LE SANG DU POUVOIR

*CAPITULO 15*

Antes de que hicieran el anuncio fui a ver a la validé, mi tía Hatice no tenía mucho tiempo de con ella y ahora le contaba su día

-Tía Hatice, quería contarle antes de que le llagaran las noticias-

Alzo la mirada y me incito a sentarme junto a ella, desde que la ayudaba a cuidar a la valide nuestra relación mejora que antes sin duda no era mala, ella me quería por ser su sobrina, pero antes no soportaba a mi madre y de repente se hicieron amigas para pasar a odiarla otra vez

-mi padre me ha nombrado encargada temporal del Harem-

Ella le dio una mirada llena de dolor a su madre y se soltó a llorar otra vez

-él lo sabe, nuestra madre no vivirá-

-estoy seguro que no lo hizo con esa intención, ha habido muchos problemas en el harem y aunque tu deberías ser la siguiente en manejarlo, padre no quiere molestarte-

-lo sé, me he enterado-

-sabes que no quería algo así, respeto mucho como ha manejado el harem la valide y solo espero cumplir con las expectativas-

-está bien Mirihima, cualquier duda que tengas puedes venir a buscarme...de algo ha de servir ver a mi madre dirigirlo por tanto tiempo-

-Gracias Sultana- aun sin ser tan necesario me reverencie ante ella

Hürrem no cabía de la emoción, sumbul había venido a darle la noticia directamente antes de que fuera anunciado al harem

Su hija era la nueva encargada y aunque una parte de ella estaba furiosa por no ser ella la elegida, la otra parte estaba llena de satisfacción

Era una nueva victoria para ella

Sabía que su hija estaba un poco rebelde, pero nada que unos regalos no arreglaran y detrás de escena ella podría controlar el harem, ya se sentía poderosa y airada

Cuando se dio la noticia muchos en el harem estaban felices, todos sabían que a la mujer que más amaba el sultán era a su hija y que sin duda una de las cosas por las que favorecía a la sultana Hürrem es por ser la madre de mirihima

La joven sultana solo hizo una pequeña presentación en el harem y subió a sus aposentos a dormir pues, aunque no quiera demostrarlo estaba muy cansada

Eso sí, mando a repartir jugo y dulces al harem, pero pidió que siguieran orando por la madre sultana

Durmió por gran parte de la tarde y nadie más la molesto hasta que entrada la noche despertó y pidió que su cena fuera llevada con las chicas

Nadie celebraba y ella estaba bien con eso pues no era tiempo, era momento de guardar respeto

Hablo un poco con las chicas y decidió cumplir con la promesa que le tenía a Mehtap y mando a que la prepararan para ir con su padre; al terminar de cenar fue nuevamente hasta el área médica donde su tía ya estaba acostada en un incómodo diván, la toco suavemente y ella despertó

-valla a dormir a unos aposentos tía, ya están preparados para usted-

-no mirihima...yo me debo quedar-

-me quedare toda la noche con la valide-

Y una noche más se quedó cuidando de su abuela, pues, aunque sabía que moriría y esto era necesario para los cambios, ella seguía estando triste, no solo era la valide, era su abuela, la que cuido de ella y sus hermanos cuando era niña...extrañaría mucho a la valide y oraría para que su alma renaciera en un buen lugar

Sabiendo que no se mejoraría le hablo de todo lo que le había pasado en su segunda vida, de sus queridos Evan y Sara, sus amigos, como había cambiado las cosas en el futuro y que ya no sería necesario que entre las mujeres lucharan en un Harem

No despertó, pero en algún punto sintió como apretaban su mano y siguió hablándole hasta que regreso su tía, ni cuenta se había dado de que la mañana llego

Cuando por fin regreso a sus aposentos sus hermanos seguían dormidos, tenía días que no podía hablar con ellos así que ignorando su cansancio pidió el desayuno y los despertó

-Hermana ¡-

Su pequeño Cihangir la abrazo fuertemente a la cintura y sin dudarlo Bayaseto y Selim también la abrazaron, estaban felices por la noticia de su hermana siendo la encargada del harem

Amaban a su madre y realmente la extrañaban, pero ella no era muy buena para ese cargo y la sultana Mahidevran sin duda los odiaba (o eso pensaban)

Estuvo un rato con ellos, compartiendo y dándoles todo el amor y atención que podía, no quería que las historias de su primera vida la siguieran a esta

Cuando finalmente termino, sus hermanos fueron a clases, incluso Cihangir que le enseñaban los caracteres turcos y un poco de la historia de la fundación del pueblo.

Ella estaba cansada, pero tenía muchos deberes por empezar, en cuanto los pidió, le trajeron los libros del tesoro imperial, su abuela lo había manejado bien y aunque según ella había algunos gastos excesivos, no era nada preocupante

Teniendo la libre autorización de su padre, decidió mandar caridad al templo de los eruditos, deseo mandar más dinero, pero aun no podía dar tanto dinero, las reservas estaban bien y debía conservarlas pues la guerra quitara muchos recursos

Designo que se comprara recursos para las cocinas y pidió que se compraran nuevas telas además de las que quedaban y se les hicieran nuevos ropajes a las chicas del harem

Mando a pedir el registro de estudio de sus hermanos, los reviso y quedo satisfecha viendo que eran buenos, tenían pequeñas fallas, en donde tenían debilidades pidió que buscaran maestros especificados

Su madre hacía poco había hecho un gran pedido de joyas que debía cancelar inmediatamente pues se hizo en el periodo de revueltas

Escribió en el pergamino la orden, la sello con su anillo hasta entregarlo a Irfan Aga

-que vayan lo más rápido al mercado y lo entreguen al joyero, no debe hacer los collares y aretes que mando mi madre ni seguir ninguna de los pedidos dados por ella, la sultana mahidevran o incluso la señorita Gulfën-

Durante la cena llame a mis hermanos y me contaron entusiasmados de su día y me encargue de que todos durmiéramos juntos, los quería conmigo el mayor tiempo posible

Eran mis hermanos, los amaba con mi propia vida y todo lo que hacia, mas que ser un reflejo egoísta solo de poder era para que ellos no tuvieran que luchar, que no vieran morir a sus hijos o al que subiera al trono asesinara a los demás.

Era todo o nada.