Todos Ocultamos Algo

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- Cuando ya no me veas porque llegue la hora de la ausencia, cuando tu quedes lejos y mis ojos no estén en tu presencia, reclamaré angustiosamente los momentos que a tu lado fueron glorias y alegría, y en mis tardes de gris melancolía sabre pronunciar solo tu nombre para hacer menos amarga mi agonía.

Cuando llegue la hora de la angustia y quede el corazón vacío y triste se tronaran mis sonrisas en enojos, una lagrima furtiva invadirá mis ojos y evocando tu recuerdo gritaré...

" ¿Amor mio por qué te fuiste si tu sabias que te amaba tanto?"

- Ahora búscame dentro de otra boca y otro cuerpo, deja de horrorizarte arrastrando mi aliento, búscame dentro de otra herida, otro sexo para que tu arrepentimiento deje de clavarse en tus huesos, la culpa y el riesgo haciendo de un rezo un irónico verso que descalifiquen mentiras escasas mientras vas buscándome -


Caminaba adormecida entre ese hueco frío y gris, le daba serenidad al humo triste y ese dolor al ver el sol, sombrío, estaba en este hechizo sin razón, sin mi sangre y sin el ser


La vi volar entre la niebla adormecida, se derramaba entre mis manos y en un jamás ya no tocarnos con su mágica dulzura.

- Rosie... Por qué no puedo estar aquí contigo? -

- Somos tan frágiles e intensos qué la luz podría lastimar la suavidad que corre la distancia, queriendo resucitar una foto del más allá Lisa, de aquí hasta dónde estés irá mi aroma al aire que tú respiras.

- Voy a guardarte en mil estrellas mientras lluevan cometas en cielo, serán gotas de misterio.

- En la constelación de Venus dejaré un destello interminable qué sientas a lo lejos.

- Te Amo Rosé -


*


Me desperté con dolor de cabeza, sentía mis párpados tan pesados que me causaba dificultad poder abrirlos totalmente, la noche de ayer la había pasado llorando en mi cama como de costumbre, recordando todo lo que me fue arrebatado, mis amigos, la mujer a quien amaba, un hijo con ella, mi felicidad entera se me había despojado y como cada mañana me quedé en silencio mirando al techo, preguntándome que esperaba para ir detrás de ellos, ya no había nada que pudiera querer, no había nada por que luchar y los sueños con ella cada vez se hacían más escasos desde que ocurrió, odiaba que incluso en mis sueños siempre tratara de despedirse, por qué no podía simplemente dejar que me quedara con ella? Por qué siempre me hacia despertar?


Por su supuesto que eventualmente me especialicé en noches suicidas justo el dia en que la perdí, pero tampoco quería perderme a mi misma, Rosé no lo habría querido así incluso Jungkook parecía siempre aparecer en mis sueños diciendo alguna estupidez como siempre para hacerme entender que estaba mal y que en definitiva no me querían con ellos, no aún, era aterrador por otro lado y lo odiaba por eso.


Nunca supe cómo, cuando o por dónde empezar después de aquel día, me perdí, me había perdido tanto que era difícil hayar un camino y me refiero a que todo se fue, mis ganas de hacer música murieron, no tenía sentido seguir con eso si la razón por la cuál lo hacía ya no estaba, la motocicleta empolvada y con el tanque vacío ahora era un adorno en la cochera, la cochera donde solíamos practicar ahora solo era como una especie de sótano qué jamás era abierto, yo misma incluso me desvanecí, sin embargo había algo que seguía latente y si, me refiero a las tardes de café.


Todos los días iba a la cafetería a esperar mientras bebía un chocolate, miraba hacia las escaleras pensando que en cualquier momento entraría por ahí mi pequeña Rosita, con su encantador aspecto, una trenza de lado cayendo por su hombro, con su mochila vacía y un estuche de guitarra colgando de su otro hombro con su sonrisa de dientes perfectos cubriendola con su palma de forma tímida para sentarse frente a mi y contarme su aburrido pero muy interesante día.


Entre La Espada Y La Pared // Chaelisa & Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora