10 - JAULA

163 32 2
                                    

La punzada constante que siento en el pecho desde que la perdí de vista es algo que nunca antes había sentido por lo que no tendría como definirla o describirla, pero sé que en cuanto esa maldita este cerca desaparecerá.

Camino junto a Kozlov en completo silencio rodeados y camuflados por la oscuridad de la noche hasta que llegamos a un lugar que me hace abrir los ojos como platos al reconocerlo como una base nuclear abandonada.

- La radiación es mínima – el ruso parece leerme la mente cuando atravesamos la cerca – las mafias tienen alrededor del mundo sitios como este ya que los gobiernos no se imaginan que alguien pueda estar por mucho tiempo en lugares como este. – explica sin volverse a verme en lo que nos adentramos en un oscuro pasillo.

No se por cuando tiempo caminamos hasta que el silencio se rompe por el estridente sonido de gritos que solo aumentan la punzada en mi pecho volviéndola casi dolorosa.

¿Qué me está sucediendo?

Paso saliva cuando llegamos al centro del lugar donde se encuentra la jaula en la que en este momento se encuentran dos hombres peleando. Caminamos por el costado observando nuestro entorno.

- A tu derecha – me indica el ruso haciendo que me vuelva en esa dirección y la imagen con la que me encuentro me deja sin aliento.

Ella está entrando al lugar acompañada de los hermanos Kratos, toda la atención de los presentes se centra en ella que se ve completamente diferente, su hermoso cabello cobrizo paso a ser de color negro azabache, los ojos grises que tanto me fascinan quien sabe dónde ya que en este momento posee unos imponentes y profundos ojos negros.

- ¿es siniestro? – pregunta un hombre perplejo en lo que ella se quita la cazadora

- Esto se pone cada vez mejor – grita alguien aumentando la euforia de la multitud – esta noche siniestro... – la señala mientras que ella levanta el mentón con arrogancia – nos honra con su presencia.

- Pobre del infeliz que se atreva a ir por ella – habla alguien junto a nosotros mientras que mis ojos no se apartan de ella.

Esa maldita levanta la mirada encontrándose con la mía haciendo que mi mundo entero se detenga un instante al ver en sus ojos un brillo sombrío y sádico que le dan un aura oscura y siniestra. Me sonríe con malicia antes de guiñarme un ojo volviendo su atención a los hermanos Kratos que le hablan mientras uno de ellos le entrega unas vendas con las que se protege las manos.

- ¿Cuántos hombres entraran en esa jaula? – pregunto sintiendo autentico terror cuando empiezan a entrar a la jaula.

- Con ella son veinte – responde el ruso en lo que noto como Circe hace un gesto que parece desapercibido, pero el que el hombre junto hable me hace saber que fue una señal. – quiere que nos acerquemos.

Asiento con la cabeza empezando avanzar hasta estar más cerca de la jaula mientras veo como el dinero pasa de mano en mano aumentando las apuestas que hay sobre quien será el ganador de esta masacre. Mi inquietud aumenta cuando veo como ella se vuelve a verme sonriéndome antes de entrar a la jaula siendo la última antes de que cierren la puerta.

- el último en pie ganara no solo cuatro millones de euros... – lo escucho mientras la observo echar atrás su trenza mientras que por primera vez en mi vida conozco el significado real del miedo.

- Nadie sale vivo ¿verdad? – pregunto al ruso junto a mi sin apartar mis ojos de ella en lo que el organizador habla del premio que se llevara a quien representa el ganador.

- Solo el ganador – responde haciendo que se me contraiga el paso del aire cuando un disparo suena – no la pierdas de vista.

Como demonios voy hacerlo si mis ojos se niegan a abandonarla.

ANAM CARADonde viven las historias. Descúbrelo ahora