Besos olvidados [ Muichirou & Kotetsu ]

XX

Capitulo más largo que el resto porque llegamos al momento en dónde todo acabará.
Disfruten.

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Se ha descubierto que Nezuko puede dominar el sol.

La luna superior cuatro fue vencida seguidamente de Gyokko gracias a los cazadores que dieron todo de sí para lograrlo y Shinobu llevó a la demonio consigo en busca de revisar su sangre junto a los otros cazadores quienes necesitaban tratar sus heridas de inmediato. Genya y Tanjiro son los que más heridos salieron de la batalla pero podrán recuperarse.

El sol se encuentra saliendo lenta y ansiadamente logrando iluminar cada rincón de toda la villa para así de demostrar lo hermoso que estaba siendo el amanecer. Dos lunas habían sido derrotadas ese día y la esperanza de poder vencer consigo al rey demonio había aumentado. Sería de gran noticia para todos los pilares saber que quizá, sólo quizá, esta vez podrían ser ellos los que erradiquen la maldad para siempre.

Muichirou no ha despertado.

Hay sangre saliendo de su boca y todo su cuerpo está envenenado al punto de no poder reaccionar, Haganezuka se encuentra cargándolo en su espalda mientras avanza en medio del bosque en busca de alguien que lo pueda ayudar. Kotetsu grita para que traigan refuerzos, Ginko ya está en camino de avisar a los kakushis para que salven a su amo.

Aquella mañana tan espléndida que parecía recién empezar se cubre de nubes en tan sólo minutos y llueve. El día llora de alegría y de dolor por la perdida y logros que obtiene.

En cuanto Muichirou es atendido junto a los otros heridos informan que estará inconsciente varios días más por lo que Haganezuka, junto a otros herreros, no busca el esperarlo y entierra el cuerpo de Kanamori en una parte de la villa que era especial para ello. No dice nada, no quiere explicar nada..., sólo recibe el consuelo de Kotetsu quién está junto a él abrazándolo mientras llora. Se arrepiente tanto de haber dejado que eso pasará delante suyo que no puede evitar el herirse con sus propias manos. Tal vez si habría reaccionado a tiempo sabiendo que era su única oportunidad lo hubiera intentado, ese recuerdo jamás saldría de su mente. Kanamori fue quién se interpuso en el ataque que Muichirou había dirigido hacia él colocándose delante suyo. Pudo ver el miedo que tenía en sus ojos cuando cayó totalmente cortado en sus brazos, lo único que pudo escuchar es: Perdón.

No es tu culpa...

No hagas nada de lo que puedas arrepentirte...

Había perdido demasiada sangre con el corte profundo que tuvo en su cuello y eso fue lo que hizo su muerte lenta y dolorosa. Uno de sus brazos y una de sus piernas habían sido totalmente separadas de su cuerpo. Haganezuka no supo que hacer en ese momento pero no debía perder el control ahora, al menos no con Muichirou hasta recibir una explicación del porqué hizo eso.

—Gracias por no haberlo matado... —Susurra Kotetsu entre sollozos. Habían pasado demasiadas horas estando juntos que ahora ya se encontraban sólos —Tuve miedo de que lo hicieras.

—Sé que él no lo hubiera deseado así.

—Lo sé, por eso no quiero que tus manos se ensucien con una muerte innecesaria, Muichirou pagará, dejemos que el tiempo se encargue de eso si él realmente fue el culpable ¿Sí?

—Esperaré —Dice observándolo —Recuerda que no lo salvé porque quise, debes cumplir con lo que me dijiste.

—Lo haré, no se preocupe —sonríe algo forzado— Estoy dispuesto a darle eso.

—Despues podrás hacer lo que quieras.