Excursión obligatoria
Un peso calló en mi hombro sacando mi mente de la luna.
Ralsei había caído dormido en él.—A-Atención chicos. - La voz de Alphys resaltó por encima del barullo de la mitad de los adolescentes que participan en la excursión.
Fin de curso siempre trae festejos, aunque yo siempre busco algún diverso pretexto para no ir. Por desgracia este año también.
Y lo peor, Ralsei me dijo obligó a ir y ahora se duerme encima mío.
—Escuchen. -La voz de mi hermano resaltó y ganó la atención que nuestra maestra no logró captar. Ella pareció agradecerlo internamente. —Dentro de una hora llegaremos al pueblo “Nhigt Sky”. Recuerden que primero iremos al hotel, luego al museo y por último dejaremos que vayan por doquier siempre que no se metan en ningún problema.
Rodé los ojos. ¿¡Por qué tenía que ser Asriel!?
De mala gana hago un gesto con mi hombro para que el durmiente deje de estar encima mío.
No duré mucho en libertad de movimento, tras otro rebote del bus quedó su cabeza en mis pies.
Ahg, al diablo. Que se quede ahí.
Coloco los cascos de nueva cuenta en mis oídos, poniendo la música al máximo aunque eso en definitiva no sea bueno. Solo quiero salir del mundo, fingir que no existo.
La hora no pasó para nada rápida. El tiempo pareció detenerse o preferir avanzar lentamente.
Ya para cuando llegado había escuchado todas las canciones de mi teléfono.
La mayoría de los de mi clase ya estaban parados en el estrecho pasillo del bus, caminaban muy lentamente. Cosa que algunos aprovecharon para reírse y decir comentarios al respecto de que tengo novio. Todos con sus maletas y yo con un Ralsei dormido y babeado.
¿Alguien me dice que hay de tierno en esto?
Es asqueroso cuando menos.Un suspiro pesado sale de mis labios. ¿Y ahora como me lo quito de encima?
{•••}
Tan pronto como nos bajamos del transporte subí la capucha de mi abrigo, ocultando tanto como podía mi rostro humano.
No quiero que nadie me vea mal... otra vez
Nos quedaríamos en ese no tan pequeño pueblo cuatro días con tres noches.
—Kris. ¡Mira! Una mariposa. -Otra vez, por enécima ya, roté mis ojos fiándome de que nadie podría decirme nada al tener estos tapados por mi largo flequillo.
Todos tenían un muy buen humor, Susie incluída. Todos, absolutamente todos menos yo.
—¿Está todo bien, Kris? -Ralsei se giró en mi dirección, una mariposa de alas celestes adornaba su cabeza.
Asentí secamente.
El chico lanudo desvió su mirar al piso por varios segundos, mantenía una clara expresión de duda en sus ojos infantiles.
—Amm... Sé que estás aquí porque yo te insistí de más... Realmente lo siento por eso... Pero, ya que estamos... ¿No quieres tratar de divertirte? Podemos volver a ser “La pandilla divertida” como en nuestra primera aventura y pasar un buen rato.
—Solo quiero irme a casa ya. -Objeté parando ahí la conversación para encaminarme a seguir al grupo de estudiantes a nuestra primera parada, el hotel.
{•••}
—Habitación 708, quinto piso, octava puerta. -Anunció rebosante de amabilidad la recepcionista del hotel.
Tomé de mala gana la llave y me dirigí al grupo de estudiantes que buscaban quien era su compañero de cuarto.
Nos habían agrupado en chicos y chicas, en cada habitación dormirían dos alumnos, ambos del mismo género.
—... suerte nos abandonó. -Susie y Ralsei estaban hablando antes de que yo llegara.
El menor de nosotros asiente, se gira hacia mi sin perder su buen ánimo pese a saber que yo no estoy tan feliz—¿Con quién te tocó a tí, Kris?
Me encojo de hombros en respuesta. Deseaba tener la suerte de que me tocase sola, aún así, lo más seguro que en esos momentos había era que terminaría con una compañera.
—Pues prepárate, a mí me tocó a Catty, no ha parado de mirarme mal desde que se enteró. ¡Ella me odia!
—A mí me tocó Berdly, creo que tampoco me tiene mucho estima.
Me limito a escuchar su conversación, restándole total importancia al tema de compañera de cuarto.
Esperaría a que al entrar al cuarto la vea ahí con sus cosas.Ese era el plan inicial, que no duró mucho.
Pues la placa de la llave con el número de mi cuarto fue jalada asia abajo, causado por una pequeña patita blanca estirada por su dueño para poder llegar a mí. Otra patita se posó en mi rodilla, apoyándose de mí e indicándome que Temie estaba en mis pies.
Lo miro con duda por unos segundos.
—¡¡¡Krisp y Tem ser roomies!!!
—¿Qué...? -Le miro sin creerlo.
Temie me enseñó su llave con la placa. “708” leí.
No me jodas.
¿Siquiera es chica?
En una esquina apartada de nuestro grupo, una gata adolescente de malas dirigía todas sus energías en mirar con total repudio a quien pasará los próximos días con ella en el mismo cuarto.
~Continuará~
Hoooola gente que lee esto!
Si siguen aquí luego de tanto tiempo se merecen un gran saludo y saber cuanto los quiero.Hace poco Marcosmartinbode me escribió preguntando por la historia (un saludito y muchas gracias de paso) y me dí cuenta de que hay personas que les gusta esta historia. Dos o tres, pocas sí, pero están. Entonces a ustedes, ¿pueden poner algún comentario diciendo “yo”? Quiero saber mejor quienes son ;3 y darle mis saluditos y unas galletitas 🍪
Pero ya que están, si tienen tiempo déjenme alguna crítica, sin querer ofender, de lo que no les guste o tenga que mejorar.Voy a hacer algo. Trataré de actualizar lo más seguido que pueda está historia, ya que ya está escrita solo es transcribir y arreglar.
Enserio, muchas gracias por leer y votar ✨❤️ que por más pocos que sean me alegran el día.
Nos vemos en la próxima ;3
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🤍𝚃𝚠𝚘 𝙷𝚎𝚊𝚛𝚝𝚜❤️
RandomUno, siempre estuvo solo. Otro, creo una barrera de acero en su mundo para alejar a todos y evitar ser lastimado. Uno positivo. Otro negativo. Uno lleno de esperanzas. Otro vacio. ¿Podrían dos seres así amarse? Alguien que expresa emociones cada que...