capítulo 1

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Brooke se apresuraba para llegar a la tienda de Anya y poder explicarle lo sucedido esa misma noche en la que Abby le había pedido ayuda a través del espejo y poder averiguar cómo lo había conseguido.

Aparcaba el coche rápidamente y con paso ligero, llegaba a la esquina en donde estaba la tienda de su amiga Anya, la bruja que en su momento, ya había visto a Abby y sabía que algo le sucedía.

Entraba en la tienda haciendo que la campanilla que estaba enganchada arriba en la puerta, hiciera un sonido dulce pero fuerte al ser tocada y avisar a la dueña de que tenía un cliente nuevo.

Cerraba la puerta acompañándola lentamente mientras que Anya salía tras una cortina de de tiras estridentes y sonoras.
Ambas se miraron unos segundos y la aludida saludó con una sonrisa de oreja a oreja.

— ¡ Brooke! Cuanto tiempo — Le decía acercándose a ella con entusiasmo y llevándosela a los brazos con ternura. — Me alegro de verte, hacía mucho que no venías por aquí.

Ambas se apartaron lentamente y Anya observó lo demacrada y cansada que estaba, no dijo nada al respecto, esperó que empezara ella.
Brooke en cambio, hacía mueca con su labio y se disponía a no perder el tiempo.

— Lo sé, lo siento, he estado ocupada con el trabajo y demás.

Anya elevaba su ceja sabiendo que en realidad, no estaba siendo sincera del todo.

— Bien, tú dirás.

Cogía aire despacio para calmarse — Abby — La miró a los ojos — Se ha puesto en contacto conmigo.

Anya fruncía el ceño confusa — ¿ Qué? ¿ Lo dices en serio?

Asentía con rapidez — Si y no está en paz Anya — Respondía mientras sacaba su teléfono móvil de su bolso y buscaba en su galería la fotografía que había hecho al espejo antes de que se evaporara el mensaje y se lo mostró — Como puedes ver, ella no está en el cielo. Yo tenía razón, está en el infierno — Proseguía mientras que Anya le devolvía el teléfono y se daba media vuelta para ir hacia la barra en donde atendía a sus clientas — Ese íncubo se la llevó con él, no murió por causas naturales, realmente estaba siendo poseída o algo que la llevó al coma.

Anya se masajeó la sien y los ojos con paciencia — Brooke, ya te dije y te vuelvo a repetir que eso es imposible.

— Tú misma viste como estaba, tocaste su colgante, alguien le hizo algo, una bruja oscura.

La miró — ¿ Y me puedes explicar con qué motivo una bruja negra estaría interesada en hacerle algo malo a alguien que no le afecta en su vida?

— ¡ No lo sé! — Contestaba elevando su voz, ahora calmándose y carraspeando su garganta. — No lo sé — Repetía — Solo sé que ella me ha pedido ayuda.

— ¿ Has pensado que a lo mejor lo has escrito tú en sueños ?

— No, escuché un grito, era su voz, me estaba llamando.

– Brooke...

— No Anya, era ella — La cortaba con impaciencia.

Cogía aire y lo soltaba nasalmente intentando calmarse, sabiendo lo tozuda que podría llegar a ser cuando se le metía algo en la cabeza, por ello  decidió darle una tregua y bajar un poco la guardia para que se explicara y así puede que así, se diera cuenta que lo que estaba diciendo era una absoluta locura.

— Está bien, pongamos que lo que dices es cierto. — Pausaba viéndola relajarse, prosiguió — ¿ Porqué? ¿ Porqué alguien querría hacerle eso? Y no solo ese detalle, sino, ¿ Cómo lo hizo? Y lo más importante de todo...¿ Porqué ahora? ¿ Porqué después de cinco años, ahora tienes noticias de ella?

ÍNCUBO 2 : La venganza de Brooke ( TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora