Las primeras dos semanas Lana y Tom mantenían comunicación todos los días sin falta, ya sean mensajes o llamadas, pero siempre estaban en contacto.
A mitad de mes, la rubia cada vez tenía menos tiempo para hablar con él, al igual que el guitarrista, ambos estaban cada vez más ocupados, Lana con sus proyectos artististicos, sumados a que tenía que dirigir la dirección de arte de todo un hotel, además de que ese mismo hotel sería uno de los más importantes de Paris. Lo extrañaba, claro que si, pero le faltaban más horas en el día para dedicarle.
Por otro lado, Tom no pasaba un día sin pensar en ella y en cuánto la extrañaba, en cada bendita entrevista a la que la banda iba siempre le preguntaban por ella, la mayoría de las veces prefería no responder, ya sabían que era su novia, que más necesitaban saber?
Francia 9:46 a.m
– Hola? — dijo la rubia al atender la llamada, ni siquiera vió de quién se trataba.
– Tanto tiempo sin hablar y así me contestas? — frunció el ceño al reconocer aquella voz.
– Como conseguiste mi número? — exclamó enojada mientras caminaba fuera del hotel.
– Al parecer te va bastante bien... Tu hermano te extraña tanto, es una lástima que su propia hermana lo haya abandonado — apretó los puños mientras intentaba no explotar.
– Solo dí que mierda quieres antes de que te cuelgue.
– Solo te quería advertir que esto no quedará así, me encargaré de que no seas feliz, cariño — se quedó inmóvil, la llamada ya había terminado, pero Lana seguía con su teléfono sobre su oreja, pensando en lo que Amelie le acababa de decir, su teléfono sonó nuevamente, contestó al instante.
– No me llames jamás — dijo la artista casi gritanto.
– Wow, ahora que hice? — la rubia pasó su mano por su cara mientras sonreía levemente.
– Nada... Pensaba que eras otra persona — respondió suspirando.
– A quién tengo que golpear? — Lana rió mientras apoyaba la espalda en una de las paredes del hotel.
– Nadie importante... Como estás? — no quería hablar de Amelie, y mucho menos con Tom, sabía lo impulsivo que podría ser, y si le contaba seguramente ya estaría comprando un boleto a Francia, como hace unos meses atrás.
– Extrañandote, como siempre — la menor soltó una carcajada.
– Lamento no llamarte tan seguido — dijo mientras sacaba un cigarrillo de su bolso, para alivianar su estrés.
– No es tu culpa, ambos estamos ocupados, pero tranquila, solo quedan dos semanas más... No veo la hora de tenerte entre mis brazos de nuevo, rubia.
– Tan cursi como siempre, eh? — habló de forma burlona, pudo escuchar una risa desde el otro lado de la línea.
– Solo contigo, boba — respondió con el mismo tono que usó Lana.
– Lana, te necesitamos — dijo una de las trabajadoras del hotel.
– Me tengo que ir, te llamaré luego te amo, amor — dijo rápidamente la rubia mientras cortaba la llamada, caminando hacia dentro del hotel, pisando el cigarrillo que estaba fumando.
Alemania 10:17 a.m
Amor? Primera vez que ella lo llama de esa forma y fue por teléfono?
Bill vió como su hermano sonreía bobamente viendo su teléfono.
– Por qué tan contento? — preguntó éste, asustando al de trenzas.
– Mierda... Nada — respondió mientras guardaba su teléfono, sin borrar aquella sonrisa que adornaba su rostro.
– Seguro es por Lana — exclamó Bill de forma burlona, ganándose un amague por parte de su gemelo.
– Para que preguntas si ya sabes la respuesta? — preguntó algo irritado.
– Salen en 5 minutos — una tercera voz los interrumpió, era una mujer de la producción del programa, Tom suspiró mientras le daba un sorbo a su agua cuando la mujer se fué.
– Oh, ya tienes la canción?... Para, ya sabes — preguntó el menor de los gemelos mientras miraba a su hermano con una sonrisa de oreja a oreja.
– Claro que si, recuerda no decir nada a nadie — Bill hizo un ademán con la mano, simulando que su boca tenía un cierre y que lo estaba cerrando mientras asentía con la cabeza.
(...)
Pasó una semana más, ya solo faltaban siete días para que ambos enamorados se vieran nuevamente.
– No debiste acompañarme Luke — dijo la rubia algo apenada mientras se subía al ascensor con el azabache, éste negó con la cabeza mientras le sonreía.
– Te tardarías más en llevar todo esto sola — habló el ojiazul mientras la miraba.
Ya había pasado más de un mes de que ambos estaban trabajando juntos en la dirección de artistíca del hotel en dónde a Lana le ofrecieron trabajar, y Luke poco a poco se fué enamorando de la rubia, pero ella estaba tan concentrada en su trabajo que ni siquiera se daba cuenta de como él la miraba, el azabache ya sabía que ella tenía novio, y como no? Si casi siempre aparecía en las revistas como la hermosa novia del guitarrista de Tokio Hotel acompañada de fotografías de ambos o solo de ella que los paparazzis tomaban cuando la veían sola por las calles.
– Y... Como va tu relación? Debe ser difícil estar con una figura pública — exclamó Luke mientras el ascensor de abría, ambos empezaron a caminar.
– La verdad es que bastante bien, ahora no hablamos mucho porque ambos estamos ocupados, pero siempre que podemos estamos en contacto — respondió serenamente mientras abría la puerta de su departamento – Puedes dejar las cosas en la mesa del comedor — habló nuevamente Lana mientras dejaba pasar a Luke, éste hizo lo que ella le indicó, miró a su alrededor, la mayoría de los muebles eran de color negro, las paredes blancas y habían varios cuadros, por su puesto.
– Oh, puedo usar el baño antes de irme? — preguntó el ojiazul mientras se volteó a ver a la rubia, ésta asintió mientras miraba su teléfono y le indicaba dónde se encontraba el baño. Luke caminó según las indicaciones de la artista, antes de que pudiera abrir la puerta del baño, ésta se abrió desde el otro lado, dejándo ver a un alto hombre con el cabello suelto y con tan solo una toalla alrededor de la cintura – Mierda! — gritó del susto Luke mientras daba un paso hacia atrás y ponía una de sus manos sobre su pecho.
– Quién mierda eres? Y que mierda haces aquí? — preguntó el contrario mientras se cruzaba de brazos, bajándo levemente su mirada, era al menos dos cabezas más bajo que él.
– Eso mismo debería preguntarte — exclamó el azabache molesto mientras lo miraba de pies a cabeza.
– Luke, estás bien? — una tercera voz interrumpió el pequeño interrogatorio mutuo que ambos hombres estaban teniendo, la mirada de Lana se digió al ojiazul, para luego mirar a – Tom?
– Sorpresa — dijo el anteriormente nombrado con una sonrisa mientras miraba a su novia.
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PERDONEN LA DEMORA
espero hayan disfrutado el cap <3
se va a picar de nuevo ojo
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Sorry, Who are you? - TOM KAULITZ (TERMINADA)
Fanfiction- Y tu eres? - preguntó ella con un leve tono sarcástico, mientras le daba una calada a su cigarrillo; él sonrió de lado. - Ya deberías conocerme, hermosa - Tom acomodó uno de los mechones de Lana detrás de su oreja, acercando su rostro al de ella...