I BELIEVE IN YOUR LOVE

28.

Paula

Ya han pasado dos días desde el accidente de Valeria, apenas hoy despertó y estábamos tan felices, sus ojos azules brillaban de sólo ver a Antonieta y decidimos los padres de Valeria y yo irnos a nuestras casas, ellos para descansar y yo para bañarme, nos turnaríamos para quedarnos con Vale, hoy comenzaría yo, sí el cansancio me dejaba. Ahora voy llegando a mi departamento y realmente estoy cansada, no he dormido en dos días y necesito un baño largo. Salgo del ascensor y voy acercándome a mi departamento cuando la veo allí con una botella de vino, comida y su espectacular sonrisa, sonreí al solo verla.

Lu: ¡Hola! - saludó sonriente -
Pau: ¡Hola! - contesté embobada - ¿cómo estás? - pregunté y ella asintió sonriente -
Lu: Un pajarito me contó que por fin venías a casa, así que traje comida china y una botella de vino - dijo mostrando ambas manos y sonreí - por cierto ¿Cómo sigue Valeria?
Pau: - Abrí la puerta y dejé que entrará primero - Está mejor, esta noche me quedo con ella para que Antonieta descanse y mañana pueda ir a la universidad - Lu asentía -
Lu: ¿Quieres comida china?
Pau: Sí, quiero comida china y vino por favor - asintió mientras caminaba hacía la cocina y yo me apoyé en el mueble para verla preparar todo -
Lu: Si quieres anda a bañarte, mientras arreglo la comida - ladee la cabeza y decidí aceptarlo -

Fui hasta el cuarto y decidí escribirle a Gabriel para saber de él, me explicó que se iría de viaje unos días y ya estaba en el aeropuerto, le desee suerte y le escribí a Bruno, me explicó que estaba con Gabriel pero que volverían en unos días, le desee lo mejor y decidí ir al armario a buscar algo más cómodo para luego ir al baño, abrí la regadera y duré al menos cinco minutos dentro del agua dejando que ella recorriera por todo mi cuerpo, lo necesitaba, estaba tan agotada que no quería más que un baño largo.

Una hora después todo mi cuerpo estaba relajado, me eché crema para el cuerpo, me vestí optando por encaje en mi ropa interior, un short negro y un suéter gris de Bruno que me regaló, me peine el cabello que aún estaba mojado y salí para ver a Lucía. Cuando me apoyé en el umbral de la entrada del pasillo del departamento, la vi viendo la televisión, una película de Meryl Streep y sonreí, carraspee y volteó a verme sonriendo.

Lu: La comida se enfría, venga vamos a comer - asentí y me acerqué viendo nuestros platos, dos copas y la botella de vino -
Pau: Gracias Lucía - me senté a su lado en el mueble y me sonrió -
Lu: Tranquila Paula sé que no es un momento fácil y estoy aquí contigo, con vosotras - sonreí tranquila y le acaricié la mejilla, estaba ganándome la lotería y no lo quería ver, me lanzó un beso y empezamos a almorzar -

__________________________________________________________

Estábamos viendo una película ahora de Julia Roberts mientras yo tenía mi cabeza en sus piernas y Lucía me hacía cariños en el cabello, no habían besos, no había sexo, solo ella y yo hablando de la universidad, hablando del pasado, del presente y lo que esperábamos para el futuro, solo dos almas enamoradas en el mueble de mi casa.

Pau: Entonces el jefe llego y dijo "Paula Valenzuela venga" súper serio y yo dije ya me corrió ¡Hostia, pringao día! - ella se reía - y cuando entré a su oficina, fueron los minutos más horrible de mi vida, me miraba súper serio y yo temblaba y luego gritó un "Felicitaciones" y yo me quedé en shock - se ríe aún más - no me corrió después de todo - me uní a reírnos a carcajadas -
Lu: Me muero si me pasa algo así - asentí -
Pau: Fue horrible - me senté y pasó su brazo izquierdo por mi cuello, me acercó a ella para darme un beso en la sien -
Lu: Una vez casi me corren del colegio por error y casi todo el colegio protestó - la miré sorprendida - en serio fue una locura y todo por un error en un examen, por favor yo era la mejor en la clase y creyeron que me copiaba - se reía y me le uní -
Pau: Si que son bien gilipollas en creer que te copiarías - asintió y suspiramos -

Pasamos el día en ese mueble riéndonos de nuestras anécdotas, sin malicias, sin peleas, sin rencores, sin nada que nos hiciese cabrear a ambas. Llegó la noche y Lucía me dejó en la clínica, se bajó y saludó a Valeria quién estaba más feliz que niña con barbie nueva, Antonieta se despidió de ella y me dio tanta ternura, Lucía me miró y sonreímos.

Lu: Ya es hora de irme - asentí mientras escondía mis manos en los bolsillos del pantalón que me puse antes de venirme -
Pau: Sí, ya es hora - hice una mueca -
Lu: Descansa Paula y si necesitas algo llámame
Pau: Gracias Lucía y sobretodo gracias por este día
Lu: No follamos, que raro - me reí y se me unió - me gusto estar a tu lado, que se repita por favor - asentí -
Pau: Mañana llego a mi casa supongo que a eso de las 12 del mediodía
Lu: ¿Comida Italiana?
Pau: Comida Italiana, pastas por favor - le guiñe un ojo - Hasta mañana Lucía
Lu: Hasta mañana Paula - sonreímos y le di un beso en la mejilla -

Me despedí de Antonieta y Lucía de Valeria, las vimos partir, Valeria y yo suspiramos en unísono, mi loca estaba completamente enamorada de Antonieta y yo... Y yo de Lucía.

Val: ¡Joder! Me encanta Antonieta - me reí - ¿Qué?
Pau: Si sois gilipolla, créeme ya se te notaba - nos reímos -
Val: ¿Sigue tu boda en pie? - asentí - aún ¿estando enamorada de Lucía? - suspiré y asentí - que lamentable tía
Pau: Lo sé Val... lo sé.

Pasamos el rato hablando mientras una enfermera entraba para cambiarle el suero y otras cosas más, le di la comida y como a las 9 de la noche se quedó dormida, aún así me costaba dormir pensando en el caos que se había convertido mi vida desde que esos ojos de lobos entraron a ella, desde que me enamoré de esa sonrisa, del sonido de su risa, de Lucía Montemayor.