one ѕнoт y eѕcenarιoѕ anιмe

ᵗᵒᵈᵒʳᵒᵏⁱ (ᵇⁿʰᵃ)

Recuerdo cuando nos conocimos, eramos apenas unos niños. En poco tiempo nos convertimos en los mejores amigos. Crecimos, jugamos, reimos y lloramos, pero todo eso no importaba, porque estabamos juntos.

También recuerdo aquel día, en el que desapareciste de mi vida, como por arte de magia. Ya no había un nosotros, solo un tú y yo, pero separados.

-Adiós.- susurraron tus pequeños labios. Mis lágrimas acompañaron las tuyas. Me abrazaste, te abracé y esa fue la última vez que sentí tu calor.

-¿por qué? - fue lo único que pude decir, pero no hubo una respuesta verbal, solo lágrimas.

Han pasado ya 7 años desde que te ví, 7 años en los que esperé volver a encontrarte, 7 años en los que mi esperanza fue disminuyendo.

(...)

Sonó la alarma, me levanté. No quería hacerlo, pero no podía llegar tarde en mi primer día en la U.A.
Me bañé, desayuné y vestí, estaba lista para salir.

-olvidas tu mochila-
- gracias abuela.- me despedí de ella.

Me puse mis audífonos y comenzé a escuchar música, algo me ayudaba a calmar la ansiedad que sentía por ser la nueva.

Me he cambiado muchas veces de colegio, así que se supone que debería estar "acostumbrada" a ser la nueva, pero no. Nunca logro encajar bien y es agotador.

Cada paso que daba era más difícil que el anterior, todo se resumía en 2 palabras ansiedad social.
Llegar a mitad de año no ayudaba, ser la nueva siempre fue dificil, como ya mencioné.

Entre tantos pensamientos, no me di cuenta que había llegado a la entrada de la U.A. Me congelé, no sabía dónde tenía que ir... así que opté por esperar.

- ¿Primer día? -
Escuché una voz a mis espaldas. Asentí.
- ¿A qué salón vas? Tal vez te pueda ayudar.
- al de la clase 1 A.-
- ese es el mismo que el mío, sígueme.- dijo el peliverde.

Entablamos una pequeña conversación muy casual. Entramos a la sala y, cada uno se fue a sentar.

Minutos después, el timbre sonó, los alumnos se sentaron y el profesor llegó.

- Buenos días a todos. Tienen una compañera nueva, presentate por favor.- dijo el docente.
- Me llamo __ __.- dije con simpleza y me senté.

Las primeras clases transcurrieron un poco lento, sentía sus miradas en mi, cosa que me perturbó un poco.

Finalmente llegó la hora de almorzar, caminé al comedor, me senté y, minutos después, llego el peliverde con un grupo de personas.

- ¿puedo? - dijo el chico, mirándome. Asentí.

Los acompañantes también tomaron asiento y, comenzaron a presentarse.

- olvidé presentarme antes. Izuku Midoriya.
- Ochako Uraraka. Espero que podamos ser amigas.- dijo sonriente.
- Tenya Lida.- extendió su mano.
- Todoroki Shoto.

Todoroki Shoto

Ese nombre, no salía de mi cabeza. Mi mirada y la suya conectaron. "¿Se acordará de mi?" Es lo que me preguntaba.

- ¿eres tú? -
- Te extrañé.-

Ambos nos abrazamos, fue uno cálido, uno que llevaba 7 años esperando.

- pensé que no volvería a verte.- le dije.
- aquí estoy.- intensificó el abrazo.

(...)

Ya habían pasado unos cuantos meses desde que estaba en la U.A. Tenía un grupito de amigos y, mi relación con Shoto era la mejor, eramos mejores amigos.

Lástima. Él me gustaba, desde pequeños sentía algo, pero nunca me atreví a decirselo.

Estaba guardando mis cuadernos, preparándome para irme a mi hogar. Estabamos sólo él y yo.

- ¿__?
- ¿Si?

El chico se acercó a mi. Me dió un abrazo por atrás, su aroma y calidez comenzaron a hacerse presentes. Luego me susurró en el oido.
- ¿Puedo decirte algo?
- c-claro.- dije inmóvil.

Me gustas __.

Sentí su respiración contra mi, aquella cercanía me ponía nerviosa. Me dí vuelta y, tímidamente, agarré sus mejillas. Me miró, lo miré. Traté de acercar mi rostro al suyo, en puntillas.

- ¿qué haces? - dijo con una risilla al final.

Escondí mi cara en su pecho, avergonzada, mientras me abrazaba.

Me separó de él y, en un movimiento rápido, tomó mi mentón. La distancia entre ambos disminuía cada vez más.

- ¿esto querías hacer? - dijo casi en mis labios.

Me besó. Fue uno corto. El rubor se hizo rápidamente presente en mis mejillas. Los rápidos latidos no se hicieron esperar y le hicieron compañía los nervios que recorrían mi cuerpo.

Gracias por comentar @areyougey