My best friend is my lover

Capítulo 20

Han pasado tres meses, tres meses en los que nos hemos cuidado la una a la otra, en la que hemos disfrutado de nuestra libertad, en la que hemos vivido y no simplemente ocultarnos de los demás. Tres meses en los que hemos vuelto a confiar la una en la otra y hace justamente tres meses en los que he pensado en volver a poner ese anillo en mi dedo, en los que me he dado cuenta que quizás Lizzie merece otra oportunidad.

Así que hoy fui al trabajo, Lizzie me había dicho que me vendría a recoger cuando terminara. Así que pasé todo el rato de un humor que incluso Tom se sorprendió.

— ¿y se puede saber porque tanta emoción?— preguntó con una sonrisa.

— pretendo decirle que si a Lizzie...— dije y el frunció el ceño— para casarnos— el levantó las cejas y luego dio una leve sonrisa.

— me alegro por ti...de verdad que si — dijo en un tono triste y luego se fue a hacer de nuevo su trabajo.

¿Que le pasaba? Tom no era así, el usualmente siempre me apoya y tiene una enorme sonrisa y me abraza y...oh

Me acerqué a él y el se giró hacia mi, y se quedó en silencio esperando que dijera algo.

— ¿puedo saber que te pasa a ti? No...no te ves bien — dije y el negó.

— estoy bien yo...

— Tom, ya hace un buen tiempo que llevamos siendo amigos...sabes que puedes confiar en mi, puedes decirme lo que sea...— dije tomando sus manos y el las miró y finalmente me miró a los ojos.

— ella no te merece — dijo y yo fruncí el ceño

— ¿que?—

— Diana ella no te merece, eres una chica increíble, estás llena de vida, eres joven, inteligente, graciosa y tienes un corazón increíble y ella se acosto con otras te rompió el corazón, y luego una semana después tu la perdonas, así como si nada!! — dijo y vi la inquietud en sus ojos— y...se que no es mi problema, pero también sé que me importas y mucho...y que ustedes se aman...pero...pero se qué hay gente que te puede dar más, sé qué hay gente mejor que ella...¿qué tal si lo hace de nuevo?...¿qué tal si te hiere de nuevo?—

— ¿que gente? — pregunté

— yo...yo te puedo dar mucho más, yo te puedo dar más y yo jamás te haré sufrir como ella lo hizo — dijo Tom

— tú eres mi amigo...—

— yo no quiero ser tu amigo Diana, esperé mucho para que me eligieras a mi...esperé mucho para que ella te demostrara por sí sola que no vale nada y siempre estuve ahí apoyándote porque en el fondo sabía que tú la amabas a ella, pero confiaba que algún día...al que eligieras iba a ser a mi—

— Tom...yo no sabía nada de esto...— dije a punto de llorar porque sabía que después de esto lo perdería.

— ahora lo sabes...—

— debo...debo pensar en todo esto Tom...todo esto fue tan de repente — dijo confundida y el asintió.

— solo dime si hay esperanza para mi...no me dejes esperando por nada —

Suspiré y luego lo abracé, sabiendo que quizás esta sería la última vez que pueda estar así con el. Luego me separé y volví a tomarlo de las manos.

— yo te quiero muchísimo Tom...lo prometo, cuando todo andaba mal conmigo y con Lizzie tú fuiste mi persona y lo sigues siendo...eres alguien especial para mi y perderte me dolería un montón...—

— ¿pero?—

— pero Lizzie es el amor de mi vida...Lizzie es mi alma gemela, Lizzie es mi todo, tuvimos tres años de relación a escondidas y nos criamos juntas literalmente...no hay nada que una no sepa de la otra...y no hay nada que ame más, que ella...no te quiero dar esperanzas Tom, sé que lo que hizo es grave, pero toda la felicidad que me da supera de mucho a lo que me hizo sufrir...— dije esta vez llorando — Lizzie es mi vida entera y en mi cabeza no cabe amar a alguien más como la amo a ella Tom, lo siento mucho — el asintió y vi que me llegó una notificación de Lizzie diciéndome que ya estaba afuera.

— debes irte ya supongo...— asentí— espero que ella te haga muy feliz ahora que ya están bien Di, lo mereces — dijo y yo lo abracé.

— ¿esto es un adiós?— pregunté

— necesito tiempo para mi...eso es todo, pero te prometo que volveré y que siempre serás mi enana — dijo y las lágrimas no paraban de salir.

— te quiero mucho Tom...—

— te amo mucho Di...—

Di un beso en su mejilla y tomé mi bolsa, salí y vi el auto de Lizzie quien me sonreía. Me senté a su lado y di un beso en sus labios. 

Supongo que este día, y con la decisión que había tomado, iba a ser el comienzo de una gran historia, de nuestra historia...