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𝐂𝐀𝐏Í𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟎𝟒: 𝐍𝐎 𝐋𝐎𝐒 𝐌𝐈𝐑𝐄𝐒, 𝐍𝐎 𝐋𝐎𝐒 𝐓𝐎𝐐𝐔𝐄𝐒, 𝐍𝐎 𝐋𝐎𝐒 𝐌𝐄𝐍𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒


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Observé a Christopher quien no despegaba su penetrante mirada de la entrada del bar, su rostro estaba totalmente tenso, las venas de su cuello se marcaban, lucía bastante molesto, luego observe a las chicas quienes al igual que Christopher miraban fijamente la puerta con la única diferencia que ellas lucían asustadas, de la nada y antes de que pudiera emitir alguna palabra las chicas me jalaron del brazo llevándome hacia el baño, cerrando la puerta tras de mí.

Ellas se miraban temerosas mientras yo las miraba totalmente confundidas. —¿Qué está ocurriendo? —Pregunte confundida.

Devon inmediatamente colocó una de sus manos en mi boca. —Shh..., No hables, por favor. —Asentí observandolas.

Si digo que no estaba asustada estaría mintiendo, estaba aterrada sobre todo por el aura que había en la cafetería en estos momentos e incluso por la cara de mis dos nuevas amigas.

—¿Qué hacen ustedes tres aquí? —Preguntó a gritos un colérico Christopher. —¡Este no era el trato, esto no fue lo que acordamos!

Un escalofriante frío recorrió todo mi cuerpo al escuchar esa risa burlona.

—De verdad me sorprende que aún sigas pensando que haremos las cosas a tu manera, Stopper. —Habló una gruesa voz. —Hemos venido por lo que nos pertenece y no nos vamos a ir de este mísero lugar hasta lograr nuestro cometido.

—¡No! —Respondió Christopher con dureza. —Ese no fue el trato que hicimos, se supone que vendrían cuando yo les diera el aviso.

—Bla, bla, bla... Sigues balbuceando cosas que no me interesan, Stopper. —Pequeños pasos se empezaron a escuchar por la cafetería.

—¿Cuántas veces debo decirte que nosotros nos seguimos órdenes de nadie, pequeño insecto?

—¿Y cuántas veces debo decirte que me importa una grandísima mierda lo que tus malnacidos hermanos y tú piensen?

Un pequeño grito salió de nuestras bocas cuando el sonido de vidrios quebrándose hicieron eco por todo el lugar, la respiración de las tres era excesivamente agitada, estábamos demasiado asustadas, tanto que nos encontrábamos pegadas a la pared, abrazándonos unas a otras, las cosas afuera parecían empeorar a medida que pasaban los segundos. Tenía muchas ganas de salir y ver qué ocurría pero los nervios y las dos chicas que se encontraban aferradas a mi no me dejaban tan siquiera mover un dedo.

Club 39: Teaser (Renewing)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora