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-¿Disculpe? ¿Señor de que tienda habla? - Any visiblemente molesta preguntó al hombre.

-Disculpe señorita, hablo con mi amada Mi-Sul, su opinión es irrelevante. La educación de esos tres niños es responsabilidad de sus padres, y mi Yoongi no entregará pan como un vulgar repartidor. - el hombre respondió

-Y tu quien eres para hablarles a ellas de esa manera - El mismísimo Yoongi en persona quien escucho la manera de hablarle a su Any... dijo de manera despectiva al hombre.

-Hijo - ese hombre arrogante caminó hasta el pálido chico con sus brazos abiertos.

-Madre, llevaré a mi novia a su negocio y vuelvo por ti, deshagase de la basura mientras - ignoró por completo al hombre, tomó a Any de la mano y la sacó de ahí.

-Yoongi espera - Any trató de detenerlo pero fue imposible - Yoongi alto.

Al fin lo detuvo y ahora no supo que decir. En silencio acarició su enojado rostro, sin una sola palabra besó cada centímetro de su cara en plena calle.

-Any, - le dijo el pálido chico sintiendo la cálida persona que tenía enfrente - ¿sabes quien es ese hombre?

-No, y esta bien si no me quieres decir para mi no es im.......

-Quiero que sepas todo de mi Any, si quieres ser la esposa de Min Yoongi, debes saberlo todo. - Con su cara decaída dijo a la mujer que lo acompañaba.

-Yoongi, ¿Me estas proponiendo algo? - emocionada preguntó.

-Solo contigo quiero hacerlo todo, me has dado una vida nueva, reviviste en mi las ganas de pensar en mi, has despertado el yo qué sabe amar, y eso es justo lo que quiero hacer. Y para eso debes saber... - Yoongi hizo una pequeña pausa, habían llegado a la cafetería aun sin abrir.

Así que Any se dio prisa en abrir, entraron, corrió las cortinas no sin antes hechar un vistazo al restaurante de Jungkook, vio la gente igual que el día anterior. Y al igual que el día anterior, vio entrar al rubio hermano menor del hombre que se desmoronaba en el café.

-El, - dijo apenas ella llegó a su lado - Es el padre de Jimin y Jin,  yo recuerdo cuando mis padres murieron, el prometió a mi padre, qué fue su amigo de la niñez qué me trataría como a un hijo. Cosa que no cumplió.

Siempre hizo diferencias entre Jin y yo y las hacía entre Jin y Jimin, su favorito siempre fue ese pequeño rubio. ¿Por qué? El mismo nos lo dijo el día que se fue, llevándose a ese pequeño niño de no más de cinco años.

Ese día llegó tan ebrio, qué busco a mi madre y no la encontró, ella comenzaba a hacerse de clientes, horneaba panes y pasteles y los llevaba a los domicilios, cuando el llegó, eso estaba haciendo.

El no entendía razones si estaba en ese estado, así que ordenó a Jin qué fuera a buscarla, el le respondió que no iría, qué ella lo había dejado cuidando de nosotros, o sea Jimin y yo. El le dijo que para cuidar a su hijo estaba el y que el raro o sea yo... Podía cuidarme solo. En ese instante perdí todo el amor y respeto que pude tenerle por tantos años de convivencia.

Jin le dijo que no iría, qué debía obedecer a su madre, y la orden fue cuidar de sus hermanos.

El se enfureció, estabamos los dos de pie frente a él y me lanzó tan fuerte, qué fui a caer de lleno a una pared cercana. Jin se molestó tanto que le dio un aventon qué lo hizo casi perder el equilibrio y caer. Jin corrió a ayudarme a levantar, pero no logró llegar, el lo tomó del cabello y comenzó a golpear su cara.

No podía moverme aun, quería correr y golpearle la cara igual como lo hacía con mi hermano, pero luego sucedió algo insólito, un pequeño que creíamos estaba dormido, salió hasta el patio donde estaba sucediendo todo esto.

EL AMOR SOÑADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora