69/Narrado

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Los días pasaron con normalidad, Zabdiel continuaba trabajando en el estudio junto a sus amigos, mientras que Christopher hacia algunas cuantas campañas y otros asuntos de trabajo, pero aún así se veían por algunos lapsos en el día. Ya sea que el castaño acompañaba al boricua al trabajo y estaba con el o viceversa.

Pero ambos estaban bien y muy felices, si que llevarán muy poco de relación ellos estaban muy contentos, pues era evidente el cariño y el amor que sentían el uno por el otro; eran unos chicos muy enamorados y eso era muy evidente para todos. Y los amigos de ambos estaban contentos por ellos pues sabían muy bien que entre ellos había una conexión especial.

Los amigos del castaño aceptaban muy bien al boricua, todos solían convivir en ocasiones y se la pasaban bastante bien, hasta podrían decir que ya todos eran amigos.

Y no solo eso había pasado, pues la madre del ecuatoriano había viajado por unos cuantos días a Miami, puesto que quería ver a su hijo ya que tenían unos cuantos meses desde que no lo veía y quería pasar un tiempo con el, y no solo eso pues además había visto las publicaciones de si hijo y tenia muchas ganas de conocer al novio de su hijo.

Y por tal razón se encontraba muy nervioso, ya que le había comentado a su novio la noticia, y este estaba muy emocionado por tal idea, sin embargo el tenía mucho pánico puesto que nunca le había presentado a alguien a su madre, si había tenido relaciones anteriormente pero nunca nada serio.

Y había llegado el día en el que irían a conocer a la madre del ecuatoriano, irían a comer a un restaurante y ahí Christopher los presentaría a ambos.

Christopher había pasado por Zabdiel a su departamento y irían hasta el restaurante, pues su madre le dijo al ojimiel que no era necesario que fuera por ella, el no muy convencido acepto.

Cuando llegaron al lugar este estacionó el auto y antes de bajar tomo la mano del mayor y hablo.

--–Tengo muchos nervios Zab, nunca le he presentado a nadie a mi mamá y no quiero que nada salga mal --expreso.

––Tranquilo bonito, todo estará bien, tu piensa positivo ––le responde y da caricias en su mejilla.

––Yo se que debo de ser positivo y eso, pero tengo miedo, ella puede ser muy linda cuando alguien le cae bien pero cuando no es así, ella da miedo ––hizo una cara de susto y este río.

––No creo que sea tan malo Chris ––continúa tratando de tranquilizarlo.

––Te lo juro, cuando mi hermano le presento a su primera novia y a ella no le cayó bien, pues era evidente y cuando se enteró que ella lo engaño, pues ella quería matarla de una manera muy literal ––solto una pequeña risa al recordar eso.

––Que bueno que me dices eso, para tener en cuenta de no engañarte ––bromea.

––¡Zabdiel! No es momento para bromas, esto es serio ––le pega un golpe en el hombro.

Este ríe divertido y niega con la cabeza, besa su mejilla y le sonrie.

––Te aseguro que todo saldrá bien, pero anda vamos, no quiero darle una mala impresión a mi suegra.

Christopher ríe por aquello y asiente, ambos bajan del auto y caminan tomados de la mano y entran al lugar, el menor busca con la mirada a su madre y la encuentra sentada en una mesa en el centro del lugar, caminan hacia ella y cuando la mujer los ve se levanta y les dedica una so risa.

––Hola mamá ––saludo y soltó la mano del boricua para abrazarla.

––Hola mi amor ––corresponde a su abrazo y lo besa en la mejilla.

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