Entre La Espada Y La Pared // Chaelisa & Jenlisa

Error

Jennie

Ni siquiera sabía porque estaba haciendo esto, el corazón me dolía y me sentía una estúpida por haber creído que alguien como Lisa podía enamorarse de mi, aunque sus acciones a veces me hacían creer que podría amarme pero lamentablemente no es así.

Kai realmente me llevó a mi casa, pues el no sabía que ésta semana había estado viviendo con Lisa así que me dejó en la puerta y bueno no quería estar sola y debía agradecerle al menos que me trajo a casa.

- Quieres pasar un rato? - le pregunté a Kai.

Él de inmediato aceptó así que busqué las llaves en mi bolsa qué por suerte las tenia y entramos. Encendí las luces y lo invité a sentarse en el sofá mientras iba en busca de unas bebidas.

Al poco rato regresé con una botella de whisky, dos vasos y algo de hielo.

- Woow Jennie y esto? - pregunto Kai algo emocionado.

- Pues es una botella de whisky, no ves? - dije sarcásticamente - Idiota - dije en un susurro qué no logró escuchar él.

Kai hizo una pequeña mueca acompañada de una risa y no dijo nada más, sólo se quedó en su lugar mientras dejaba las cosas en la mesa de centro, el tomó la botella para abrirla y así servir dos tragos.

- Brindemos! - Dijo Kai dándome uno de los vasos ya con el licor.

- Por qué brindaríamos? Sólo quiero relajarme - dije un poco irritada.

- Brindemos porque al fin abriste los ojos con Manoban, ella no te merece Jennie - su estúpida sonrisa era molesta.

- Y tú qué sabes? - lo miré de reojo - tú tampoco eres un santo que digamos.

- No, pero al menos yo no te eh mentido - tomó de su trago.

Yo simplemente ignoré sus palabras y bebí de mi vaso, él hablaba y hablada cosas que ni siquiera le pregunté, no estaba poniéndole atención pues en mi cabeza sólo estaba Lisa y el por qué había dejado irme así como así.

- Kai.. Tú conoces a Rosé? - pregunté interrumpiendo su aburrida plática.

- Si, es una gran chica - contestó él

lo qué me faltaba, qué éste idiota pensara lo mismo que todos. A caso ella es perfecta? Qué tiene ese chica que a todos les fascina?.

- Si, eh oído eso de Lisa también, creo que la quiere bastante - dije con desánimo.

- No sólo la quiere, Lisa está enamorada de ella, siempre lo ha estado desde que se conocen todos lo sabíamos, ella ni trataba de negarlo, siempre se lo hacía saber y se lo demostraba constantemente - decía Kai como algo muy normal.

- Y qué pasó después? - quería saberlo todo pues Lisa me había contado que antes eran amigos entonces el puede tener información.

- Pues Rosé también está enamorada de ella pero su relación era complicada, Lisa en varias ocasiones le pedía que fuera su novia pero ella nunca aceptó hasta donde sabía - se alzó de hombros.

Esas palabras me dolieron como el infierno, así que Lisa si podía enamorarse y tenía que hacerlo de su amiga, mis sospechas eran ciertas incluso con ella si quería un noviazgo, cosa que conmigo no podía hacer, por eso se aferraba tanto a ella a lo que la hiciera feliz incluso aunque no estuviera aquí, qué estúpida fui al creer que Lisa podría amarme a mi.

Sin darme cuenta mis lagrimas ya caían por mis mejillas y Kai lo notó pero el idiota siguió hablando.

- Jennie, Lisa nunca te va a amar, no mientras aún exista Rosé - dijo acercándose a mi.