𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 ➳ ʜᴀᴏʙɪɴ

𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋

— Gyuvin parece un cachorro muy agradable ¿hace cuánto que son amiguitos? — preguntó el omega a su cachorro. Hace unos minutos que estaban camino a casa y durante todos estos notó al pequeño algo callado y pensativo, quería saber que pasaba por su cabecita.

— uhm... creo que... desde siempre — respondió — no recuerdo cuando empezamos a hablar, sólo que sé siempre lo hacemos.

Hao miro lo miró con curiosidad ¿acaso no recordaba el incidente de hace unos años?

— papi — Yujin detuvo su andar, captando así la atención de su padre inmediatamente — quiero... y-yo quiero...

— ¿qué sucede, conejito? ¿Te sientes bien? — el chino se agachó a la altura del pequeño y acarició sus mejillitas.

Tomó aire — quiero irme a China contigo y Ollie.

Los ojos del omega se abrieron tanto que cualquiera que lo hubiera visto no pasaría por su cabeza que era chino. Aquello realmente lo había tomado de sorpresa, pensaba que su mellizo menor quería vivir en Corea por obvias razones ¿qué había pasado para que el niño de pronto quiera abandorar su país natal?

— Ollie me enseñó a decir muchas cosas en chino, aprendo rápido papi.

— cachorro, yo... no tenía idea de que tú... — aclaró su garganta y acarició el cabello del pequeño, sonrió, se iría con sus dos pequeños a su hogar, lejos de Hanbin — te prometo que te encantará Shangái, es lugar muy hermoso, harás muchos amiguitos y-

— disculpe — fue interrumpido por la voz de un tercero.

— Buen día — se enderezó — ¿sucede algo?

— escuché su conversación y quisiera saber si usted es chino. — un escalofríos recorrió por todo su cuerpo, no, no podía estar pasando esto justo ahora.

Apretó la mano del pequeño y lo ocultó detrás de él, había olvidado el trato hostil de los coreanos hacía su persona sólo por ser de una nacionalidad diferente, años atrás hubiera aceptado los insultos y luego se iría a su hogar para cantarle a sus bebés mientras trataba de sanar la herida que se abría en su corazón cada que escuchaba esos comentarios hirientes, pero ahora era diferente, tenía a uno de sus bebés consigo que recibiría todos los insultos junto a él, él no iba a permitir que lastimaran a su cachorro, iba a protegerlo.

— ¿es chino ó no? — insistió de nuevo aquel sujeto, ante la presión quiso ignorarlo e irse rápido, pero notó la mirada de su pequeño en él esperando a que respondiera. No podía enseñarle a avergonzarse por su nacionalidad, no cuando este también tenía descendencia china en sus venas.

— s-sí — se maldijo mentalmente por titubear y se dio la vuelta para irse. Aquel alfa tomó su antebrazo para detenerlo haciéndolo alertar — ¡s-suélteme!

— espera, tengo algo que decirte — negó tratando de librarse de su agarre, con su brazo libre pego al pequeño a su cuerpo y cubrió sus orejitas para que no escuchara las próximas palabras del alfa.

— ¡te dijo que lo soltaras!

Volteó al reconocer aquella voz, vio a Sung acercarse con rapidez hacía ellos seguido a Ollie ¿qué hacían acá?

Antes que pudiera decir algo, Hanbin ya se había abalanzado contra ese tipo y empezaba a golpearlo, logrando así por fin librarse del agarre.

Abrazó a sus pequeños y los ocultó en su pecho para que no vieran la violenta escena — ¡Hanbin, basta! — gritó para que parara, las personas empezaban a rodearlos para observar la pelea aún que era más Hanbin golpeando al alfa desconocido ya que este no se defendía en absoluto.