I BELIEVE IN YOUR LOVE

25.

Octubre, uno de mis meses favoritos y el otoño una estación que me encanta, las hojas caen y Madrid se siente más en paz, sin duda es encantador. La universidad me tiene al borde y eso que apenas voy en el segundo curso, no me imagino en el último, Sofía esta cada vez más hormonal y no, no tiene tanto tiempo, Antonieta esta saliendo con el castaño del día ese y se ve más tranquila, ninguno le ha querido nombrar a Valeria porque se tensa con ese tema, es mejor evitar, y sí, Mike sabe de la historia de ellas dos, aún así se "echo al agua" como quien dice, con Daniel bueno ¿se acuerdan del chico de la pizzería? Bueno por lo que nos conto en una salida, es arquitecto, vive solo y su familia es italiana, se llama Rodrigo por cierto, ahora está saliendo con mi niño bello y no miento Daniel es más él estando con Rodrigo, que cuando estuvo con José, definitivamente siempre hay alguien que nos hace mejor, en cuanto a mí sigo con Bruno aunque mentiría si digo que estoy feliz, no lo estoy y ¿Paula? Os cuento que esta más radiante, más hermosa, más perfecta y más cercana a su boda, por lo que me ha contado Bruno está casi al borde de la locura porque tanto Maru como la mamá de Gabriel la tienen al borde del colapso por la boda, en cuanto a nosotras… Es difícil comprenderlo, ella no quiere que este con nadie, pero ella esta allí con él, eso sí, se alejó del profesor Marcos, por lo menos.

Es miércoles y decidí caminar la ciudad, como os dije me encanta este mes y esta estación del año donde la ciudad es más bonita, y está más en paz, camino el centro de la ciudad pensando como coño terminé en un enredo amoroso entre dos gemelos y lo que es peor, como coño voy a terminar después de que ella se casé, porque aunque lo intente ella sigue con la boda y nada la frenará, ¡Joder Lucía! Vais a terminar muy mal, lo olvidaba, Andrea ya follo con Ashton, casi me muero cuando nos contó a mamá y a mí, bueno nosotras casi nos morimos, mamá la puso en control con nuestra ginecóloga y sólo así se tranquilizó.

X: Lucía – volteé hacía la voz masculina y sonreí de lado, ya no lo odio, ya no lo amo, solo es un lindo recuerdo – ¿puedo sentarme? – asentí y le di un lado –
Lu: Hace un tiempo que no te veía – volteé a verlo unos segundos, ese rubio ojos cafés estaba cambiado, creció –
Pab: Bueno tu novio me corrió y me dio un poquito de miedo la verdad – nos reímos –
Lu: Lo admito, a mí también – reímos a carcajadas como cuando nos empezamos a conocer, como cuando estudiábamos juntos en el cole, como cuando éramos novios, como en el pasado – ¿Cómo has estado?
Pab: Bien, en la universidad voy muy bien, ya en diciembre termino el curso y no me quejo – asentí – y ¿tú? – suspiré – ¿Qué pasa pequeña saltamonte? – así me decía cuando yo me sentía mal –
Lu: Es difícil Pablo, mi vida ha dado un giro desde que comencé el segundo curso – miré al frente y se acercó –
Pab: Hazlo – le sonreí y apoyé mi cabeza en su hombro, suspiramos – ¿me cuentas? – preguntó mientras mirábamos las hojas caer y la gente pasar –
Lu: Mi novio es gemelo de ella… La mujer que amo – suspiró y me hizo un gesto con la mano de proseguir – cuando la vi por primera vez no sabía que esa engreída sería tan importante en mi vida, pero como la vida es muy gilipollas, no sólo sería importante sino también mi cuñada – entrelaza nuestras manos y me sentí como en los viejos tiempos – ¿el problema? Es mi cuñada y… Mi profesora de historia del periodismo Universal – dije en un susurro y me dio un beso en la cabeza –
Pab: ¿Te acuerdas de la mujer con la que me acosté que te engañe? – asentí – es la jefa de cátedra de Romano, sí yo estuve con mi profesora de Romano – nos reímos – estamos flipando, solo nosotros estamos aquí hablando de nuestros amores – sonreí y apreté más fuerte nuestras manos –
Lu: Un día me dijo que apostaba que antes de que acabara el semestre me tendría bajo sus sábanas y lo logró – reí irónica –
Pab: Sí, es muy segura tu profesora – asentí – y ¿qué vas a hacer? La Lucía que yo conozco no jugaría con dos personas – resople –
Lu: No lo sé Pablo,  creo que terminaré con Bruno y no por ella, sino por mí, no me gusta jugar con la gente
Pab: Esa es mi chica – me reí y luego se me unió –

La vida nos volvió a reencontrar para disculparnos, para perdonarnos, para volver a comenzar, seríamos colegas, me contó que se enamoró de una chica que estudia con él y me alegré muchísimo, Pablo no es mal chaval y la verdad merece ser feliz, me aconsejó lo que una vez Sofí me aconsejó y no le hice caso, ambos tenéis razón no estoy siendo yo si estoy en este juego peligroso donde todos saldremos perdiendo, pasamos el día hablando pero lo llamaron y se tuvo que ir, prometiendo que me llamaría para que fuésemos a comer algo y yo seguí mi camino hasta casa, cuando entré vi lo mejor del mundo esperándome, mi familia, las tres personas más importantes de mi vida y los que me hacen seguir adelante

Mai: Hija no te oímos llegar, ven sientate conmigo – sonreí y caminé para acurrucarme a los brazos de mamá –
Lu: Estaban emocionados por la serie
Paul: Es que la serie te hace flipar – nos reímos –
Andre: ¿Podéis ver la serie callados? – le lance un cojín y me saco la lengua –

Y es en estos momentos junto a mi familia donde entiendo el verdadero amor, estoy enamorada de alguien que jamás dejará sus intereses por mí y no puedo sólo esperar a que un día se de cuenta que esto es lo más importante de la vida. Y aquí en los brazos de mamá entendí que debía tomar una decisión y era alejarme de los Valenzuela, era lo mejor para mí, para Bruno, para Paula, para todos, no quiero que nuestro romance de estación llegue más lejos y yo terminar sufriendo peor, no es justo.