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Lucía

Los días pasan tan rápido como que ya estábamos en el hermoso Noviembre, sí, los días pasaban ferozmente. Extrañaba mucho a Bruno pero gracias al internet hablábamos frecuentemente y me encantaba sus consejos, me los daba cuando más los necesitaba.

Andrea sigue aún con Augusto, me sorprende pero también me alegra de verlos juntos. Antonieta esta totalmente enamorada de Valeria y viceversa a estas alturas no las veo separadas, me cuenta Antonieta que hace como dos días una chica intentó propasarse con su mujer como la llama ella y la insultó de que manera, yo me reí a carcajadas al escucharla, está loca como una cabra siempre lo diré. Daniel feliz con Rodrigo, están hechos el uno para el otro la verdad que sí.

Carolina ayer la vi, iba con una morena muy linda, en cierta parte me alegra que siga su vida, Sofía es terca y no es justo para ninguna estancarse, dicen que todos tenemos un hilo rojo que nos une a esa persona que es como nuestra alma gemela, si al final del camino ese hilo sigue intacto entre ellas, es porque están hechas para estar juntas aunque ahora no lo vean así.

Pablo está cada vez más unido a nosotros incluso más que cuando éramos novios, increíble, él y Michelle son una pareja preciosa. En cuanto a Carlos, Mauro y Martina no sé mucho, nos hemos visto un par de veces casual y ya, algo instantáneo.

Y ¿Paula? Sigue igual, sus clases fabulosas, su prometido empresario del año, su trabajo en la televisora, su vida como si no hubiese entrado yo en ella, por lo que me contó Carolina cuando la vi, estaba más pendiente de la boda y por eso Carolina estaba más pendiente de sus cosas, me dio una punzada de dolor y celos al pensar en ella pendiente de su boda pero antes de conocerla yo sabía que ellos se iban a casar, no es nada nuevo.

Sí, ese Martes salimos, me llevó a una terraza privada donde se veía gran parte de Madrid era preciosa la vista, había una decoración preciosa, un mesero, una mesa para dos, un trío de músicos, todo era hermoso y yo estaba embobada.

Flashback
Lu: Joder Paula esto es perfecto - la miré y sonreía orgullosa -
Pau: Que bueno que te haya gustado Lucía - sonreí y la abracé -
Lu: Me encantó - le dije estando centímetros de sus labios y me besó -
Pau: ¡Comamos! - asentí y entrelazo nuestras manos para ir a la mesa -
Fin Flashback

Fue tan genial, allí hablamos infinidades de cosas, parecíamos dos enamoradas que nunca tendrían el porqué de separarse, más bien nos uníamos más, tomamos vino, comimos, nos reímos, bailamos, vimos la maravillosa vista llamada Madrid y para medianoche bajamos a una suite donde me quede más extasiada, tenía un ventanal maravilloso, una cama matrimonial con sábanas blancas, una champaña y dos copas, había velas, una barra americana, unos sofás preciosos, un espejo en el techo donde nos veíamos sin mucho esfuerzo. Hicimos el amor en toda la suite, hasta que caímos agotadas y nos quedamos dormidas, aunque no podíamos faltar ella a su trabajo, yo a mis estudios.

Estaba a unos minutos de verla, tengo clase con ella y aún me da nervios verla, me alegra el corazón pensar en sus ojos grises, labios rojos y cabellera roja, Antonieta ya no falta a clase así que estamos los cuatro en la cafetería y se nos unió Sonya quien nos comentó que conoció a una chica y se la están llevando muy bien, me confesó o bueno nos confesó que si quería intentar conquistarme, lo cual me dejo sorprendida pero que no podía competir con Paula y tragué saliva para no ahogarme con sus palabras, Sofía nos cambió el tema y seguimos compartiendo hasta que se hizo la hora de clase y nos fuimos, Sonya a dar Ética, Sofía a su facultad, Daniel detrás de ella, Antonieta se vino conmigo y le agradezco al universo que lo haya hecho porqué lo que iba a ver, me hubiese tumbado pero ella estaba para sostenerme.

Anto: Joder Lucía tengo sueño - nos reímos - ¿Cómo te va con Paula? - subí los hombros -
Lu: Ni mal ni bien, desde ese Martes que nos vimos a duras penas hablamos o nos vemos de casualidad aquí en la facultad, pero nada más - sonrió de lado y asintió -
Anto: Venga entremos - Antonieta entró primero y sé quedo como piedra y boquiabierta -
Lu: Que suce... - yo detrás de ella me quedé paralizada, pero segundos después volví en sí - discúlpenos por interrumpir - Gabriel bufó y Paula parecía un papel transparente - nos vamos - saqué a Antonieta como pude mientras oía a Gabriel quejarse -
Anto: Mierda Lucía perdón por no reaccionar al momento - negué -
Lucía: Esperemos a que los chicos entren y entramos - estaba resistiendo para no quebrarme -
Anto: ¿Un abrazo? - me mordí el labio inferior y negué -

A los dos minutos los chicos empezaron a entrar y Gabriel salió del salón fulminándonos con la mirada, Paula me miraba intensamente cuando entré al salón, yo no le miré en toda la clase y cuando terminó la hora fui la primera en irme, incluso dejando a Antonieta en el salón, necesitaba salir de allí y respirar aire puro o moriría, tropecé con una chica.

X:Disculpa tía, joder no te vi - negué -
Lu: No pasa nada, igual no estaba pendiente - sonrió y sonreí amablemente -
X: ¡Mucho gusto, Analía! - estrechamos nuestras manos -
Lu: ¡Un gusto, Lucía! - sonreímos y una voz nos saco de ese trance que estábamos -
Pau: Lucía - dijo fuertemente y volteé a verla - ¡Necesitamos hablar!
Lu: Nosotras no tenemos nada que hablar profesora - su mirada me suplicaba pero me sentía dolida -
Ana: Perdona, me voy, fue un gusto conocerte Lucía - sonreí y asentí -
Lu: Nos vemos luego Analía, fue un gusto y disculpa el tropiezo - se ríe y me gustó su risa, es raro pero sí -

Luego de irse volteé y estaba frente a mí una Paula echando fuego por los ojos, estaba roja de la rabia y cruzada de brazos, me agarró por el brazo y me llevó al primer salón que encontramos, cerrándolo con seguro, me apoyé en el escritorio y me crucé de brazos.

Lu: ¿Qué desea Profesora Valenzuela?
Pau: - Me miró intensamente y bajó los hombros derrotada - Perdona... - susurro -
Lu: No hay nada que perdonar, no sé de que habla - dije indiferente y me miró -
Pau: - Se acercó peligrosamente a mí y pude notar los nervios en sus ojos - Lo que viste, joder no es así, yo... Yo jamás podría estar con Gabriel donde estuvimos nosotras - la mire sería - Gabriel vino, estábamos hablando y me besó, pero cuando todo se volvió más intenso intenté alejarme pero no me hacía caso - decía exasperada - y llegaron ustedes y mi mundo cayó - sus ojos se cristalizaron -
Lu: Esta bien Paula, te creo - asintió triste - me voy - pasé por al lado de ella y llegué a la puerta, no podía irme y que ella tuviera su perfume, sus besos, me repugnaba el sólo pensarlo - ¿Te vienes conmigo? - pregunté mientras la veía sobre el hombro, volteó sorprendida y se acercó a mí para irnos de aquel lugar -

I BELIEVE IN YOUR LOVEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora