ɢɪʀᴏ ɪɴᴇꜱᴘᴇʀᴀᴅᴏ - ᴀɢᴜꜱᴛÍɴ ɢɪᴀʏ

18

Aman

—los quiero durmiendo a los cuatro. Ahora.—papá entra a nuestra habitación y nosotros dejamos de reírnos inmediatamente.

Luego de la cena, nos volvimos los cuatro a la habitación porque después del entrenamiento habiamos planeado que anres de irnos a dormir ibamos a jugar a verdad o reto, y a Mati le tocó dejarse que yo le haga un peinado super lindo.

—si Masche, enseguida.—habla Mati mientras se desarma mi super peinado.

Se le escapa una risita a papá.—¿qué te hiciste en el pelo Matias?.

—tu hija, tuve que dejarme si o si porque era un reto.—se desordena un poco el pelo y se acuesta en la cama.

Yo me pasé a la mia y Colo después.—ya nos vamos a dormir pa, podes irte.

—no quiero escuchar el más mínimo ruido.—nos señala a los cuatro mientras sale de la habitación.

—¿se lo van a tomar enserio o podemos seguir jugando?.—susurré cuando pasaron varios segundos y ellos seguían en silencio.

—solo un rato más.—dice Colo a mi lado y lo miro. Me guiña el ojo mientras se levanta para volver a sentarse en la otra cama.

Yo hice lo mismo sentandome a un lado de Mati en indiecito. La botella sigue en el mismo lugar pero la giré, y veo que frena en Colo.

—yo le pregunto.—Mati me gana de mano. Sigue acostado como antes.—¿verdad o reto, Colorado?.

La piensa por unos segundos mirando a otro lado.—reto.

Veo la sonrisa maliciosa de Mati. Por dios, Mati no tiene buenas ideas nunca.—te reto a darle un beso a Aman.

Lo miro sorprendida al igual que él.—pe-pero tengo..—Agus lo interrumpe.

—¿no puede ser otra cosa? Dale, él tiene novia.

—es solo beso eu, nadie se va a enterar.—larga una pequeña risa.

Colo me mira con lástima, que en realidad lo hace como para disimular frente a los chicos, y yo miro a Agus. Tiene la mandíbula tensa y parece enojado.

—¿puede ser un pico?.—le habla Colo mientras lo mira.

—tiene que durar mínimo 5 segundos.

—bien.—se acerca a mi, aunque esté a mi lado, y me dedica una sonrisa de boca cerrada disimulada antes de apoyar su boca sobre la mia.

Actué como si me hubiera sorprendido porque ya lo sentí, pero se supone que no saben. Abrí apenas mi boca y Colo aprovechó para hacerlo más intenso, como si no quisiera separarse porque sería la última vez que lo haría. Habia puesto su mano en mi cuello para evitar que me separara y luego de, no sé, casi 10 segundos el beso lo hizo más desesperado.

—bueno basta, yo creo que ya fue suficiente.—escucho la voz de Agus y Colo se separa de a poco, volviendo a sentarse donde estaba.

Sonreí para abajo y bajé la cabeza. Esto ya no fue tan divertido.—listo. Me parece que ya nos tendríamos que ir a dormir.—me levanté de la cama pero me quedé parada.

—juju, eso estuvo genial.—Mati refriega sus manos y sonríe de forma divertida.—pero creo que sí es mejor que nos vayamos a dormir.—se acomoda bien en la cama y yo miro a Agus. Parecía enojado, porque ni me miraba.

Fui a apagar la luz grande, y solo quedó la de la mesita de luz en medio de las dos camas prendida. Colo ya se había acomodado como anoche y Agus también ya estaba acomodado del lado de su cama pero boca abajo.