JoJo's Bizarre Adventure: Andes Speed Run

The Real Slim Shady vs. Todos - Parte 1

—¡¿Qué demonios?! —exclamó Chayanne luego de ver el cuerpo de Blades ser carcomido por cientos de insectos hasta desaparecer.

—Si vamos a quitarle la reliquia, tendremos que atacar a matar —indicó Redbone.

Joe pensó en ello.

—Bajemos —dijo.

Los tres se deslizaron a través de las paredes hasta llegar a la altura de Eminem quien examinaba la moneda con detenimiento.

—Les dije que tenían suerte de haber sobrevivido —dijo Eminem—, y también les dije que no se metan en mis asuntos.

Giró, sonriendo al ver a Chayanne, Joe y Redbone.

—Ah... JoJo. No esperaba verte.

—Emmanuel, entrega esos objetos. Son muy peligrosos. Mucha gente ha muerto por obtenerlos, incluido Dolton —dijo con la voz dolida.

—¿Quién?

—¿Dolton está muerto? —preguntó Chayanne—. ¿Cómo pasó?

—Es por lo ocurrido en Cuzco. Su estómago fue atravesado y no pudo resistir demasiado —Joe tenía un nudo en la garganta que le impedía seguir hablando.

—No sé de quién coños hablan, así que me iré. Esta es su última oportunidad para agarrar sus cosas y largarse, si los veo de nuevo, tendrán el mismo destino que esta calavera —tomó el cráneo de Blades y movió la quijada—. ¡Sí, ya vayánse! Ja, ja, ja, ja.

Unas sogas se deslizaron alrededor. Los agentes de la Fundación Speedwagon se lanzaban, con pistolas en mano, para atacar a Eminem.

—En el caso de estos tipos...

Eminem extendió sus alas y voló hacia los agentes, recibiendo los impacto de balas en su cuerpo.

—¡Aaaahhh! —exclamó uno de los agentes cuando Eminem lo agarró de la cara, absorbiendole su energía vital y luego lanzarlo contra otros agentes.

Antes que siga subiendo, sintió un jalón en su pierna. Se trataba de Chayanne quien estaba por atacar con una onda Hertz.

—¿Nunca se rinden, verdad?

Las alas de Eminem se arquearon. Chayanne sabía que no tendría oportunidad si seguía elevándose o lo atacaba con las alas, por lo que escaló hasta quedar frente a frente y lanzó varias ondas Hertz que impactaron en los brazos de Eminem.

Debido al bloqueo, el stand de Eminem se hizo presente. Pero Chayanne ya estaba descendiendo. Iba a seguirlo, pero los disparos no se detenían.

Las alas volvieron a su espalda y voló hacía el dirigible.

Formó un mazo con sus manos y destrozó el puerto de enganche donde estaban atadas las sogas que sostenían el destruido dirigible de Blades.

Entró sin ningún problema al dirigible de la Fundación, mientras el otro dirigible caía al agua.

—¡Sujétense! —exclamó Chayanne.

—¡¿De dónde?! —preguntó Redbone.

Los restos del dirigible cayeron al lago, formando una enorme ola.

Mientras tanto, los agentes rodeaban a Eminem con lanzallamas, pistolas y armas AK-47.

—Desactiva tu stand y no saldrás herido —dijo Archie enérgicamente.

Eminem se sacudió la oreja y lanzó el cerumen a la gabardina de Archie.

—Nadie me dirá lo que tengo que hacer —sentenció y lanzó cientos de escorpiones a todos lados.