118/Narrado

67 7 1
                                    

Por fin el día había llegado.

Después de siete meses de planear la boda, al fin había llegado el día en el que Zabdiel y Christopher iban a casarse. Todos estaban muy emocionados por la pareja, pero sobre todo ellos dos.

Cada uno tenia muchos sentimientos y sensaciones dentro de todo su ser y cuerpo, sentían que la felicidad no les cabía en su cuerpo, y ni que decir de los nervios.

Por un lado estaba el ecuatoriano quién se estaba arreglando en la habitación que le había sido designada junto a su amigo pelinegro y a la mexicana, quienes no paraban de decirle lo feliz que estaban por él y desearle lo mejor para su matrimonio con el boricua, además de que la chica no paraba de recordarle cada uno de los momentos que había vivido juntos Y cómo es que habían llegado hasta ese punto en donde su amigo castaño estaba a tan solo horas de casarse.

Christopher estaba demasiado feliz que se sentía que estaba en un sueño y del cual no quería despertar nunca más, pues todavía no podía terminar de creerse que ese día se casaría con el amor de su vida, por qué si, para el Zabdiel era el amor de su vida y para toda su vida, no tenía duda de eso es más nunca había tenido duda de aquello. .l

Después de que el rubio le había propuesto matrimonio él no había parado de imaginarse cómo es que sería su boda y el momento tan especial en el que ambos se dieran el sí, y debía decir que todo lo que habían estado planeando Y preparando estaba superando todo lo que había soñado; el no quería nada lujoso ni ostentoso, es más quería algo sencillo y muy intimo, quería que la gente más especial estuviera ahí para ambos, por lo que solo había familiares muy cercanos a ambos y amigos muy allegados, no sería la boda del año como lo hacían ver algunos titulares.

Pues cuando la noticia salió a la luz de que ellos se casarían, las revistas y programas amarillistas comenzaron a decir que harían una boda en grande y que irían celebridades de todo tipo y que sería una boda de estrellas o al menos así lo habían nombrado todos ellos. Pero eso no tenía ningún sentido o al menos no para ellos, ya que no querían tener a todos los reflectores sobre ellos y además de que querían que fuera algo completamente especial para ellos y todos aquellos quienes estuvieron apoyándolos desde el día uno o que se sumaron en el camino.

El castaño aún no se ponía su traje ya que según él no quería arruinarlo o hacerle alguna arruga, a lo que sus amigos se rieron un poco de él pero respetaron su decisión, sabían que para el ecuatoriano era un día demasiado importante y quería que todo saliera perfecto y ellos mismos le ayudarían para que así fuera y ver feliz a su pequeño amigo. Kenia y Erick eran algo así como sus acompañantes de honor, pues debido a la insistencia de su madre que debía de tener a damas o chicos de honor, a él le parecía algo gracioso sin embargo para mantener un poco la tradición y darle el gusto a su madre, le pidió a sus amigos que ellos fueran su dama y chico de honor. El cubano vestía un traje negro al igual que la chica, pues la pareja había decidido que sus amigos fueran completamente de negro así como ellos, pues cabe destacar que el traje de cada uno era elegante y formal, pero no querían caer en lo convencional y clásico de los trajes comunes de boda, queriendo algo más moderno y que fuera completamente su estilo y lo mismo para todos sus amigos.

Christopher suelta un suspiro cuando se acerca a la ventana y observa como todo abajo estaba listo, Ya solo faltaba un par de horas para que la ceremonia religiosa comenzara y los nervios seguían dentro de él.

––Debes de estar tranquilo, no creo que el día de tu boda quieras tener una crisis de ansiedad ¿O sí? ––dijo divertida la mexicana.

Christopher voltea a mirarla y niega con una sonrisa.

––Gracias por estar aquí Kenia, de verdad que lo valoro mucho ––dijo acercándose a ella para tomar su mano.

––Ni que lo digas Chris, es la boda de mi mejor amigo, claro que debía de estar contigo ¿Que clase de amiga sería si no estaba aquí? ––mrnciona regalandole una sonrisa.

Instagram  [Chrisdiel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora