Severe Social Anxiety [König x Lectora]

~[12]: Rostro y beso, parte I

[Nota de autor]: Nada de contenido +18 pero si escenas explícitas.

Esa noche no pudo dormir nada, tenía el maldito coño todo mojado gracias a que su caliente coronel se la pasó toda la madrugada frotandole el miembro en las nalgas, la tenía completamente acorralada.

König ya se encontraba algo más sobrio, pero continuaba apretando su cuerpo contra ella, lo hacía inocentemente creyendo que ella era alguna especie de body pillow o algo por el estilo.

Ella pudo sentir esa erección otra vez con fuerza empujar desde atrás presionandose contra su espalda baja, era caliente y grande por la sensación que le indicaba su piel en aquella zona.
Se mordió el labio para no hacer ningún ruido pues en el fondo lo estaba disfrutando con ganas y no quería espantar al coronel.

Sentirse acorralada y apresada por el cuerpo de ese enorme hombre mientras le frotaba su miembro en la cadera era una sensación que la excitaba de una forma extraña.

Su coño comenzó a humederserce mucho más que antes, podía sentir el calor subiendo por su cuerpo, imaginaba como sería ser follada con fuerza por su superior mientras le dominaba con ese cuerpo gigante.

Por un momento se sintió estúpida ya que se estaba comportando peor que una adolescente hormonal y puberta, pero es que era imposible resistirse a eso sabiendo lo buenísimo que estaba su coronel.

~

Se levantó cansada, muy cansada.

No logró dormir nada y los pocos minutos de sueño que había conciliado luego de que el coronel se quedara quieto, fueron interrumpidos por la alarma de su celular.

Al girarse hacia al otro lado ya no estaba su superior detrás de ella, era como si se hubiera esfumado porque tampoco lo podía encontrar en todo el dormitorio.

La resaca golpeó la cabeza de ________ y se mareó un poco mientras se sentaba sobre su cama, parpadeó lentamente masajeando su frente y resopló. Por eso no bebía, no le gustaban las resacas.

Aún el sol no salía, miró la hora en su celular y eran apenas las tres de la mañana. Price les había dado varios días libres así que podría dormir un poco más, pero la calor que tenía gracias a la excitación que le había provocado aquella escena de hace unos minutos no la dejaban dormir, por no mencionar que tenía el coño pegajoso y resbaladizo, incluso un poco de aquel liquidillo se le había filtrado por las bragas.

No podía creer que su coronel le provocaba esas cosas.

Agitando su cabeza aún adolorida, se puso de pie en silencio para ir a refrescarse en el cuarto de baño de los dormitorios de la base. Tomó su toalla de ducha, jabón, shampoo, pasta dental y cepillo, quería refrescarse de pie a cabeza.

Con puntillas avanzó en el dormitorio de sus compañeros alumbrando con la pantalla de su celular, viendo sobre su camarote a Eric abrazando al nuevo recluta ambos arropados hasta el cuello, el más joven estaba descansando sobre el pecho del otro.

"¿Eric gay?" Pensó confundida, pues el tipo decía ser 100% 'hetero', que él era el comecoños 3000 o algo así.

En fin.

Avanzando hasta la puerta en silencio, abrió con cuidado la cerradura y salió al pabellon, el cual estaba algo tenue pues aún estaban en función las luces nocturnas. Ya un poco más confiada avanzó hasta las duchas de los dormitorios, lo único que resonaba en el lugar era el sonido de sus chanclas chasqueando contra el piso y sus pies.