Capítulo 41

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Sam

Mon insistió en venir conmigo pero ambas sabíamos que eso no era posible. Con la gira y los conciertos próximos era obvio que ella no podría acompañarme aunque quisiera.

Cuando entro al hospital lo primero que hago es preguntar por mi mamá, esperando que puedan decirme en qué habitación se encuentra sin necesidad de pedir algún tipo de identificación o algo por el estilo.

Song me ha dicho que ha sufrido otro de esos ataques que solían darle, mi hermana bastante preocupada y habiendo recibido la orden de informarme lo sucedido sin mucha demora. Una de las secretarias me indica el piso y la habitación a la que la han pasado después de haberla atendido y no tardó mucho en subir.

Llego directo a donde me ha dicho y llamo a la puerta, esperando que mi familia esté dentro y abran. Luego de un par de segundos Song lo hace, sus ojos hinchados de tanto llorar y su expresión preocupada. Mi papá está a un lado de mi mamá quien se encuentra dormida, tomando su mano.

Veo aquellos cables que van desde una máquina y terminan en el cuerpo de mi mamá, tiene aquella mascarilla de oxígeno y la sensación que se apodera de mí no es para nada buena. Mi hermana menor me hace pasar, quiero acercarme a la camilla pero Richie intercepta mi camino, aventando mi cuerpo ligeramente para atrás.

- Esto es tu culpa, sabías que ella no aceptaría a tu noviecita y aun así la llevaste a casa, ¿Qué demonios pretendías? ¡¿Matarla?! - Acusa mi hermano pero no le estoy haciendo ni el más mínimo caso.

Lo esquivo sin darle mayor importancia, mi vista fija en mi mamá y mi cabeza llena de todos esos pensamientos iguales a los que tiene Richie respecto a esto. Miro a mi papá, siento como mis ojos se comienzan a humedecer y mi corazón late con fuerza, estoy tan nerviosa y asustada que ni siquiera sé qué debo hacer.

- Lo siento, yo... Joder, lo siento muchísimo. - Digo dirigiendo mi voz a mi papá quien niega con la cabeza y me atrae a su cuerpo en un abrazo.

- No es culpa tuya, princesa, yo había hablado con ella y estaba entrando en razón. - Me anima mi papá, pasando sus manos por mi espalda, intentando tranquilizar mi estado y dejando un beso en mi mejilla. - He hablado con el doctor, me ha dicho que dejó de tomar el medicamento, cariño, esto no es tu culpa. - Susurra.

- Lo es, si yo no hubiese ido con Mon, si yo... - Comienzo a decir pero él me detiene.

- No es tu culpa. - Asegura. - Su corazón está fallando de nuevo, Sam, esto es inevitable. - Cuenta él mientras me alejo para acercarme hasta mi mamá.

- ¿Ella va a estar bien? - Cuestiono, mi voz quebrándose y mis mejillas mojadas por las lágrimas, Song me mira desde su lugar pero no es capaz de responder. Richie, por su parte, simplemente agacha su cabeza, sin más.

- Nosotros no... No lo sabemos, el doctor me ha dicho que lo estará pero no aseguró nada. - Me responde mi papá, poniéndose de pie. Tomo la mano derecha de mi mamá entre las mías y las lágrimas son más fuertes que yo.

Ella no puede irse, no puede dejarme de esta manera. La necesito.

                               [•••]

Richie me pasa uno de los cafés que trae, este es el cuarto que bebo desde que he llegado, hace dos horas. Mi chica me ha enviado alrededor de veinte mensajes pero no le he respondido ninguno. Necesito estar tranquila antes de hacerlo y enviar alguna locura como que quiero que terminemos o algo así.

No es nada fácil ver de nuevo a mi mamá en una camilla de hospital, ya hemos pasado por esto hace años y ella había prometido que intentaría estar bien por nosotros.

MI PEQUEÑA ESTRELLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora