CAPITULO 12

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―Yo no e hecho nada ―Shinobu fue clara. Estaba aliviada por la recuperación, pero se sinceró en que ella no había echo intervención porque simplemente alguien había echo todo. ―A sido Senjuro.

― ¿Cómo?

―No lose. Pero ha funcionado.

Shinjuro se palpo la herida, de toda la pelea había quedado una cicatriz enorme, que a un le dolía, pero eso era lo de menos. Desvió la conversación hacia Kyojuro, la frustración en Shinobu por no saber lo que Senjuro hizo era evidente y lo que menos quería era hacerla enojar más. Sin pena Shinobu exhibió al escuadrón Kamado en su forma de animar a Senjuro y Kyojuro, le sorprendió que Tanjiro siguiera vivo.

―Solo un problema. Él no durmió en todo este tiempo. ―Kyojuro que no ponía atención a la charla estaba cómodamente sentado a un lado de su padre casi ahorcándolo en un abrazo. Senjuro salió por un poco de medicina mientras ellos hablaban, claro que no quería estar en presencia de la mujer y huyo.

― ¿Sucedió algo más? ―Shinjuro tuvo un terrible presentimiento cuando Shinobu desvió la mirada incomoda. Algo malo paso en su ausencia. ― ¿Es Senjuro? ¿Kyojuro?

―No, no… ―Shinobu rápidamente negó. ―No es algo malo… Pero si podría sorprenderlo. ―Es Senjuro, él y Tanjiro se unieron mucho en su ausencia y…

― ¡Voy a matarlo! ―El infierno estallo antes de que terminara de hablar. Kyojuro hizo por retenerlo entendiendo que no debía levantarse y Shinobu intento calmarlo. ― ¡Le voy a arrancar la cabeza a ese demonio! ¡El muy desgraciado va a desear nunca a verse fijado en Senjuro!

― ¡¿Usted ya lo sabía?! ―Cuestiono Shinobu.

―Si …―Dejo de intentar levantarse, Kyojuro prácticamente se le colgó como un koala para que no se moviera. ―Lo descubrí en el tren, pensé que solo era cosa del desgraciado. No creí que Senjuro tuviera tan malos gustos.

Shinobu se rio por la confesión, pero callo de inmediato por la irritada mirada de Shinjuro.

―Por favor no mate a Tanjiro.

―No prometo nada.

Senjuro regreso acompañado del escuadrón Kamaboko, traían bastante comida porque asumían que Kyojuro comería. Shinobu los dejo solos o mejor dicho lo dejo solo con los mocosos y sus hijos.

― ¡Nosotros cuidamos a ambos pescados mientras dormía! ―Grito Inosuke, llevaba unos postres que había robado de la cocina. ― ¡Cejas locas ha estado muy triste! ―Se refirió a Kyojuro.

― ¡No le digas así! ―Regaño Tanjiro.

―No puede pronunciar bien nuestros nombres ―Dijo Senjuro en la defensa del jabalí.

― ¡Estoy tan feliz de verlo bien! ¡Estábamos tan preocupados, pero sabíamos que iba a volver! ―El positivismo de Tanjiro brillaba. Incluso le dio pena a Shinjuro porque se tendría que deshacer de él.

Los jóvenes los acompañaron a comer, Tanjiro se sentó a un lado de Senjuro y lejos de Kyojuro a la vez. Pero la distancia no parecía ser suficiente, mientras comían Tanjiro sintió una pesada mirada encima de el de parte de Shinjuro. Kyojuro comió con tanta rapidez que casi se ahoga en un par de veces, el cubre bocas se le había quedado marcado en la cara por los meses que lo uso y sin el de por medio de vez en cuando le gruñía a Tanjiro. Casi parecía esperar un momento para saltarle a la yugular. Las hermanas de Shinobu aparecieron en la puerta con un palo cada una y se acercaron a Senjuro con un aura de satisfacción.

― ¡Listo! ¡Lo hemos disciplinado!

― ¡Ya pago por sus malas bromas!

― ¡Dejo de moverse después de un rato!

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