Aybike y Ogulcan se disponían a pasar un día especial juntos como buenos hermanos que eran. Habían planeado una larga caminata por el campo, disfrutar de un buen picnic y terminar la tarde en una pequeña cafetería disfrutando de un delicioso pastel de limón.
La mañana estaba radiante, y juntos emprendieron el camino. Observaban el paisaje que les rodeaba mientras se guiaban uno al otro en una divertida charla. Aybike estaba disfrutando mucho ese día, era importante para ella poder compartir tiempo valioso con su hermano, corazón de su vida.
Después de algunas horas de caminata, llegaron a un prado hermoso donde extendieron una manta y sacaron la comida del día. Aybike había preparado la torta que tanto le gustaba a Ogulcan, y él decidió traer la fruta para complementar el menú.
Sentados sobre la manta, comían, conversaban y reían de las ocurrencias del otro.
— Ogu, ¿hermanito, deseas compartir algo conmigo? -dijo Aybike, sonriendo colmada de amor y cariño.
Ogulcan dejó la comida a un lado y se tomó un momento para reflejar.
— Mira, hermana, en este momento estoy disfrutando muchísimo nuestro día. Tú, yo, la naturaleza y la comida deliciosa. No se me ocurre nada más en este momento.
Aybike sonrió y lo besó en la mejilla.
— ¡Eso es suficiente para mí! Hermanito, gracias por pasar este día conmigo. Con esto ya me siento tierna.
Terminado el picnic, continuaron su aventura en la cafetería. Se sentaron antes de pedir para plantearse la pregunta con la que había soñado Aybike.
— ¿Ogu, alguna vez has pensado en formar una familia?
La pregunta lo pilló por sorpresa, Ogulcan no contaba con que Aybike iba a ser tan directa con la pregunta. Pero luego de unos segundos para prudencia, decidió responder.
— Honestamente, hermana, aún no he pensado en ello. Pero quién sabe, ¿tal vez algún día encuentre a la persona indicada y vaya por ese camino?
Aybike asintió con la cabeza, no deseaba hablar sobre ello por mucho tiempo. Estaba contenta con saber que en algún momento Ogulcan sí se haría padre, tomó su mano y lo miró sonriente.
— No hay prisa Ogu, solo quiero que sepas que estoy aquí para ti en los días buenos y malos.
Y así pasó el resto del día, hablando sobre sus aventuras y sentimientos, disfrutando del día que habían tenido juntos y de su relación como hermanos inseparables.
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" 𝐄𝐍𝐓𝐑𝐄 𝐓𝐔 𝐘 𝐘𝐎 𝐘 𝐄𝐋"
Fiksi Penggemar𝐴𝑐𝑙𝑎𝑟𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛: 𝑙𝑜𝑠 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑗𝑒𝑠 𝑛𝑜 𝑚𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑡𝑒𝑛𝑒𝑐𝑒𝑛 𝑠𝑜𝑛 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑛𝑜𝑣𝑒𝑙𝑎/𝑠𝑒𝑟𝑖𝑒 𝑡𝑢𝑟𝑐𝑎: 𝐾𝑎𝑟𝑑𝑒𝑠𝑙𝑒𝑟𝑖𝑚.