𝐓𝐞𝐞𝐧𝐚𝐠𝐞 𝐑𝐨𝐦𝐚𝐧𝐜𝐞 | Michael Afton

000

Caminaba furiosa. El profesor de filosofía les había encargado unos trabajos que se iban a ir desarrollando en clase en parejas asignadas por él, lo cual me daba igual, hasta que escuché el nombre de mi compañero.

—¡Hey Afton!

Ese idiota... Michael Afton era un chico problemático, por no decir que era un imbecil bueno para nada. Él gorila gozaba de molestar a gente random que pasa en su camino solo porque si. Sus acciones no tenían excusa alguna, él era malo y ya, todos sus compañeros le temen, exceptuando a algunos como yo que lo odian y algunas que son medio chapita que están "enamoradas" del tipo.

—¿Que mierda haces acá? ¿Y quién sos? Ándate.

Paré mi paso al encontrarme a unos pocos metros de él. Nos encontrabamos en un asqueroso callejón lleno de basura y con olor a alcohol y droga. Genial, el ambiente pegaba perfecto con el pedazo de mierda que era Michael.

—Soy tu compañera de clase desde primaria ¿Como es posible que no me conozcas? — Él me miró por un momento y volvió a lo suyo.

—No es mi culpa que seas tan fantasma ¿Sabes? — «Esta fantasma te va a romper toda la boca de una trompada» Pensé. — ¿Porque seguis acá? Ándate, no lo repito más.

—Voy a ser breve, en filosofía tenemos que hacer un trabajo juntos, me mandaron a-.— Antes de poder terminar de hablar, Michael me interrumpió con un "¡Pensá rápido!" Y tiró algo a mis pies, lo cual explotó. —¡Agh! ¿¡Que mierda!?

—¡Wooow! Fue mejor de lo que esperaba. ¡Debiste ver tu cara! — Él rió, claramente no me estaba prestando ni la más mínima atención. Suspiré con pesadez, probablemente tenga que hacer el trabajo sola, pero Michael nisiquiera se esforzaba por escuchar. —Oh dale, no me mires así, arruinas mi buen humor.

—También arruinas el mío. ¿Me vas a escuchar o no, idiota? — Michael se sobresaltó con el insulto, no esperaba que ella le hable así, nadie le faltaba el respeto por miedo a ser una de sus víctimas.

—¿Te crees muy valiente, pedazo de mierda? — Él se levantó de donde estaba agachado, acercándose lentamente a mi con un semblante amenazante. —Decí lo que tengas que decir y andate, no soporto ver tu cara de mosca muerta.

—bueno perdóname, pero vas a tener que seguir mirándome, tenemos un trabajo que hacer en filosofía — El chico solo rodó los ojos como respuesta.

—¿Pensas que por verme así no presto atención en clases? Obvio que sé sobre el trabajo, imbécil — Volvió a su lugar, donde estaba haciendo mini bombas o lo que sea que me haya tirado anteriormente. Aquello solo había provocado algunas chispas y algún ruido fuerte, sin hacerme daño alguno. —No soy estúpido.

—Eso espero, no tengo ganas de perder mi tiempo. Me voy.

—Ojalá te pierdas.

Estaba algo avergonzada, realmente creía que Michael era un inresponsable de alto nivel, pero quedé como idiota al ir a avisarle algo que ya sabía y más encima insultarlo. Por otro lado no me importaba mucho, iba a ser la primera y última de las veces en las que le dirigiría la palabra y seguramente se olvide rápidamente de toda esa discusión sin sentido.