drarry, es un buen apodo para nuestro amor

Capítulo 6

Apenas eran las seis de la mañana. Harry se encuentra rodeado de sus amigos.  La situación era incomoda, Harry apenas abrió los ojos notando que su mente se encontraba en blanco, nadie se atrevía a decir nada, los maestros fueron los primeros en visitarlo para realizar análisis en base de magia para luego retirarse sin decir palabra que no sean un buenos días  para luego dejar entrar a Ron y Hermione quienes de igual manera sólo han dicho el dichoso buenos días soltando unas cuantas lágrimas, abrazandolo y luego silencio. Entre los brazos de Hermione, Harry miraba sobre el hombros de la chica a tres Slytherin parados en una esquina, cosa que también le incomodaba.

Ya que se trata de los tres Slytherin menos favoritos de toda Hogwarts

- ¿como te sientes? - pregunto Hermione, retirándose del asfixiante abrazo. Ron se acercó a su novia en espera de una respuesta. 

Harry hizo una mueca de disgusto, apartó la mirada de las tres serpientes, luego fruncido el ceño

- ¿Cómo debería sentirme?- respondió mostrándose enojado - ¿Qué hago aquí? No recuerdo el porque estoy en la enfermería, está más que claro que ustedes no me dirán nada - Ambos leones se miraron preocupados por la fría respuesta que recibieron.

Draco levantó una ceja al sentir la mirada de Harry hacia su persona

- ¿que hacen ellos aquí? ¿Tienen que ver con que yo este en esta camilla?

Ahí sentado desde la esquina teniendo a su lado a sus amigos, Draco peiscaba de manera constante su antebrazo. Hace unas horas que Harry despertó, tuvo una corta y relajada charla con Harry,  el cual había sido interrumpido por los lamentos inesperados del mismísimo Potter. Después de eso no ha logrado dirigirle la palabra, sólo ha  recibido  miradas de incomodidad y desconfianza. Y eso le ponía nervioso, decaído y de mal humor

- ¿Qué haces ellos aquí? - volvió a  preguntar Harry lo más alto que pudo para que las serpientes lo escucharán.  Draco se tenso, ni el sabría responder esa pregunta, bueno si sabe pero aún no quiere hacerlo

- bueno - Hermione no sabía que responder, Harry elevó  una ceja en espera de una respuesta, luego dirigió su mirada hacia el rubio que no le quitaba la vista de encima

- debes  comer - intervino Ron al ver que su novia no hallaban que decir y ver como Harry y Draco se fulminaban con la mirada - llevas días sin hacerlo - no recibió respuesta.  Harry vio con una mueca el plato de frutas y la apartó

- no tengo hambre - respondió con simpleza. Todos fueron testigos del pequeño brillo rosa que aparecieron en sus ojos verdes. Draco puso ambos brazos esperando alguna reacción de parte de Harry - ¿y Cedric? - pregunto Harry con una sonrisa, alejando aún más el plato, de verdad no tenía ganas de comer - ¿Por qué no ha venido a verme?

Draco suspiro al escucharlo preguntar por el idiota ese, al ver que los descerebrados de los leones no sabían como responder se levantó de su asiento, Pansy y Blaise no tardaron en seguirlo, apartó a Weasley de su camino, fulmino con la mirada a Harry, sin decir palabras acercó el plato hacia el pelinegro - En lugar de preguntar por tu noviecito ese, mejor piensa en llenar ese estómago tuyo antes de que te deje sin dientes - siseo con enojo.

Harry arrugo la frente iba a replicar pero fue silenciado con un trozo de manzana - comelo - ordenó Draco.  Los leones vieron con cierta sorpresa la manera de actuar de Malfoy y la serpientes sólo se dignaron a reírse mentalmente, no querían molestar a su príncipe - ahora - Harry bufo con la fruta en medio de sus labios, de manera perezosa fue masticando aquel trozo de fruta que parecía ser el más dulce que halla probado.  Sin pensarlo agarró otro, y otro hasta dejar el plato limpio. Hermione agradeció de manera silenciosa, pues  ella no había logrado nada desde que entró con ese plato. Draco alejó el plato vacío para pasarle otro lleno de ensalada verde, Harry hizo una mueca y vio con disgusto a Draco