Capítulo 20

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Alejate

Estas mal... escucha tienes que alejarte

Abre los ojos ¡idiota!

Ambos llegaron al lago negro, la idea de tener una cita con su novio le fascinaba a Harry, o al menos eso es lo que su mente le obligaba a pensar. 

Harry intento apartar ese sentimiento incómodo dentro de él, se sentía con frío, los dedos de sus pies se conjelaban al igual que las de sus manos. Cubrio sus manos en su túnica para aliviar ese frío incómodo.

Se acomodó en una de las enormes raíces del árbol, intento sonreír al verse reflejado en aquellos ojos azules que lo admiraban. Pero se sentía tan... incómodo tan... molesto

No se que sucede... Pero esto no está bien y tu lo sabes

Y esa voz... esa maldita voz dentro de su cabeza no ayudaba en nada

- Tengo tus chocolates favoritos - Harry salió de sus pensamientos al escuchar a Cedric, vio aquella caja negra con decoraciones naranjas frente a sus ojos. Era más grande que las últimas que había recibido

No lo toques, esto es lo que te llevo a esto

Con sorpresa y vacilación, sintió como unas manos frías tocaban su mentón, elevó la mirada para ver al dueño de aquella mano fría

Hizo caso omiso a aquella tormentosa voz y sonrió - sólo haces  que me enamoré más de ti - mordió ligeramente su lengua, por un segundo sintió como su boca se movía sin su consentimiento

Basta, hazme caso... no sigas

En ese momento sintió pánico. De manera poco común y nada realista  se vio a él mismo sentado en aquella raiz... recibiendo  aquella caja. Era como ver a un gemelo ocupando su lugar.

Pásalo varias veces para entender lo que sucedia, hace unos instantes estaba viendo a Cedric y ahora se mira a él mismo

Las imágenes que antes eran borrosas se fueron aclarando. Recuerdos que no sabía que tenía, volvieron a su cabeza.

Este día no puede ser mejor - decía Harry mientras observaba a Draco desde el otro lado del comedor. Sonrió tan estúpidamente que Ron tuvo que golpear su brazo que sostenía su cabeza haciendo que se golpee con la mesa

- si tan loco de amor estas por ese huron deberías ir y confesarte de y una vez

- no lo sé - Harry sobo su rostro - hace días que dejo de fastidiarnos, quizás ya se aburrió - soltó un suspiro mientras inclinaba su rostro

- quien no parece aburrirse es Cedric - dicho esto Hermione señaló con el mentón a Cedric, quien se acercaba a su mesa

- ¿podemos hablar? - pidió tímido.  Harry suspiro

- estoy...

- tomará unos minutos, por favor -  suplicó

Harry volvió a suspirar - esta bien - se levantó de su asiento

drarry, es un buen apodo para nuestro amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora