♥️ Capítulo 11🤍

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Monstruos y humanos.

Si tan pocas ganas tienes de estar con esa chica, puedo pedir que me cambien de habitación con ella, así volvemos a estar como antes.

Asriel se había acercado a mi persona desde la espalda, justo cuando la unión de perro y gato decidió irse del lugar.
Encaré al recién llegado no bien recibo, mirándole fijamente. Si las miradas mataran, él estaría desmembrado en el piso.
Su tonta cara que finge que nada me molesta.

El ambiente no tardó en tensarce, filosos cuchillos jugaban en él.
La sonrisa de Asriel desapareció casi al instante y Ralsei se desesperó buscando arreglar de alguna forma la situación cruda.

He-¡Hey! Creo que la señorita Alphys nos está llamando... D-deberíamos de ir... -Ralsei suspiró en alivio cuando vió que di media vuelta para ir en dirección de la mayor.

{•••}

¡Demonios! Tendría que haber hecho de todo para quedarme en casa.

Llevábamos rato caminando sin descanso, más de una hora.

Me dolían los pies, estaba muy cansada, demasiado.

En todo el santo recorrido, mantuve la mayor distancia que pude con Ralsei y Asriel, quedando sola con Susie casi todo el día.

Ambas somos el dúo dinámico, nadie se libró de su ración de bromas del día.

Oye, Kris. -Susie llamó mi atención, su voz seria me desconcertó. —Te he notado algo rara... ¿Hay algo que te está molestando?

Muchas cosas.

No.

—Si lo dices así de tensa es difícil de creer.

—Estoy bien, solo cansada. -Rechisté rotando los ojos.

—Demonios Kris. -La dinosauria sonríe en burla. —Si que eres una devilucha.

Rodé los ojos de cuenta nueva. Solo es Susie siendo Susie.

B-Bien chi-chicos. -Alphys alzó la voz, esperando que todos se callacen para poder seguir con su anuncio. —Estamos en el ce-centro del pu-pueblo. L-les dejaremos d-dar una vu-vuelta, p-pero, por favor n-no causen pro-problemas y-y regresen aquí dentro de una ho-hora.

¡Al diablo! Yo me voy directo al hotel.

Ese era mi plan, lo que más deseaba en ese momento y por lo que más lucharía. Pero, como siempre que hay un “pero” en esta mierda de vida, me negaron la posibilidad de ir ahí.

¿Quiénes? Asriel y Ralsei.
Los dos se empeñaron en hacerme pasar un muy mal viaje.

Asriel no me dejó irme; “Aunque seas mi hermanita no puedo dejar que te vayas. Además, tienes que pasar más tiempo con gente de tu edad.” Dijo

Y Ralsei, mirandonos a mí y a Asriel respectivamente agregó: “Yo iré contigo, me aseguraré de que pases un buen rato... y de que no se vaya al hotel.”

En fin, el albino anda detrás de mí viendo impresionado todas las casas y demás lugares. Un museo, cafeterías, tiendas, todo lo que una pequeña ciudad o gran pueblo tendría.

Ese estudiante se ve de malas. -Un transeúnte pasó por al lado mío diciendo aquel comentario como si estuviera sorda.

Un monstruo con forma de león, acompañado de otro parecido a un rinoceronte.

Carl, estás hecho un ciego de mierda, es una chica.

¡Ja! Si. ¿Que clase de monstruo será? -Mordí mi labio inferior, mi mirada apuñalando mis pies.

Dejé de oírlos al estar muy lejos, pero el resto de personas se quedaron mirando a directamente, nadie tenía la menor idea de lo que era ser “disimulado”

Murmullos que no se hicieron esperar.
La gente que a tan cerca de mí seguían dando comentarios.

Estaba mareada, quería regresar al hotel, no. ¡Necesité irme!

Giré, un movimiento brusco provocó que mi cuerpo se tambaleara. Casi caigo.

Y al levantar la mirada... ví a un monstruo apunto de golpearme.
Como si fuese algún reflejo natural de mi cuerpo, lancé un puñetazo, uno que no hirió a la persona correcta.

¡Ahg!

¡Es una secuestradora!

Ya sabía que no era una adolescente normal.

Mi cabeza dolía, mi mente en blanco quedó.
No alcanzaba a entender nada de lo que pasaba.

¡¿Por qué todos me miran mal?!
¡¿Qué les hice?!

Él... Él me atacó primero...
Él pensó que era una asesina.
Que había secuestrado a Ralsei

Solo me defendía.

¡Solo me defendía! -Grité. Mi garganta pareció rasparse por alzar la voz de tal manera.

Varios monstruos me atacaron. Algunos golpes dañaron mi ser.
Y yo, retorciendo todo mi pequeño cuerpo para sobrevivir, alcancé a oír un grito de ayuda.

Uno me abrazó por detrás. Dejando mis manos inútiles.

Lancé al aire tantas patadas como pude. Alguien delante de mí recibió una de ellas.

—¡Sueltenla por favor! ¡Es mi amiga no me haría nada! ¡Déjenla ir!

Ralsei se oía lejos, muy lejos, cada sílaba parecía ser más baja que la anterior.

Cada impulso que enviaba a mis piernas era ignorado.

Cada músculo quedó paralizado... O así lo sentí.
Todo negro a dónde mirarse. Mi conciencia esfumada.

Y la realidad me devolvió solamente un punzante dolor en mi pie que apenas y aguanté.

Grité agonizante. Traté de librar mi extremidad herida de la mano que la sostenía.

¿En qué momento me habían puesto de cabeza?

¿¡Qué demonios está ocurriendo!?

~Continuará~

Holaaa!
Anayad al habla.
Me pase de raya con la demora esta vez...
Jaja, un disculpa otra vez.

He estado muuuy ocupada terminando el grado, además de estresada. Si escribía algo, quedaría mal.
Por eso esperé a terminar absolutamente todo lo de la escuela.
Tengo ya mis anheladas vacaciones y podré actualizar!
Si estoy bien mentalmente tendrán cada dos días aprox :D
Si no pues.... No sé xd

Bueeeeeeeenoooooo.
Hasta aquí!
Espero que disfrutarán la lectura 👍
Nos vemos en la próxima 👋

 🤍𝚃𝚠𝚘 𝙷𝚎𝚊𝚛𝚝𝚜❤️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora