Be Yours ❥Rubegetta Omegaverse❥

❥Chaos

En el horario de almuerzo, Ruben encontró al omega hablando relajadamente con el nuevo jardinero. El anciano aunque exeptico al giro de las circunstancias en la vida de ambos, decidío ver todo positivamente. Este le contó al azabache que todos los esclavos estaban en las barracas y que estas eran más parecidas a pequeñas cabañas adosadas, que a unas sucias barracas comunes.
Samuel se relajó enormemente al saber esto. No comprendía como alguien podía salvar a tantos esclavos y matar a otros sin piedad. Sin embargo, en el fondo estaba agradecido. Ruben no parecía ser un amo déspota y explotador. Al contrario parecía ser apreciado entre su servidumbre.

Samuel  suspiró. Solo podía esperar y observar que pasaría. Pensó en ir a disculparse con el alfa, pero un sirviente llegó a avisarle que el almuerzo estaba listo y el Lord y el pequeño amo le esperaban en el comedor. Samuel  tragó saliva y levantó el mentón.

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-Lo siento-con el pequeño cachorro en brazos, Samuel  pidió disculpas por su inapropiada reacción en el estudio del alfa.

-No te preocupes, omega . Solo te pido que cuando tengas dudas sobre algo, hables conmigo antes de sacar conclusiones apresuradas.

-Lo haré, alfa-prometió.

Samuel siguió comiendo, mientras deslizaba pequeños bocados a Iván en sus brazos, quien alternaba entre su pecho y trozos de carne y verduras. El omega inconsciente de el efecto de sus palabras en el Lord, se contentaba con ver al pequeño cachorro comer.

Ruben pauso su tenedor en el aire y se sonrojó al darse cuenta de algo. Samuel  lo había llamado alfa. Tuvo que suprimir sus emociones para evitar que su aroma delatara su estado. A parte de estar encantado con el caracter del hermoso omega, su cuerpo parecía reaccionar a su cercanía. Afortunadamente la servilleta en su regazo cubría toda evidencia de su interés.

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Horas después, cenaban juntos a la luz de las lámparas. El pequeño Iván, se había quedado dormido después de unos bocados y roncaba tranquilo en el regazo de Samuel. El omega mientras, terminaba los últimos bocados de su comida.
Ruben tomaba un sorbo de vino cuando Mangel le interrumpió para informarle de algo. Al escucharlo, Lord Doblas se levantó de inmediato para susurrar en el oído del omega.

-Por favor lleva a Iván a su habitación-le pidió-Quédate ahí y no salgas sin importar lo que escuches.

Los ojos de Samuel se abrieron de par en par. Pero pronto asintió y se levantó con el pequeño en sus brazos para retirarse por la puerta rápidamente. Luego se encerró en la habitación de Iván, esperando hasta que el mismo Ruben llegara a buscarlos.

Mientras el pequeño dormía placidamente en su cama, Samuel  caminaba en círculos. Trataba de gastar toda la energia nerviosa que recorría su cuerpo. Minutos después escuchó a dos personas corriendo en el pasillo. Alguien chocó contra la puerta estrepitosamente. Samuel  retrocedió dos pasos y miró a Iván dormir.
Corrió a la cómoda donde buscó algo que pudiera usar como arma. Afortunadamente había un abrecartas. Era delicado y suntuoso con el escudo de los Doblas y tal vez debió pertenecer a una mujer por su delicado diseño.
La improvisada arma temblaba en su mano, pero la mirada de furia en sus ojos denotaba lo preparado que estaba para defender al pequeño cachorro de cualquier peligro.
Escuchó un golpe sordo y sonidos de lucha. Su cuerpo se tensó al pensar que alguien podría entrar por la fuerza. Se escuchó un quejido de dolor y luego hubo silencio... Mucho silencio...
Los minutos pasaron.
Samuel  estaba sentado en la cama. Sus manos temblaban sosteniendo aún el abrecartas, cuando alguien tocó levemente a la puerta y entró.
Era Mangel.

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Solo unos minutos antes Guillermo sonreía malévolo. Detrás de él habían dos guardaespaldas, estoicos ante el intercambio que tenia su amo con Lord Doblas.

-Querido amigo. Disculpa por mi inesperada visita. Pero es que sentí mucha curiosidad por ver como te va con tu nueva "adquisición". Mucho más despues de ver lo que tiene para ofrecer. Estoy seguro que podemos llegar a un acuerdo entre caballeros?

En ésta ocasión Ruben no pudo ocultar su molestia ante el descortés comentario del otro alfa y entrecerró los ojos a causa de la ira.

-Me temo que no es buen momento. Además no creo prudente que parte de mi propiedad tenga que ser juzgada por los ojos de otro alfa, siendo que yo soy su dueño. Así que le pido que se retire, Lord Díaz. Mangel, acompaña a los caballeros afuera.

Guillermo frunció el ceño, pero luego respondió con una sonrisa burlona. Al menos no continuó hablando para alegría de Ruben. Solo hizo media reverencia y dió media vuelta acompañado por sus guardaespaldas.
Ruben iba detrás ellos.

Guillermo miró de reojo a uno de sus hombres. Le hizo un guiño.
De repente y violentamente un sujeto tomó por el cuello a Mangel y el otro se abalanzó hacia Ruben.
Todo pasó muy rápidamente. En unos segundos un guardaespaldas intercambiaba puñetazos con Mangel entre gruñidos salvajes. El otro hombre quiso hacer que Ruben perdiera el equilibrio pateando una de sus piernas, pero el alfa fue más rápido y prácticamente se lanzó hacia su cuello. Con ambas manos en el cuello del hombre, con un rápido y fuerte movimiento de sus poderosos antebrazos, Ruben desnucó al bastardo. El hombre cayó inerte al suelo sin poder lastimar al Lord.
Sin embargo, Mangel estaba en iguales condiciones que su oponente. Aún seguían dando vueltas en el suelo del recibidor y Guillermo no estaba por ninguna parte...

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Se viene el caos... |*ºωº)