia adelante.
-Soy Wooyoung- Le dije mientras me enderezaba.
-Yo soy Yeosang- Y en ese momento supe que lo seguiría a donde fuera. Volteé hacia donde estaba Saya y la vi sonriendo tan ampliamente porque yo había hecho un amigo por mi propia cuenta. Nos fuimos cada uno a nuestros salones y desde la escuela primaria los cuatro fuimos inseparables.
-¿Qué pasó? - Contesto el teléfono
-Ven rápido
- ¿Eh?
-Sé que estás afuera esperando, ven ya- Me pregunto qué estaba haciendo en el hospital a esta hora, normalmente no viene en este día de la semana.
-Ok, ya voy
-Rápido, te necesitamos aquí- Es raro de él decir que me necesita, supongo que tal vez debamos cargar a Seonghwa para algo, o quizá ella no lo estaba pasando bien y me necesitaba ahí. Fuera lo que fuera, noté en su voz que algo lo preocupaba.
Salgo del auto pero quedo congelado al escucharlo otra vez.
-Puede que haya despertado
-¿Q.. qué...?
-Ven, rápido
Parado frente a la puerta del hospital sin saber qué pensar pero a la vez con tantas cosas en la cabeza. Un instante tan pequeño que llena mi mente de un sin fin de recuerdos, tantos lugares a los cuales llevarlo, tantas cosas que decirle. Se ha perdido de tantas cosas, nos hemos perdido tanto de él. En ese momento empiezo a correr hacia la habitación donde él se encuentra. Miles de palabras e historias que contarle se me vienen a la mente, tanto tiempo que ha pasado y tantas cosas que no ha podido vivir, nunca pensé que realmente llegaría este día. Siento la emoción de verlo de nuevo pero a la vez miedo porque, justo al llegar a la puerta y poner mi mano en la manija, caigo en cuenta de porqué había venido yo aquí, el porqué estaba afuera esperando. La traje a despedirse porque estaba lista para dejarlo ir, pero ahora ha despertado. Al pensar en ella con él algo inevitablemente duele dentro de mí, el solo pensar en perderla de nuevo, no creo ser lo suficientemente fuerte para eso.
Apartando todos esos pensamientos, abro la puerta y entro a la habitación, para encontrarme con Yeosang de pie junto a la cama y con ella sentada sosteniendo la mano de Seong. Yeosang voltea hacia mí y se me acerca
- ¿Despertó? ¿Cómo está?- A la distancia veo cómo ella lo observa con lágrimas en sus ojos, sostiene su mano sin intención de soltarla y vez tras vez pasa su mano acariciando su rostro. Intento evitar cualquier sentimiento fuera de lugar dada la situación.
- Vino el doctor hace unos minutos, aún no despierta totalmente pero han notado más actividad en su cerebro. Puede despertar en cualquier momento- Yeosang no es de los que lloran pero puedo notar en sus ojos unas pequeñas gotas que se resisten a salir mientras que en su rostro veo alivio y sorpresa.- Lo vamos a recuperar- Su voz se quiebra un poco con esas palabras y me llena una sensación que no puedo explicar, siento como si algo dentro de mí hubiera vuelto a la vida. Lo abrazo y se me llenan de lágrimas los ojos, levanto la mirada y lo veo ahí acostado, dormido e inmóvil; no me imagino cómo será cuando despierte, habrá que pasar días enteros sin dormir para contarle todo lo que ha sucedido durante este tiempo.
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At My Worst (Esp - ATEEZ FANFIC)
Fiksi PenggemarDespués de pensar que había perdido al amor de su vida, Saya se enfrenta a la más difícil decisión que haya tenido que tomar: ¿Lo dejaría ir? ¿O le abriría su corazón a un nuevo amor? ^El presente de esta historia es 2022^ ^Protagonista OC^ Follow...