🌘 Capitulo IV🌒

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|6 de Mayo de 1862|

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|6 de Mayo de 1862|

Siendo el décimo séptimo cumpleaños de la señorita Black su Madre quería celebrarlo pero con el estado de su esposo prefirió darle más atención a sus cuidados. Si esto mismo hubiese ocurrido antes Lillian se estaría entristeciendo en su habitación pero desde hace un mes su fuente de felicidad ya no estaba relacionado con lo que ocurriera en esa casa.
En la mañana sin expectativa alguna se había dirigido al comedor para desayunar como normalmente lo hacía, Julia tenía la costumbre de hacerle en todo el día sus platillos favoritos como regalo, la jovencita siempre le agradecía por sus esfuerzos.
Ese año en particular no esperaba que su Padre bajara por su enfermedad pero sorprendentemente la figura de un hombre buen mozo y con una sonrisa apenas asomándose en su rostro la recibía en la mesa.

George:- Hija mía, felicidades...- Extiende sus brazos en busca de contacto.- Ya te haz convertido en toda una dama.
Lillian:- Muchas gracias Padre, no debió bajar tiene que cuidar su salud.- La abrazo después de tanto tiempo de no hacerlo.
Caroline:- Eso mismo le he dicho pero no hay persona más terca que él...- La pesada risa del hombre le traía recuerdos muy nostálgicos.- Felicidades hija, pronto tendrás edad para formar tu propia familia y disfrutar las maravillas de la vida.- Eso último lo decía con cierto tono de tristeza.
George:- Querida, no es momento de pensar en eso, mí linda flor debe encontrar a un buen partido antes.

Los ojos de la joven querían traicionarla al dejar escapar una lágrima ante aquel apodo, hacía años que no lo escuchaba llamarla asi.
Todo esto estaba resultando algo extraño y buscando respuestas observó la mirada triste de la mujer, al parecer la repentina mejoría de su Padre solo eran las últimas fuerzas que su cuerpo tenía.
Luego del momento más extraño pero lindo lo dejaron descansar, más tarde aprovechando que le entregaba una carta de sus hermanos la señora Black se sentó a platicar con su hija, le dio la noticia de que viajará en busca de un doctor para que pueda ayudarla a extender la estadía de su esposo. Aún en negación de que no había nada más por hacer con el hombre.

Lillian...

Este dia solo me estaba trayendo muchas emociones que me resultaba difícil de controlar.
En el transcurso de un mes los poderes estaban cobrando cada vez más fuerzas y en poco tiempo era capaz de dominar la mayoría de las cosas, el único problema es que se podía desestabilizar con emociones fuertes como fue aquel día en que Jasper confesó que me buscaba por las tardes en el mismo lugar en que nos vimos por primera vez.
Esa noche mí Madre tuvo que despertarme y pedirme que ponga una barrera en mí habitación porque al parecer estaba soñando con él haciendo que las luces de la residencia se vieran afectadas asustando un poco a mí Padre y a Julia.
Desde entonces he tomado precauciones aún más cuando volvía a casa después de haber pasado la tarde con mi querido Mayor Whitlock. No podía describir lo que ambos teníamos pero de lo que estábamos seguros era que no podíamos dejar de vernos.
Compartíamos el tiempo hablando de nuestros conocimientos, historias e ideales. Los dos soñábamos con vivir en un lugar alejado del conflicto pero él amaba su trabajo y por mí lado quería que esa guerra llegara a su fin.

Antíguo Amor || Jasper Hale Donde viven las historias. Descúbrelo ahora