Laura se encontraba frente al bar al que solían ir con frecuencia, pero notó que aún estaba cerrado. Era extraño, ya que solía estar abierto a esa hora. Con lágrimas en los ojos, Laura miraba a través de la ventana, recordando todos los buenos momentos que había pasado allí.
En ese momento, Sarah y Daniel llegaron al lugar, notando la tristeza en el rostro de Laura.
Sarah: (preocupada) "Laura, ¿qué pasa? ¿Por qué estás llorando?"
Laura: (con voz entrecortada) "El bar... está cerrado. No puedo creerlo. Era nuestro lugar especial".
Daniel: (poniendo una mano reconfortante en el hombro de Laura) "Lo siento mucho, Laura. Sé lo importante que era este lugar para vos, para todos nosotros en realidad".
Sarah: "Tenemos que encontrar una forma de animarte. No vamos a dejar que esto arruine nuestro día".
Daniel: "Tenes razón. ¿Qué te parece si buscamos otro lugar para pasar un buen rato juntos? Seguro encontraremos algo divertido por hacer".
A pesar de su tristeza, Laura agradeció el apoyo de sus amigos y decidió seguir adelante.
Laura: "Gracias, chicos. No quiero que esto arruine nuestro día. Vamos a encontrar otro lugar donde podamos pasar un buen rato".
Laura: "Si quieren, podemos ir a mi casa. Podemos preparar algo para comer y pasar el rato juntos. A veces, la comodidad del hogar puede ser reconfortante".
Sarah: "Eso suena genial, Laura. Me encantaría pasar un rato agradable en tu casa".
Daniel: "Estoy de acuerdo. Será agradable relajarnos y disfrutar de una buena comida en un ambiente acogedor".
Los tres amigos se dirigieron a casa de Laura, compartiendo risas y conversaciones en el camino. Al llegar, se acomodaron en la sala y comenzaron a planear qué cocinarían juntos.
Laura: "Tengo algunos ingredientes en la despensa. ¿Qué tal si preparamos unas deliciosas pizzas caseras? Podemos elegir nuestros propios ingredientes y hacerlo divertido".
Sarah: "Me encanta la idea de hacer nuestras propias pizzas. Será divertido experimentar con diferentes sabores y combinaciones. ¿sabes? tantos años y nunca habíamos venido a tu casa."
En ese momento laura recordó años atrás a su abuelo diciendo a su madre: "está bien que tu hija y tu vivan aqui, es tu casa también, pero no quiero a nadie más extraño"
Laura sintió un escalofrío recorriendo su espalda al recordar las palabras de su abuelo. Eran palabras que habían resonado en su familia durante mucho tiempo, pero que nunca había entendido completamente. Ahora, con Sarah y Daniel en su casa, se preguntó si su abuelo hubiera aprobado su presencia.
Laura: "Es curioso, pero ahora recuerdo algo que mi abuelo solía decirle a mi madre. Parece que tenía ciertas reservas sobre tener a extraños en esta casa".
Sarah: "¿En serio? Eso suena intrigante. ¿Sabes por qué se sentía así?"
Laura: "No estoy segura. Mi madre nunca me lo explicó completamente. Pero siempre tuve la sensación de que había algo más detrás de esas palabras".
Daniel: "Es comprensible que tu abuelo pudiera tener sus propias razones y creencias. Pero estamos acá como tus amigos, y siempre hemos respetado tu hogar". Luara: "cuando nos fuimos de mi antiguo hogar, y llegamos acá recuerdo que el abuelo se volvió más sobreprotector." dijo Laura y se quedó pensando. "era un hombre agradable pero la gente le tenía miedo"
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El BOSQUE OSCURO
AlteleSarah es una joven bióloga que tiene como sueño poder adentrarse en el bosque oscuro y descubrir toda su belleza y misterios. Laura una joven tarotista Sabelo todo que oculta un gran secreto. Daniel un muchacho muy aventurero pero algo distraído, y...