Capítulo XXV.

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Narra omnipresente:

—¡Gracias por estar aqui!— nuestra protagonista estaba muy feliz.

Estaba levantado a su chico en el aire con un brazo rodeando la cintura de él y el otro por sus piernas.

Ella empezó a dar besos por el rostro y cuello del chico mientras que el solo reía.

—¿El es tu novio Nee-san?— se escucho a una de las niñas.

La peli-blanca asintió con una sonrisa.

—Adios niños.— la alfa bajo al omega y lo tomo de la mano para empezar a irse.

—¡Adiós Aniki, adios Kanao-chin, adiós amigos de Aniki, adios esposo de Aniki!— se despidieron los niños.

Los adolescentes solo rieron un poco.

—¿Por que estás sonrojado cariño?.—

El chico oculto su rostro con una de sus manos.

—M-me dijeron tú esposo...— el chico se había ilusionado con eso.

—Es obvio- — fue interrumpida.

—[t/n], ignoraste a Senjuro-kun.— la regaño Aoi.

La más alta se confundió, no había notado a un tal Senjuro.

—H-hola...— saludo el más pequeño.

Ella abrió los ojos al verlo.

—¡Si que eres igual a Rengoku-san!— la chica queria reír por el parecido.

—Y tu a Uzui-san...—

—Me agrada este chico.— atrajo al chico hacia ella y rodeo sus hombros con uno de sus brazos, el otro rodeaba la cintura de su omega.

El grupo de cinco fueron a una de las aguas mixtas.

Claro que cada uno con unas toallas cubriendo un poco sus cuerpos, Aoi y Kanao con la parte de arriba de unos trajes de baños.

—Puedes cubrirte un poco más [t/n].— Aoi dijo viendo hacia otro lado.

Ella tenía una pequeña toalla alrededor de su cuello que hacia la acción de cubrir sus pechos.

— Deja de preocuparte tanto Aoi, relájate un poco.— la alfa se relajó con la cálida agua.

—Lo digo por Senjuro-kun.—

—Como si nunca a visto a otro alfa.—

Lo dicho por la más alta confundió a Genya y a Aoi.

—¿Acaso no saben que el es un alfa?— la chica alzó la ceja mirándolos.

—¡¿Eres un alfa?!— los omegas a excepción de Kanao se sorprendieron.

El más joven asintió apenado porque no lo hallan identificado correctamente.

—Pense que eras un omega...— Genya lo miraba de arriba a abajo sin creerlo aún.

—Mis feromonas no son muy notorias y eso hace con que me confundan con un omega...— se rascó la nuca con pena.— Me imagino que lo mismo pasa contigo Genya-san...

El omega más alto se confundió de nuevo.

—Se que eres un omega por tu olor...— el más joven lo miro a los ojos.

De un momento a otro recibió un golpe en la cabeza no tan fuerte.

—¿Quie te dijo que podías oler a mi omega?— le dijo autoritariamente la alfa al alfa menor.

—L-lo siento, fue sin querer [t/n]-san...— el chico se disculpó varios veces haciendo que la alfa dejé pasar esta situación solo por ahora.

Después de unos minutos decidieron salir ya que tenían mucho tiempo ahí.

Hermoso Omega. ∆_Genya × Tu_∆(TERMINADA).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora