El resto de la tarde transcurrió tranquilo. Jimin fue por Minho al club y regresaron al departamento para hacer la tarea, la cena y jugar un rato. Esperaría que Jungkook llegara para explicar al niño que sería mejor seguir manteniendo en secreto que el profesor Park pasaba las tardes con él y más aún que su papá y él se querían.
La puerta fue abierta y el pelinegro entró alegremente saludando a Minho. Jimin reverenció como de costumbre pero él se acercó y lo besó en los labios. Había sido un simple piquito, pero éste detalle había hecho erizar la piel del chico. Para el pequeño tampoco pasó inadvertido el detalle y sonrió -Mi papá quiere mucho al profesor Park... Así saludaba a mi...- de pronto el semblante decayó y se fue corriendo a su cuarto encerrándose.
Ambos adultos fueron hacia la puerta del dormitorio -Minho, abre- dijo Jungkook tocando a la puerta -¿Por qué reaccionaste así? ¿Qué pasó? Sal de ahí y platiquemos- recibió una negativa enérgica desde dentro y su actitud conciliadora se esfumó -¿Qué te pasa? ¡Soy tu padre! ¡Abre ya o entro por la fuerza!- otro grito infantil se escuchó y Jungkook comenzó a tratar de abrir.
-No, calma los dos- ordenó Park -Jungkook, te pido que te vayas a la sala, deja trato de platicar con él. Imagino lo que sucedió- El hombre empujó su lengua con su mejilla, frunció el ceño pero aceptó y se fue.
-Minho, tu papá se fue a la sala ¿Podemos hablar?- el niño no respondió, pero Jimin escuchó sollozos. Se sentó en el suelo recargado a la puerta, sabiendo que el niño estaba a esa misma altura del otro lado -Sé por qué te pusiste así. Así era como tu papá demostraba su cariño a tu mamá... Minho, tú sabes que tu papá me quiere y yo a él. Esa solo es una forma que tienen los adultos de expresar cariño, no pretendo remplazarla. Sé lo importante que son las mamás en la vida de sus hijos. Te comprendo y te quiero al igual que tu papá. Deja que él sepa lo que sientes, no se enojen entre ustedes, a él también le duele todo esto- La puerta en ese momento fue abierta y el pequeño se fue a acurrucar en las piernas y pecho de su profesor quien lo abrazó brindándole consuelo.
Unos minutos después ambos llegaron a la sala y el hijo fue a abrazar a su padre. Jungkook miró al castaño y sin emitir sonido le agradeció su intervención diciéndole 'Eres increíble, te amo'
Durante la cena abordaron un poco el tema de mantener el secreto a los demás compañeros a lo que el niño asintió y estuvo de acuerdo sin manifestar ninguna queja al respecto.
En lo que Jungkook ayudaba con el baño de su hijo, Jimin se quedó a guardar y recoger la cocina. Luego escuchó una invitación por parte de él para acompañarlos en lo que el pelinegro le leía una historia para dormir. Una vez que el pequeño estuvo en el mundo de los sueños, ambos salieron de la habitación -Lees muy lindo los cuentos Jungkook. ¿Qué día podrías ir a contar una historia al salón?- Park ya estaba pensando en la planeación de sus actividades y una situación didáctica para incluir la lectura de Jeon.
-Deja me organizo. Me encantaría hacerlo. Yo te aviso tan pronto como pueda- le daría demasiado gusto participar de algo así.
Salieron al pasillo y Jimin se iba a disponer a partir pero fue llevado a la recámara -Esta vez sí te traje a la habitación para tener sexo- admitió muy cerca del oído del castaño que nuevamente sintió todo su ser erizarse.
-Pero Jungkook... Minho está cerca- el pelinegro confirmó con un sonido mientras su boca dejaba besos y caricias al cuello y sus hábiles manos se deshacían de la blanca camisa de Park. -Es por eso que tendrás que ser silencioso. Pero además, una vez que cae dormido tenemos unas tres horas para que haya peligro de que se despierte- De todos modos, cerró la puerta con seguro.
*Aviso de puerquedad*
Se dejaba besar por toda la parte superior de su cuerpo. Sentía que Jungkook estaba siendo totalmente libre como cuando estaba con Min-ha, como si con una sola vez hubiera sido suficiente para hacer que él se sintiera cómodo con un chico. Pero más que nada, era que se sentía cómodo con él, con su chico.
Se besaron con pasión sus bocas, esa pasión que tenían reprimida desde la mañana. -Estaba pensando en lo que me dijiste en la junta... Me encantaría que te pusieras de rodillas y me llamaras Daddy mientras me das placer-
Jimin se sorprendió -Creí que lo habías dicho en broma- juraba que sí y en efecto lo había sido. Pero ahora esas palabras cobraban otro sentido.
-Lo era, pero luego me quedé pensando mientras iba en el tráfico en lo malditamente sexy que sería eso... cabe señalar que al llegar a la oficina me tuve que encerrar en el baño un rato para bajar lo que pensar en ti, me había provocado-
El chico sonrió coquetamente al saberse deseado y tener a ese hombre esperando que él le diera placer al estar en su verdadero ser. Aún sonriente, se puso de rodillas, desabrochó el cinturón y bajó el pantalón junto con los boxers, encontrándose con el gran y apetitoso miembro al que extrañaba sentir dentro de su boca. No tardó nada en engullirlo hasta la base en repetidas ocasiones. Aunque Jeon lo sacó de pronto y le tomó la barbilla para que sus miradas se juntaran -Te faltó decirme algo desde allá abajo-
-¿Qué quieres que te diga Daddy? ¿Qué deseo con toda el alma que me folles?- Jungkook lo miró, le sonrió cómplice y su miembro también reaccionó, poniéndose más duro lo que Park no desaprovechó. Al contrario, lo volvió a adentrar succionando con ganas y él mismo quitó sus prendas inferiores para junto con el oral, atender a su propia polla ya cansada de esperar.
-Ah Jimin, te sientes increíble. Sigue, solo un poco más- Los sonidos que hacía el chico al succionar y por el placer eran música para los oídos de Jeon -Agh, me voy a venir- anunció y trató de sacer su miembro de la boca del chico y apuntar para otro lado, pero fue evitado por una voz diciéndole -Dámelo todo encima Daddy- Así, fue bañado en ese instante por una gran descarga que cubrió su frente y mejillas.
La imagen frente a sus ojos era erótica, sexy y sucia a morir, jamás pensó que alguien pudiera verse tan tentador aún estando cubierto de semen. El castaño con uno de sus dedos tomó algo de la viscosa sustancia y la llevó a su boca -mmmmm delicioso...-
Fue levantado del suelo y llevado de espaldas a la cama, se dejó caer hacia atrás con el otro encima de él sin dejarle caer todo su peso. Una lengua tibia rozó sus pezones y los saboreó ambos -Aahmph...- llevó las manos a su boca. Quería gemir y aunque Minho no se despertaría, no deseaba que de hacerlo, fuera a escuchar cómo su padre lo hacía delirar de placer -Aaah, hazme tuyo. Te necesito -
Besó una a una sus piernas desde el tobillo hasta el muslo, eran hermosas, torneadas, firmes, impecablemente blancas. Las abrió y colocó a los lados para dejar al descubierto el orificio que parecía darle la bienvenida a ser traspasado. -Espera unos segundos- solicitó el pelinegro y fue al baño. Acababa de comprar un tubo de lubricante que Jimin al verlo, se sintió agradecido.
-No me imaginé que hubieras ido a comprar esto, pero es un gran detalle- Jungkook embarró sus dedos y comenzó a colarlos en el chico -Ahhmph, ahgh...- se quejaba.
-Hice caso a tus sugerencias y necesidades. Lo siento por la otra vez, no tenía idea- sus dedos entraban y salían del delgado cuerpo.
-Oh, no hay problema, no fue tan terrible, lo disfruté mucho. Aunque definitivamente es mejor con el- ya estaba totalmente dilatado en poco tiempo, en parte porque no había pasado tanto tiempo desde la anterior vez.
Jungkook alineó su miembro y entró a la cavidad -Ah si, se siente mucho mejor así-
En ese momento Jimin cayó en cuenta ¡Quizá Jungkook sentiría lo mismo que con Min-ha y se daría cuenta de que siempre estuvo follando con un chico!
*Continuará la puerquedad*
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Mi gente hermosa, gracias por leer. Gracias a quienes se han ido sumando a esta historia. Me da mucho gusto la acogida, ya casi vamos por los 3K y esto apenas va casi comenzando. Se nota que les gusta la puerquedad jajajajaja.
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Amo cada versión de ti
FanfictionJungkook vive en Busan con su bella esposa y un hijo a quienes adora. Sin embargo, un día al regresar a su casa, su esposa no está por ningún lado, se había marchado sin dejar rastro. Al darse cuenta que nunca regresará, toma la decisión de mudars...