A la mañana siguiente el primero en despertar fue Lewis, se estiró encima del sillón y escuchó a su cuerpo tronarse por todos lados. Había sido mala idea dormir allí, se dio cuenta de esto cuando se incorporó sobre el sillón al sentarse y sentir un dolor en su espalda y cuello. Suspiró sin más levantándose lentamente para ir al baño. Después regresó y notó que el menor seguía dormido muy plácidamente. Sonrió al ver lo dulce y relajado que se veía el rostro del de pecas al dormir.
Salió de la habitación para llamar a servicio de cuartos para ordenar algo para desayunar y que esté listo para cuando el menor despierte. Ordenó algo simple, unos hotcakes para los dos, y de beber chocolate y café por si acaso el menor prefería uno mas que otro.
Regresó al interior de la habitación viendo al menor estirarse por completo en la cama mientras tallaba sus ojos. Rió en voz baja para no llamar su atención y dejarlo continuar, pero de repente el menor se incorporó de golpe apoyando su espalda en el respaldo de la cama. Mirando confundido todo a su alrededor.
Hasta que su vista se fijó en un punto fijo, y era justo en donde Lewis se encontraba.
—Buenos días Sergio -lo saludó el mayor acercándose.
Checo realmente estaba muy confundido, y no podía recordar nada de lo que había ocurrido ayer, solo esperaba que no hubiera hecho tantas locuras. Porque el mismo se conoce, y sabe lo mal que se pone cuando está ebrio, puede hacer cualquier estupidez y no lo recordaría ni aunque tratara.
—Hola Lewis buenos días -optó por responder.
Lewis no pudo evitar soltar una gran risa. —No te preocupes no te dejé hacer tantas estupideces de las cuales te sentirías arrepentido hoy si te enteraras sobre ellas -le aseguró el mayor.
Checo pudo respirar con mayor tranquilidad al escuchar lo que el británico mencionó. —Gracias por cuidarme -rió con nerviosismo.
Lewis negó. —Ni lo menciones, no te preocupes lo hice con mucho gusto -asintió sonriéndole.
Checo asintió. Su estómago rugió fuertemente, hasta Lewis lo escuchó porque terminó carcajeándose. —Iré al baño -cambió de tema avergonzado mientras se levantaba de la cama.
Cuando abrió la puerta del baño y estuvo a punto de entrar las palabras del mayor lo detuvieron.
—Por cierto no esperaba que bailaras tan bien -soltó Lewis para que Checo por lo menos recordara algo de anoche.
Y si que le sirvió escuchar eso, que recordó de golpe y se sonrojó por completo por la vergüenza al recordar lo atrevido que fue anoche en la fiesta bailándole a Lewis.
No pudo responder nada, se encerró rápidamente en el baño, maldiciéndose mentalmente.
Lewis rió en lo bajo después de que el menor se metió al baño. Luego se distrajo cuando toques a la habitación llamaron su atención y fue directamente a la puerta para dejar pasar a la persona que le traía el desayuno. Agradeció.
Luego esperó a que Checo saliera del baño. Estaba tardando, esperaba que no se duchara en ese momento porque tenía hambre.
—Sergio, vamos a desayunar -llamó detrás de la puerta y el menor la abrió de repente sorprendiéndolo.
El menor lo pasó de largo hasta dirigirse donde se encontraba la comida encima de la mesita. Tomó la bandeja y la llevó rápidamente a la mesa grande.
—Anda ven Lewis, ¿que estás esperando? -le preguntó Checo impaciente porque moría de hambre.
El mayor rió pero se acercó a sentarse junto a él. —Provecho, espero lo disfrutes -le mencionó el británico.
ESTÁS LEYENDO
Golden hour; chewis.
Fanfiction-No necesito de ninguna luz para verte brillar... El ha sido lo más radiante en su vida. Quien lo ha ayudado a salir de la etapa mas oscura que ha vivido. Ha logrado brillar gracias a el, su ángel de luz. -¿Puedes si quiera imaginar como terminé ena...