101. Vida cotidiana en el pueblo

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El viejo señor Pang se enfadó y se marchó agitando sus mangas.

Li Jin naturalmente no sabía nada de esto. Incluso no se dio cuenta de que el señor del condado, debido a su caligrafía vigorosa, quería encontrarle un maestro para enseñarle.

Saber escribir bien es una cosa, pero poder superarse a sí mismo es otra.

El señor del condado no recibió respuesta del viejo señor Pang sobre esta carta, pero no le molestó en absoluto. El señor Pang era conocido por su temperamento peculiar.

Si una carta pudiera conmoverlo, eso sería algo extraño.

El señor del condado solo podía servir como guía en el camino de Li Jin para buscar un maestro. En cuanto a cómo Li Jin lograría conmover al viejo señor, eso dependería de sus habilidades.

Al día siguiente de su regreso al pueblo, Li Jin se levantó temprano y emprendió el camino que había recorrido durante casi un año desde que llegó por primera vez. El paisaje seguía igual, solo la actitud de los transeúntes había cambiado.

Li Jin se dio cuenta de que nunca había caminado por este camino con tanta ligereza.

Hace dos años, era un desgarbado vestido con ropas de lino y su figura era débil. Ahora su situación económica era próspera, su salud era buena y tenía a su esposo e hijs a su lado.

La mentalidad siempre cambia.

Cerca del mediodía, Li Jin se despidió del señor Song, diciendo que el funcionario encargado de entregar las buenas noticias probablemente ya estaba llegando al pueblo y que debía regresar para recibirlo.

El funcionario no solo felicitaría a Li Jin cuando se publicaran los resultados del examen, sino que también llevaría directamente la buena noticia al lugar de origen del examinado.

Li Jin regresó principalmente por este asunto, ya que no tenía parientes mayores que lo esperaran en el pueblo. Tenía que hacerlo por su cuenta.

Los pocos gers que no se llevaban bien con Qin Muwen habían echado una mirada furtiva a Qin Muwen cuando regresó. Al ver que el jefe de la aldea trató a Qin Muwen con amabilidad y no le importó su identidad, algunos hermanos se pusieron rojos de los ojos, pero no se atrevieron a mostrarlo demasiado obviamente, o la señora principal de la familia los descubriría.

Anteriormente, cuando Li Jin iba a llevar a Qin Muwen a la ciudad del condado, mientras envidiaban también pensaban que Qin Muwen no viviría mejor que en el pueblo.

Después de todo, la familia de Li Jin era pobre y en la ciudad del condado no tenía parientes, además de llevar a su familia con él. Incluso habían pensado que Qin Muwen volvería al pueblo solo con una expresión sombría.

Nadie esperaba que, al reunirse nuevamente, Qin Muwen fuera el mismo de siempre, y ellos no tenían el coraje de hablar delante de él.

Xiao'an tenía una buena relación con Qin Muwen y llevó a su hijo a verlo al día siguiente. Cuando Qin Muwen se fue, Xiao'an ya tenía seis meses de embarazo y ahora su hijo tenía cinco meses.

El primer hijo de Xiao'an era un niño, bien alimentado por su familia, con mejillas regordetas y se podía ver la sombra de Xiao'an en sus cejas y ojos. Era un niño muy hermoso.

Qin Muwen elogió: "El niño tiene buenos huesos y es tan tierno".

Xiao'an dijo: "¡Claro! Cuando nació, hacía mucho frío, así que siempre encendíamos el brasero en su habitación. No nos atrevimos a apagarlo. Gracias a cuidarlo tan bien, ahora está sano".

Qin Muwen sonrió y luego se agachó para mirar al pequeño panecillo que había venido corriendo y tirando de su ropa. Le acarició la cabeza y lo levantó en brazos, diciendo: "Este es el tío Xiao'an".

Diario Agrícola Del Doctor Li JinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora