Diario Agrícola Del Doctor Li Jin

103. Sr. Pang

Li Jin ha estado preparando medicinas por un tiempo. Sin embargo, la página de comentarios frente al joven nunca ha sido volteada. Li Jin pensó que era un poco inusual considerando la velocidad de lectura de Qin Muwen. Por eso decidió revisarla rápidamente por sí mismo.

Aparte de la sección anterior, también había algunas similares después, pero en su mayoría eran frases cortas. Solo el último párrafo ocupaba casi la mitad de la página.

Li Jin fijó su mirada en él:

"Para el autor:

Sr. Mengmi, no sé si podrás leer esta carta que he escrito, pero tengo muchas palabras en mi corazón y quiero compartirlas contigo.

Por las palabras que has escrito, puedo ver que no eres muy mayor y que tienes hijos. Supongo que te has casado hace tres o cuatro años.

Creo que deberíamos tener la misma edad, pero desafortunadamente todavía no tengo hijos. Aunque mi familia tiene poder, no puedo detener a mi esposo para que no tome concubinas. La falta de piedad filial y la falta de descendencia son graves problemas, y debido a que no he podido concebir durante mucho tiempo, su actitud hacia mí ha cambiado de preocupación y cariño al completo desinterés.

Mi antiguo amado se ha convertido en un extraño. Mi corazón ya está muerto.

Originalmente, pensé que esta vida sería una existencia tranquila y simple junto a la lámpara y el Buda, esperando una vida pacífica en el próximo mundo. Pero después de leer tus "Registros Variados", he cambiado mi forma de pensar.

Tu vida es tan envidiable, pero aún insistes en escribir. Tus palabras me dicen que solo aquellos que se esfuerzan recibirán la gracia del Cielo y podrán vivir felices.

Todo lo que viví antes fue mi propia prisión.

He tomado una decisión y estoy lista para comenzar una nueva vida. Espero que los "Registros Variados" sigan publicándose como el periódico local de la ciudad. Me comprometo a leerlo con seriedad.

Te deseo paz y felicidad."

Li Jin pasó a la siguiente página sin mostrar ninguna emoción y miró a Qin Muwen. Qin Muwen acababa de tomar un sorbo grande de su medicina y estaba a punto de tragarlo, pero se encontró con los oscuros ojos de Li Jin de manera inoportuna.

Se le atragantó en la garganta, pero mantuvo la boca cerrada y se tragó toda la medicina antes de doblarse y toser sin control.

Li Jin le dio palmaditas en la espalda para ayudarlo a respirar.

"Wenwen, el pequeño paquete ni siquiera se atraganta cuando toma sopa".

Los almendrados ojos de Qin Muwen se abrieron de par en par. ¿Cómo podía compararlo con el pequeño paquete? Pero esta vez realmente fue un accidente.

Li Jin levantó las cejas al verlo. A los ojos de alguien que vivió veintinueve años en una vida pasada y otros dos años en esta vida, Qin Muwen, de diecinueve años, era solo un niño.

Qin Muwen tosió y tomó la taza de medicina nuevamente. Esta vez estaba muy atento para no mirar a su marido mientras bebía, para evitar atragantarse.

Li Jin observó cómo el oscuro caldo de medicina llegaba al fondo de la taza. Cuando la dejó, le metió un trozo de miel en la boca.

"Esta medicina causará somnolencia. ¿Debería ir a descansar a la habitación ahora?", preguntó.

Qin Muwen bostezó como se esperaba y, cuando Li Jin lo levantó en brazos, no olvidó llevar consigo el periódico de la ciudad.

Al día siguiente, Li Jin fue a la academia, mientras Xiaocha preparaba la medicina siguiendo las instrucciones de Li Jin. Repitió el proceso de hervir la medicina varias veces y midió la cantidad de agua con precisión.