Capitulo 1

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A Elizabeth la habían aceptado en su escuela de música, cuando abrió el computador y vio el correo de la escuela, su emoción era tan grande que no cabía dentro de ella. Salió corriendo de su casa, era madrugada lo sabía, pero era necesario para ella y corrió unas cuadras antes de llegar a la casa del que era el amor de su vida. Subió hacia el balcón y abrió la puerta, dejando ver a su amada completamente dormida.

— mi amor!!! — susurró en un chillido

Asustada, la más joven se despertó y al ver a Elizabeth frunció en ceño confundida.

— me aceptaron!!!!— susurró casi en un grito.

La sonrisa de la menor se agrandó de oreja a oreja y saltó en los brazos de su novia.

— dios!!! Felicidades!!!!— ambas unieron sus labios, celebrando el logro de Elizabeth.

Decidieron acostarse abrazadas y simplemente mirar el techo, mientras disfrutaban de la presencia de la otra.

— en ese caso...¿que pasará con nosotras? — preguntó Diana, con 17 años, temía que al ser 5 años más joven que Lizzie, su relación fuera más vulnerable.

— nada...— susurró Lizzie — es solo un año bebé..— dijo Lizzie besando sus labios.

Diana se acostó de lado apoyando su cabeza con su mano y las dos hicieron contacto visual, dándole un aire serio, pero gracioso a la menor.

— me llamarás todos los días en la noche — Lizzie asintió aguantando su risa — y me tienes que contar todo lo que hiciste, OK? —

— te lo prometo bebé...— Diana sonrió y la besó, el beso fue lento y lleno de cariño, pero se volvió rudo y Diana terminó sentada sobre Elizabeth.

La menor quitó su camisa, dejando ver sus senos suaves y grandes que a Elizabeth le excitaban tanto. Lizzie quitó su camisa al igual que la menor y las dos no dudaron en seguir desnudándose hasta quedar completamente desnudas. La excitación era tan grande que con apuro unieron sus centros y los rozaron con fuerza el uno con el otro.

Los gemidos de las dos eran callados por los labios de la otra. Sus narices se rozaban, mientras que con los ojos cerrados los movimientos de ambas se volvieron más rápidos. La boca de Lizzie fue a los senos de Diana, la mayor los chupaba como si aquellos fueran un chupete, haciendo que Diana no pudiera aguantar y soltara un gemido que se debió haber sentido por toda la casa.

En ese instante, la puerta sonó y el corazón de las dos se aceleró, del miedo a ser atrapadas, pero eso no era  un impedimento para parar.

— Diana, cariño, ¿está todo bien?— preguntó la que se escuchaba ser, la madre de la menor.

— s-si..— dijo Diana escondiendo su rostro en el cuello de Lizzie, mordiendo y chupando su piel.

— ¿estás segura?...no te oyes muy bien—

— es-estoy de maravilla mamá...s-solo— y Diana había llegado a su primer orgasmo, fue gracias a Elizabeth quien tapó su boca con un beso, que los gemidos no se oyeron fuera de la habitación, Elizabeth giró a Diana, dejándola acostada en la cama y ella arriba de la menor— solo algo de dolor de cabeza — aprovechó a decir.

Elizabeth bajó hasta llegar a la intimidad, aún sensible por el orgasmo anterior, de Diana.

— ¿te traigo una pastilla?— preguntó la madre.

— NO...quiero decir, no mamá, gracias, estaré...estaré bien— la lengua de Lizzie hizo un viaje por el clítoris de la menor, mientras que su lengua saboreaba y hacía círculos, estimulando aquel punto sensible, Diana hacia lo posible por que no se le escapara un gemido.

My best friend is my lover Donde viven las historias. Descúbrelo ahora